De parte del equipo

Me abro al cierre

Hace un par de años, cuando me encontraba en la edad donde crees en muchos sueños, encontré esta página. En un principio, la solía visitar de reojo, viendo algunas historietas y haciendo algún que otro test. Pero un día, por equivocación pura, cliqué en uno de los apartados: “Inscripciones para rol”. Sinceramente, yo no sabía que era el rol ni tampoco estaba interesado a descubrirlo, era algo más en este mundo cibernético. Pero… la tentación, la curiosidad de averiguar lo que había detrás de los mensajes que cada usuario enviaba, me encendió.
Era inexperto, pero diversos roleadores me dieron una oportunidad, y aprendí, estudié y cree diferentes historias para que yo, y diversas personas, pudiéramos disfrutar de nuestra imaginación.

Fueron mañanas de insomnio, contestando y diseñando ideas. Ansias al despertar, corriendo a ver si alguien había respondido a mi respuesta. Eran ilusiones, felicidad y… sentirme gratificante. Pero poco a poco, muchos de los que me ayudaron a entender este nuevo concepto, me fueron dejando o abandonando. Comprendí que esto no era para siempre, que era mero entretenimiento, y que cuando maduras y te das cuenta que debes dejarlo, debes hacerlo. No puedes perseguir la niñez toda la vida, debes de dar un gran paso, debes de centrarte en el presente, en los estudios, en los sueños… porque ese camino te llevará a lo que serás el día del mañana.

Ya me he hecho mayor y he experimentado. He comprendido que este mundo ha dejado de ser el mismo. Ya no corro en busca de un nuevo rol, ya no miro las contestaciones con tanto entusiasmo… Ahora lo estoy dejando atrás, estoy sintiendo como muchas personas me dejan para seguir su camino. Yo debo de empezar a construir el mío.

Me podría considerar un veterano, un hombre que ha salido de la guerra, y que se siente prospero de seguir con vida. Empecé con 1 mensaje… ahora llevo 20.726, 5 años después. Todos ellos escritos con el corazón de un niño…

Me siento triste, porque aquí he encontrado momentos, sentimientos e ideas. Aquí he perfeccionado, con duro trabajo, mi escritura. Aquí he encontrado individuos con mis mismos gustos. Aquí he soñado y gastado horas de mi tiempo. Y estoy, estaré, eternamente agradecido por todo.

¿Me duele dejarlo para siempre?... Sí.

¿Me duele abandonar lo que he creado en todo este tiempo?... Sí.

¿Me duele seguir caminando y no mirar atrás?... Sí.

¿Me duele dejaros a todos vosotros?... No dudéis de eso.

Algún día, sentiréis lo mismo que siento en estos momentos. Abriréis los ojos en una mañana, y esa chispa habrá desaparecido. Pero mientras tanto, disfrutadlo. Agradeced por tener la niñez a vuestro lado, agradeced estos tiempos prósperos, porque un día… ya no será igual. No digo que no series felices, todo lo contrario, encontrareis cosas nuevas. Pero… todo tiene su final.

Y el mío acaba con este punto.