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Jacqueline Medina+1
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nota: los personajes están humanizados
Capitulo 1:
Pov Rigby:
Me desperté, los rayos de sol que apenas entraban en mi cuarto me daban directamente en el rostro. Era un nuevo día. Me levanté, fui al baño para asearme, salí y me puse el uniforme del nuevo colegio al que asistiría. Hace aproximadamente dos meces, le dieron un empleo a mama lejos de donde vivíamos, así que nos tuvimos que mudar a una gran ciudad, la verdad me alegra, donde antes vivía no tenía muchos amigos. Siempre estaba solo o siendo molestado por todos los chicos debido a mi baja estatura. Tampoco salía con chicas, siempre que me les declaraba me rechazaban, siempre. Estoy un poco emocionado, quiero conocer nuevas personas y, con suerte, un amigo, aun que sea solo uno. Bajé a desayunar, lavé mis dientes, y media hora antes de que empezaran las clases, yo ya estaba listo… o al menos, eso creí…
-¿hijo, que haces aquí? ¿No se supone que tu ya debes de estar en el colegio?- me preguntó mi madre confundida.
- pero aún falta media hora, ¿lo ves?- le mostré el reloj que tenía en la muñeca.
- ¿acaso no te dije anoche que ajustaras el reloj a la zona horaria de aquí?
- ahhh… no… espera, ¡¿zona horaria?!
- sí, aquí es una hora más que donde antes vivíamos
- ósea que…
- tus clases comenzaron hace media hora
- ¡¿Qué?!
Tomé mi mochila de un sofá y salí corriendo de mi casa. Lo peor de todo es que mi casa está a 20 minutos de la escuela. Enserio soy tan idiota. Cuando finalmente llegué al colegio me sentí aliviado de que me dejaran entrar. Estaba sudando, nunca había corrido tanto en mi vida, tenía demasiada sed, por lo que decidí pasear por el campus para buscar alguna máquina expendedora. Estuve vagando alrededor de 10 minutos cuando finalmente encontré una. Introduje una moneda, tecleé un código y salió una botella de agua, la abrí y comencé a tomar de una manera torpe y desesperada. Enserio tenía una sed del infierno. Fue entonces cuando escuché un ruido que venía de la parte de atrás de la máquina. Asomé la cabeza y pude ver que había dos chicos grandes y fuertes golpeando a otro, un sujeto lo tenía sujetado y el otro le daba golpes sin piedad en el estómago, mientas que el agredido escupía sangre. No podía quedarme ahí sin hacer nada… corrí hacia ellos y puse un gran golpe en la mejilla del que lo estaba sosteniendo provocando que lo soltara y ambos cayeran al piso, el otro sujeto se giró hacia mí.
-parece que tú también quieres una paliza- dijo amenazadoramente mientras se acercaba a mí con una mirada de pocos amigos.
El tipo que estaba siendo agredido se paró forzosamente del piso, caminó hacia nosotros, jaló al sujeto que me estaba a punto de golpear hacia atrás, después se acercó a mí y me dio un fuerte golpe en la mejilla.
-¡¿pero qué demonios te pasa?!- Dije molesto y coloqué mi mano donde recibí el golpe- te salvo de estos dos idiotas ¿¡y me lo agradeces golpeándome?!- me acerqué.
-¡no tenías porque meterte en esto! ¡No es tu asunto!- se acercó más a mí y puso un dedo en mi pecho.
-¡oigan! ¡No se olviden de nosotros!- dijo un sujeto molesto mientras corría hacia el que estaba parado enfrente de mí.
-¡tú cállate!- dijimos al mismo tiempo. El tipo paró de correr y su rostro se volvió el de un debilucho asustado, y junto al otro sujeto se fueron de ahí de una manera cobarde.
-escucha… ammm…- me dijo un poco más calmado.
-Rigby
-oh, escucha Rigby, no sé quien seas, pero no tenías porqué meterte en eso
-pero si estabas perdiendo ante ellos- dije con una voz un poco fuerte.
-pff, lo tenía totalmente controlado- cruzó los brazos.
-si claro, como no- levanté una ceja
-está bien, tal vez me estaban ganando… pero eso no quita el hecho de que te metiste en lo que no te importa- hablaba cada vez más fuerte.
-si no me hubiera importado no te habría salvado y te hubiera dejado morir- imité su tono de voz.
-pues me hubieras dejado morir, de todas formas no es como si mi vida fuera igual a la tuya, para mí la vida no es como miel sobre hojuelas- su mirada se volvió opaca. Ese comentario me hiso estallar.
-¡¿y qué sabes tú de mi vida?!- el me miró un poco confundido- ¿¡acaso sabes el dolor que he pasado todos estos años?! ¡No sabes lo que se siente que todos te crean inferior! ¡Que se aprovechen de ti! ¡Que seas la burla más grande de toda la historia!- podía sentir como mis ojos se hacían cada vez más acuosos.
-oye, tranquilo, no es para tanto.
-idiota- limpié mis ojos con la manga de mi sudadera y me acomodé la mochila. Le di la espalda y me alejé de él hacia la máquina.
-espera- volteé, él estaba recogiendo su mochila del suelo, la sacudió un poco y corrió hacia mí- eres nuevo, ¿no?
-si- respondí algo frío.
-¿en qué clase estás?
-ahhh… 2-B
-wow, yo también- me sonrió ampliamente.
-¿enserio?- levanté una ceja.
-sí, vamos… por cierto, me llamo Mordecai- empujó levemente mi hombro y comenzamos a caminar hacía el salón.
El camino fue silencioso, no hablamos nada. Entramos a un pequeño edificio, subimos un par de escaleras y fuimos a nuestro salón. Estaba un poco nervioso, desde afuera se podía escuchar la voz firme del profesor.
-¿asustado?- me dio un ligero codazo en las costillas y me guiñó un ojo.
-claro que no- dije mientras abría lentamente la puerta.
Me empecé a sentir extraño, en cuanto entramos todos nos miraron de una forma muy extraña, incluso el profesor. Fue un momento demasiado incómodo, hasta que el profesor habló.
-vaya, vaya… creí que ya no vendría joven Mordecai- le dirigió una mirada fulminante mientras se acercaba a su escritorio y sacaba una pequeña lista. Mordecai sólo sonrió de una manera muy idiota.- bien, puede pasar- Mordecai entró al salón- ¿usted quien es jovencito?- me miraba detenidamente.
-s-soy nuevo- me puse un poco tenso al sentir su mirada, fue como si pudiera ver mi alma.
-mmm…- vio la pequeña lista que tenía en la mano y comenzó a buscar algo- ¿joven Rigby?
-s-si
-tome asiento por favor.
Dirigí mi vista hacia el salón para poder buscar un lugar disponible. Había uno, entre Mordecai y una chica bajita con lentes. Entré al salón y me senté ahí. Las clases comenzaron, yo estaba nervioso… fue una mañana emocionante: me levanté tarde, corrí como si estuviera en un maratón, le salvé la vida a una persona arrogante que resultó estar en mi clase, conocí a un maestro que puede ver a través de mi, ah, claro, no olvidemos que también me golpearon… me pregunto qué más me pasará en mi primer día en este colegio…
o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o
espero que les guste... díganme si quieren conty
bye bye
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"~clari~Sama~"+1 .
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kyaaaaa que lindo
conty conty jejeje
bueno me gusto como escribes
matta ne. -
Jacqueline Medina+2 .
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Capitulo 2:
Pov Rigby:
Ese tal Mordecai es demasiado molesto, durante toda la clase se la pasaba hablándome y diciendo cosas tontas. También me mandaba papelitos con caritas y frases como “hola nena, que tal”. Fue la clase más desesperante de toda mi vida, lo bueno fue que como llegamos tarde la clase duró poco tiempo, el timbre señaló que se había terminado la clase. El maestro salió del aula, no sin antes darle a Mordecai una mirada un poco rara que no pude descifrar. Las demás clases fueron iguales que la primera, el profesor hablaba y Mordecai lo interrumpía algunas veces, es desesperante, enserio… pero, lo admito, algunas de sus tonterías si me daban gracia. Durante el almuerzo, pasó lo que esperaba, se acercó a mí y estuvo conmigo todo el tiempo. La verdad le agradezco eso, sin él, yo estaría solo… al igual que en la otra ciudad. Eso es lo que me daba un poco de miedo, me daba miedo que todo fuera como ahí, que todos se burlaran de mi…
El día se pasó demasiado rápido. Antes de que me diera cuenta, ya era la última clase: gimnasia. Entró al aula un profesor joven de cuerpo atlético.
“Ah… si tan solo me viera como el… tendría a muchas chicas…”
Mi pensamiento terminó cuando escuché decir una voz grave que decía mi nombre.
-¿eh? ¿Qué?- dije confundido mientras notaba que todos me estaban viendo. Miré al profesor y este me dirigió una mirada de desaprobación mientras anotaba algo en su lista.
Siguió nombrando más personas… hasta que una voz un poco chillona llamó mi atención… era la chica que estaba a mi lado. La miré, era linda, pudo sentir mi mirada y volteó hacía mí, yo la seguí viendo, provocando un leve sonrojo de su parte, la miré, hasta que un golpe en mi hombro me hiso regresar hacia la realidad… era Mordecai. No me sorprendió que me golpeara, sino la cara con la que lo hiso… era una cara de enojo y tristeza… enserio este tipo es raro.
Cuando terminó de decir nombres nos dio una pequeña plática sobre el festival deportivo que se acercaba ese mes. Después de eso, todos fuimos a la cancha deportiva, pero antes teníamos que ir a los vestidores para utilizar la ropa adecuada, como esperaba, Mordecai me acompañó… el profesor me llamó mientas todos los demás chicos se cambiaban.
-¿Qué sucede profesor?- fui hacia el junto con Mordecai.
- lo que pasa es que…- se rascó la nuca, nervioso- el uniforme que encargamos para ti… aún no ha llegado…
- y eso significa…- dije confundido. Él suspiró.
- tendrás que usar un uniforme para mujer- dijo con un tono muy tranquilo.
-¿¡QUE!?- Mordecai soltó una gran risa. Llamé la atención de todos los chicos con mi grito, me miraron.
“¿¡cómo rayos se le ocurre que me voy a poner un uniforme de chica!?”
-vamos amigo- Mordecai me dio un ligero codazo en las costillas mientras aún reía.
-no- le dije a Mordecai- no pienso utilizar un uniforme de mujer- le dije al profesor con un tono desafiante.
-pues qué lástima… o usas el uniforme o estás reprobado en mi clase- me respondió con el mismo tono que yo. Me miró de una manera incómodamente seria, provocando que me tensara.
-oiga, usted no puede hacer eso- la sonrisa de Mordecai se borró en pocos segundos. Se puso frente a mí.
“de esto no puede salir nada bueno”
-claro que si puedo- cada vez estaban más cerca- ¿acaso usted…- puso su dedo en el pecho de Mordecai- …va a venir aquí a decirme como hacer mi trabajo?
-no- tomó la muñeca del profesor fuertemente- pero no es justo que sea así con él.
La mirada que le dirigió Mordecai hiso que mi sangre se helara. Al parecer su agarre fue demasiado fuerte, el profesor no podía soltarse, y eso que se veía que enserio se ejercitaba. Tardó unos 20 segundos, pero el profesor se pudo soltar finalmente.
-¡chicos!- les dijo a los demás- vayan afuera- todos salieron rápidamente de ahí- tu también- me dijo a mí.
Era una situación bastante difícil… no sabía qué hacer. Por una parte, quería salir de ahí lo más rápido posible… pero por otra, no quería dejar a Mordecai sólo con éste hombre ahí… tenía miedo de lo que me pudiera pasar, pero también de lo que le pudiera pasar a él. Me preocupa demasiado ese torpe.
-¿Qué esperas mocoso?- ahora enserio daba miedo ese profesor. Un miedo tan grande que no podía ser explicado con palabras. Me quedé mudo.
-Rigby…- dijo Mordecai- vete- muy firme.
-pero…
-¡vete!- dijo Mordecai.
“mierda, estoy demasiado asustado”
-por favor- dijo Mordecai con una voz demasiado rara, una voz con la que se me hiso imposible el decirle que no.
Salí un poco asustado de ese lugar y me dirigí hacia los demás, al parecer, nadie se dio cuenta de lo que estaba pasando ahí dentro. Ellos no salieron de los vestidores, durante toda la clase, simplemente estuvieron jugando como si todo fuera normal. No solo Mordecai es raro, sino ellos también. Cuando la clase terminó la directora nos pidió que regresáramos al salón por nuestras cosas e irnos a casa. Yo fui el último que fue al salón, tenía la esperanza de que nada le hubiera pasado a Mordecai, mi único amigo hasta ahora, pero nunca apareció… llegué al salón y sobre mi banca había una pequeña nota, la abrí y me encontré con una letra algo femenina que decía:
“Hola Rigby… soy Eileen, la chica que se sienta a tu lado… ammm, pues, parece que no tienes muchos amigos… ¿te gustaría que mañana después de clases fuéramos a algún lugar? Espero tu respuesta adiós”
Sonreí al leerla… pero mi sonrisa se borró cuando voltee el papel y vi lo que decía…
“PD: ¿Qué le sucede a Mordecai? Hace unos minutos lo vi que se dirigía a la enfermería, se veía muy mal, tenía mucha sangre… me preocupa”
Mordecai…
o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o
espero que les guste, perdón si es corto...
bye bye
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+1 .
....no te. pases con mordecai, que mi grupo de ukes furiosos van a por ti -AMENAZA!! - xD es broma, este fic esta. Yendo muy bien y me reí mucho xon lo dep uniforme xD
Arigatô-go-said-mas~
Enviado por ForumFree Mobile
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lautaro la saucedo+1 .
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me encanta este fic sigeloo ... conty conty jaja . -
Claudia Huaman Millones+1 .
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CONTINUALO QUE ESTA GENIAL!!! *salta de alegría* . -
Jacqueline Medina+1 .
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Capitulo 3:
Mi corazón se convirtió en una hoja de papel, y lentamente se convertía en una bola de papel, haciendo que yo sintiera un enorme dolor en el pecho, un dolor que nunca había experimentado y de repente ya no quería ir a casa, quería ir con Mordecai, sentía la necesidad de verlo, de estar con él, de ayudarlo. Tomé mi mochila, salí del salón y comencé a caminar en busca de la enfermería. Lo logré, tardó unos cuantos minutos, pero al fin logré llegar. En la puerta blanca había un pequeño cartel que decía “enfermería”. Tomé el pomo de la puerta y suspiré antes de girarlo lentamente, de igual manera empujé la puerta para abrirla. Lo vi sentado en una cama… y me quedé en shock. Totalmente helado, no tenía palabras para expresar en que tan mal estado estaba ahora. Su cara estaba llena de moretones, sangre, y hasta algunas partes estaban inflamadas. Literalmente, estaba hacho una mierda. No tenía camisa, tenía vendas en el pecho y en ciertos lugares de los brazos. Entré y cerré la puerta.
-¿p-pero que te…?- no pude terminar, estaba demasiado asombrado como para seguir con mi pregunta. Él me miró y sonrió.
-no te preocupes…- se levantó con esfuerzo- …estoy bien
-¿¡bien!? ¡Pero si estas hecho una mierda!, ¿¡a eso le llamas bien!?- me acerqué a él enojado. El sólo puso una mirada vacía, sin expresión alguna. Suspiré-¿Qué fue lo que pasó?- le dije más calmado.
-nada- bajó la mirada y se volvió a sentar.
-dime- dije con voz firme. Él no me respondió- por favor- sentía como mis ojos tenían cada vez más lágrimas sin razón alguna. No sé porque… pero el verlo así, en este estado, me hace sentir muchas cosas en este momento. Me acerqué hasta quedar frente a él- por favor…- tomé su rostro en mis manos y lo hice que me viera a los ojos- …dime que pasó.
Claramente se notó que sus ojos estaban igual que los míos: a punto de estallar. Me sentí peor al verlo así, sentí que debía hacer algo para que dejara de sufrir de esa manera, sentí que debía de protegerlo de todo, sentía que… que… que lo quería… que lo quería más que como un amigo… que lo quería como algo más…
Sin pensarlo dos veces lo abracé, lo abracé como nunca antes lo había hecho, su rostro quedó sepultado en mi pecho… y él me correspondió. Era un abrazo lleno de muchos sentimientos sin sentido: miedo, lástima, pesar, tristeza, enojo, pero sobre todo… amor. El abrazo contenía una inmensa cantidad de amor. Empecé a sentir algo húmedo en mi pecho, no tardé en darme cuenta de lo que estaba pasando, claramente, había estallado, sus ojos negros ya no pudieron contener más lágrimas.
Ambos lloramos por un rato, un rato cómodamente silencioso. Después de eso, se puso su camisa, tomó su mochila y fuimos a casa… juntos…
-oye, ¿Dónde vives?- me preguntó.
-por ahí, lejos- dije indiferente.
-no sabes, ¿cierto?- me guiñó un ojo. No pude evitar sonrojarme, no sólo por el guiño, sino porque, tenía razón. No recordaba donde vivía, claro que sabía cómo llegar, pero si estuviera en otro lugar de seguro me perdería, solo sé que tengo que cruzar la zona comercial, después dos calles más, y después doblas a la izquierda, y listo, llegas a mi casa.
Creo que ese fue el camino más largo e incómodo de toda mi vida, a parte del silencio, me daba incomodidad el sentir las constantes miradas de Mordecai. Finalmente, llegamos a casa.
-oh, así que aquí es donde vives- dijo.
-si- dije casi en un suspiro.
-bueno… adiós amigo- se volteó.
-e-espera- dije nervioso.
“¡¿Por qué estas nervioso Rigby?! ¿Acaso si te enamoraste de este?”
-¿Qué pasa?- me miró confundido.
-¿te gustaría… pasar?- aún más nervioso.
-ahhh… no lo sé, ¿no le daría muchas molestias a tu familia?
-no, no te preocupes, mi madre está trabajando, y ni mi hermano ni mi padre están en esta ciudad… así que…
-está bien.
-¿eh?
-¿Qué, estas sordo o qué? Quiero entrar- me sonrojé al notar un poco de doble sentido en esas dos palabras.
-ah- saqué las llaves de la casa y entré, él entró justo detrás de mí, cerré la puerta.
Sin decir nada, saltó sobre mi sofá.
“que mal educado”
Dejé mi mochila junto a él y fui a la cocina, serví un vaso de agua. Pude escuchar como encendía la televisión. Tomé el vaso y fui hacia él.
-no estás en tu casa como para hacer eso- dije mientras él cambiaba los canales y yo le daba un golpe en la cabeza. Él solo rió- ten- le di el vaso de agua y me senté junto a él. Apagó la televisión y lo tomó- oye…- nervioso bajé la mirada.
-¿Qué pasa amigo?- me miró.
-…gracias…
-¿por lo de gimnasia? No te preocupes, siempre es muy agresivo ese maestro, no soy el primero al que golpea- dijo con una sonrisa.
-no solo es por eso…- me miró confundido- es por… ser mi amigo…- sonrió-… en la otra ciudad donde vivía no tenía amigos, todos se burlaban de mi, y me humillaban y golpeaban… pensé que aquí sería igual…- suspiré-… pero entonces te conocí…- me sonrojé un poco y lo miré- gracias por eso- dije con una gran sonrisa.
No respondió. Me miraba un poco raro y eso me ponía incómodo, demasiado incómodo. Entonces, soltó una pequeña risa, que en pocos segundos se convirtió en una carcajada.
-enserio amigo- reía- eso es lo más gay que me han dicho en toda mi vida- no paraba de reír como un maniático.
-l-lo más g-gay- literalmente me quedé petrificado. Mientras él se reía de mí y yo trataba de esconder mi sonrojo, me sorprendió con un abrazo.
-je je- me apretó más- de nada amigo.
Después de eso empezamos a hablar de lo que nos gustaba, y al parecer tenemos muchas cosas en común, en especial los videojuegos. Por lo que durante toda la tarde hicimos eso, jugar videojuegos. Jugamos hasta las 8 de la noche, queríamos jugar más, pero Mordecai tendría que irse a casa.
Nos despedimos normalmente, esta vez no hubo momentos incómodos. Después de que se fuera a casa me preparé para ir a la cama.
Hoy fue un día muy raro, muy lleno de emociones y incomodidad. Pero… creo que podría acostumbrarme ahora que se… que mientras mi amigo Mordecai esté conmigo, todo estará bien.
o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o
espero que les guste, y muchas gracias por todo el apoyo que me han dado :')
bye bye
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Pollochanat+1 .
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OH POR DIOS! juero que me ha encantado espero la sigas! . -
Jacqueline Medina .
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Capitulo 4:
~ (Sueño) ~
Estaba solo… no había nadie a mi alrededor. Estaba en una habitación negra, sin ninguna miserable gota de luz. Mis pensamientos hacían eco en las paredes de la nada, y eso era lo único que se podía escuchar, ni siquiera se oían los latidos de mi corazón. No sentía mi cuerpo, tampoco podía moverlo. Era como si estuviera atrapado en una cárcel dentro de mi corteza cerebral. De pronto, delante de mí aparecieron diferentes escenas de mi niñez. Había una donde estaba solo en el parque, jugando solo, de repente llegaron dos tipos que me empezaron a molestar, me decían cosas sobre mi padre, cosas que enserio me provocaban una gran furia, pero no hice nada, solo lloré.
“si ahora me encontrara con esos tipos haría que pagaran por todo lo que me decían”
Entonces uno de ellos se acercó a mí y me empujó hacia el suelo, después ellos se rieron de mí.
-vamos pequeño yo… defiéndete- decía con la esperanza de que me escuchara, se levantara y luchara… pero no funcionó. Ellos aún se reían de mí. Y yo aún estaba en el suelo, como un niño indefenso.
Mi cabeza se llenó de pensamientos, la mayor parte eran de venganza. Quería moverme y partirles la cara a esos tipos. Un hormigueo comenzó a esparcirse por todo mi cuerpo, era como una carga eléctrica que recorría mi cuerpo desde la punta de mis pies hasta mi cabeza. Esa sensación hiso que lentamente volviera a moverme, estaba pegado a una pared, casi sepultado, hacía un gran esfuerzo impulsándome hacia adelante para poder salir, pero era difícil. Lo que me mantenía junto a la pared era una sustancia pegajosa y muy desagradable. Tomó varios segundos pero finalmente logre sacar una de mis manos de aquella sustancia, pero en el momento en que sintió el aire, me maldije a mí mismo, quemaba. Era el dolor más fuerte e insoportable que había sentido en mí vida, incluso se podía ver, gracias a la luz del recuerdo, que una ligera nube de humo salía de mi mano. Se sentía fatal, pero aún así quería salir de ahí. Una de mis piernas también logró salir, y pasó lo mismo, sentía que mi piel se quemaba. Lentamente, mientras sacaba las otras extremidades de mi cuerpo me di cuenta de que el recuerdo era cada vez más borroso y distante, hasta llegar el punto en que cuando logré salir por completo, en el recuerdo ya solo estaba un pequeño yo, dirigiéndome una mirada de decepción. El dolor era tan fuerte que incluso me costaba estar de pie, así que a los pocos segundos caí al suelo mientras mi pequeño yo aún me veía. Estiraba todo mi brazo para lograr alcanzarlo, cuando de pronto sentí una sensación de frío relajante en mi espalda, me di cuenta de que era esa cosa pegajosa de nuevo, comenzó a enrollarse en todo mi cuerpo hasta que me consumió por completo. No quería estar pegado ahí mientras veía como le hacían daño a mi pequeño yo. Le gritaba a él, pero no me hacía caso, aún me miraba de la misma manera, trataba de resistirme, pero desde el momento en que el líquido tocó mi pecho, donde está mi corazón, ya me costaba bastante el moverme, y entonces volví a sentir esa sensación de vacío. El líquido subía por mi cuello, por mis mejillas, por el resto de mi rostro, el recuerdo se alejaba más de mi, como si estuviera huyendo, mi vista se nublaba completamente y el oxígeno que necesitaba ya no estaba ahí…
~ (Fin del sueño) ~
Me desperté sudando. Hace tiempo que no tenía ese sueño. Me levanté y fui hacia la ventana, abrí las cortinas y vi el cielo. Era hermoso, tenía un color azul hermoso y había millones de estrellas.
“deben de ser como las 3 de la mañana”
Fui al baño y me lavé la cara. No sé si habrán sido los residuos del sueño, pero pude sentir la mirada de mi pequeño yo. Nunca antes había visto esa mirada en una persona y verla en mi propio rostro se sintió demasiado raro. Sequé mi cara con una toalla y fui de nuevo a mi cama dispuesto a dormir. Pero por alguna razón el cerrar los ojos después de ese sueño me parecía imposible. Sentía que si volvía a dormir el pequeño yo iba a regresar en cualquier momento. Me abracé a mí mismo para lograr quitar esa sensación del sueño, y funcionó, pero a cambio, trajo otra sensación. Era una sensación de protección, parecida a la que sentí cuando…
“cuando Mordecai me abrazó”
Era un sentimiento cálido y agradable. Cerré los ojos para sentirla más profundamente, cuando mi nariz comenzó a olfatear algo agradable. Aún con los ojos cerrados seguí mi olfato, y para mi sorpresa, llegué hasta mi uniforme del colegio. Tomé mi camisa con una mano y la llevé a mi nariz… era el olor de Mordecai. Ese olor tan exquisito de perfume y un poco de sudor. Mi corazón comenzó a latir más rápidamente mientras aspiraba fuertemente para tomar todo el olor y almacenarlo en mi cerebro. Después recordé lo que pasó en la enfermería.
“claro… él me gusta”
Sonreí ante aquel pensamiento.
“o quizás no… nunca me ha gustado un hombre, siempre me gustaron las niñas, no veo la razón por la que él me guste. Él solo es un niño problemático y molesto, atractivo, lindo, amable, simpático…no, ¿¡en que rayos estoy pensando?!... no me puede gustar y punto. Quizás solo lo pienso porque en ese momento era muy vulnerable y el fue muy amable conmigo… si, debe de ser eso”
Dejé la camisa en su lugar y regresé a la cama.
“no me gusta, no me gusta…”
Su aroma invadió una vez más mi nariz.
“demonios, ¿Qué tengo que hacer para demostrarme a mí mismo que no me gusta?... espera… la nota… esa chica quería salir conmigo hoy en la tarde, la verdad es que si es linda, y si salgo con ella voy a poder demostrarme que surgió ese sentimiento solo porque se aprovechó de la situación”
Feliz con mi nuevo plan, me quedé dormido…
o-o-o-o-o Al día siguiente o-o-o-o-o
Esta vez me desperté a la hora correcta, me puse el uniforme, que por cierto aún olía a él, arreglé mi peinado, bajé a desayunar, cepillé mis dientes, tomé mi mochila y fui directo al colegio, no sin antes darle un beso en la mejilla a mi mamá. El camino no fue tan largo, llegué al colegio en unos 20 minutos. Entré y fui directamente a mi salón de clases. Entré y ahí estaba ella, acomodando sus útiles, respiré profundamente y me acerqué.
-hola- sonreí.
-h-hola- me correspondió la sonrisa.
-oye, sobre la nota de ayer…- ella se sonrojó levemente-… me encantaría salir contigo hoy.
-¿e-enserio?- estaba un poco sorprendida.
-claro- sonreí de oreja a oreja.
o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o
perdón por la tardanza pero es que estuve demasiado ocupada con los deberes de la secundaria, mas aparte no me inspiraba lo suficiente, por eso es un poco corto... pero espero que les guste
bye bye
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Pollochanat+1 .
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dsadsa 
esta genial siguelo!
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Jacqueline Medina .
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Aviso!!!!!
Hola... les traigo una mala noticia.
Lo que pasa es que voy a estar en temporada de exámenes las próximas dos semanas, por lo que no se si pueda subir el siguiente cap.
Aparte, el dios del yaoi no me ha iluminado lo suficiente como para inspirarme
Eso es todo por ahora n.n
Bye bye
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Jacqueline Medina+3 .
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Perdon por tener esto tan abandonado xc pero es que mi computadora no funcionaba y se tardó una eternidad en volver a funcionar UnU... pero bueno, ya estoy aquí, trayéndoles un nuevo cap x3... espero que lo disfruten n.n
bye bye
-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-o-
Capitulo 5:
Pov Mordecai:
Creo que es un efecto de lo vulnerable que estaba esa vez en la enfermería, pero creo que Rigby comienza a gustarme…
“claro que no viejo, ambos son hombres”
Pero recordé lo que una vez me dijo mi madre… sus últimas palabras… “sólo importa el cómo te sientes al lado de esa persona, lo demás no importa tanto”… en ese entonces yo no sabía a qué se refería mi madre. Pero unos años después conocí a Margarita, y supe a que se refería. Margarita fue una de las personas más importantes de mi vida… si… fue… cuando tuvo el accidente que acabó con su vida, me prometí a mi mismo que no volvería a dejar a la persona que amo sola, claro si es que era posible amar a alguien mas, que siempre iba a estar a su lado, sin importar lo que pase, hay iba a estar. Reflexioné un momento en lo que me dijo mi madre, y comencé a pensar en Rigby… en el momento en que lo vi por primera vez pensé que sólo sería otro chico mimado como los que últimamente están llegando al colegio, pero no fue así, al parecer es igual que yo… el también ha sufrido, quizás más que yo. Realmente me molestó que me defendiera, enserio pensaba que era un chico presumido y molesto, y la idea de ser salvado por un tipo como el realmente me enfermaba, pero es un buen chico, un poco torpe, pero en tan solo un día a llegado a ser el mejor amigo que he tenido en muchos años. Pensé entonces en aquellas palabras que me dijo:
“… en la otra ciudad donde vivía no tenía amigos, todos se burlaban de mi, y me humillaban y golpeaban… pensé que aquí sería igual… pero entonces te conocí… gracias por eso.”
Y mi cuerpo comenzó a sentir una sensación agradable de calor en el momento en que lo abracé. Sólo había sentido eso con Margarita, pero con Rigby lo sentí aún más fuerte.
“es muy importante… pero no te puede gustar”
¿Y por qué no? Esta más que claro que somos chicos, pero eso no es algo por lo que debemos de preocuparnos, en la actualidad una persona puede encontrar la felicidad al lado de una persona de su mismo sexo, así que ¿por qué no puedo yo ser feliz con Rigby?
“porque quizás él no siente lo mismo que tú”
Quizás… quizás sí, quizás no… me temo que la única manera de saberlo es que él mismo me lo diga…
Me levanté de la cama y vi el reloj. 30 minutos para las clases. Entré al baño, e inmediatamente no pude dejar de pensar en Rigby al ver mi rostro reflejado en el espejo frente al lavabo. Enserio tenía razón, estaba hecho una mierda, algunas partes de mi cara, como mis mejillas, aún seguían inflamadas, así que del botiquín que se encuentra detrás del espejo saqué una pomada para la hinchazón y me la coloqué con cuidado de no lastimarme más yo solo. Salí del baño, tomé mi uniforme del borde de mi cama y me lo puse. Tomé mi mochila del suelo y despeiné un poco mi cabello, de todas formas no es como si me importara mucho mi apariencia física. Eso siempre me ha funcionado con las mujeres. No con novias, si no con chicas de una sola noche. Desde que Margarita murió en ese accidente no hay un solo día en el que no la recuerde, su hermosa sonrisa, su cabello corto que solía acariciar cuando ella se acostaba en mis piernas mientras veíamos una película en las tardes en su casa cuando sus exigentes padres no estaban. Desde entonces no hay ninguna chica que haya podido llenar el vacío que ella me dejó en el corazón tanto como en la vida.
“ninguna chica será igual… pero… ¿Qué me dices de un chico?”
-Rigby… ¿reemplazar a Margarita?- dije para mí mismo mientras bajaba las escaleras.
Encendí el viejo televisor que estaba en la mesa delante del sofá y con el control le cambié a un noticiero. Nuevamente, como era ya costumbre, se había suicidado un adolecente. Me fijé en el reloj y me di cuenta de que faltaban unos 15 minutos para iniciar la clase, así que apagué el televisor y salí de mi solitaria casa.
La verdad es que mi madre murió hace tiempo, no mucho realmente. Y mi padre… pues… él es la razón por la que mi madre murió básicamente. Es un alcohólico. Mi madre estaba embarazada de una pequeña niña de 6 meces cuando mi “padre” llegó a casa borracho, y en un ataque de furia, terminó por empujar a mamá de las escaleras, lo que ocasionó que perdiera a la bebé. Después de eso entró en una gran depresión y terminó por quitarse la vida.
Sacudí mi cabeza y dejé de pensar en eso, ahora lo que importa es descubrir realmente lo que siento por Rigby. El camino hacia el colegio fue realmente silencioso. Cuando llegué, en la entrada pude ver a los sujetos de ayer, mierda como me molestan, pero me sorprendí al ver que cuando pasé junto a ellos, estos ni siquiera me dirigieron la mirada. Continué hasta mi salón de clases y antes de entrar di un gran suspiro… no sé qué es lo que va a pasar hoy con Rigby… pero por lo pronto no mostraré lo que creo que siento por él, actuaré como si nada hubiera pasado ayer y listo.
Ya había tomado esa decisión. Abrí la puerta y no lo pude creer. Mi corazón sintió el enorme peso de un millón de rocas cayendo directamente en él cuando pude ver a Rigby con esa chica Eileen. Estaban juntos y parecían muy felices.
Tragué saliva y me dirigí a mi asiento… mierda, porque me tuve que acomodar a un lado de él. Me senté en silencio mientras mi voz interior me decía lo mismo una y otra vez.
“te lo dije, el no siente lo mismo”
Así que, con el corazón hecho pedazos y mis lágrimas apunto de salir, decidí que los dejaría ser felices. Llegó el profesor de ciencias y nos ordenó que nos sentáramos. Rigby no tardó un segundo en saludarme.
-hola- dijo sonriendo.
-hola- respondí sin ánimo alguno.
-¿te sientes bien?- preguntó preocupado… ha, el, ¿preocupado por mi? No, nunca.
-sí, solo pienso- miré a Eileen
-¿en qué?- me di cuenta de que ella estaba dibujando corazones en su libreta con su cara de enamorada. Suspiré.
-en que hoy va a ser un laaaargo día.. -
+1 .
Uhhhhhh, I fucking like this shitttttttt~~~~~~~~
Me encanta, quiero sabes que sigue, en seriooo.
Esperare atenta.Enviado por ForumFree Mobile
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Carmelita Echeverria+1 .
User deleted
Por favor sigueeeeeee te esperare con ansias 😍 . -
+1 .
OMG AMO ESTA CONTY *-*
Mordecai-kun es tan tan romantico (?) aunque le han pasado cosas...muy..malas...QAQ
Rigby...sho te mato -con un bate de beisbol(?)- quiero contyyyyy!!! -avanza al ataque con su ejercito de osos panda-.
"El chico nuevo" mordecai x rigby (un show más) |
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