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Los pensamientos dentro de mi mente son un enigma
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Aquella noche
Lawliet
No sé como describirlo, sinceramente hace días que no logró conciliar el sueño, trato de dormir pero simplemente no puedo, aunque no puedo describir lo que siento ahora. Quizás una tristeza por haber perdido al amor de mi vida en un accidente, ¿quien diría que aquel incendio sería un suicidio?
No puedo evitar dejar que mis lágrimas salgan, perdí a Light y a nuestro futuro bebé, escribo cartas a diario, llevándolas a un templo para que se me cumplan mis oraciones. Solo quiero volver a ver a mi familia. Es en lo único que puedo pensar, maldita sea. Si tan solo hubiese sido yo. Hubiese querido que fuera de otra manera, pero solo peleamos, no nos dirijimos la palabra, el se fue, y sus últimas palabras fueron : "Aun te amo"... Antes de marcharse ya para no volverlo a ver.
Comúnmente no suelo ser alguien que se expresa demasiado, pero Light... El me hizo cambiar... Y mirenme aquí, llorando por ese amor que no se logro consumir por completo. Se que tengo la culpa, y quisiera acompañarlo en el más allá, pero... por mas que lo intento, no logro hacerme daño. Cada día que pasa, es un infierno para mi, solo pienso en lo vació que se siente la casa, en aquellas flores marchitas que ahora están desde que deje de regarlas, sin el aqui, no tiene sentido.
He recibido algunas notas cada noche del templo, pero no puedo abrirlas, no quiero, desde el incidente ya no quiero saber nada, me rendí, simplemente, al final acepte que mi familia no volvería nunca más, y así comencé esta vida solitaria que estoy describiendo.
He salido de casa, para contemplar la luna una vez mas, la casa vacía se siente en plena oscuridad, la gente está en sus casas reposando con sus familias, y yo sintiendo esa envidia del calor y recocigo al ver como se unen para celebrar. Mientras yo con mi vista apagada, alzando la mano a la luna.
"¡DAME UNA SEÑAL QUE NO TE OLVIDASTE DE MI! ¡Quiero saber que sigues pensando en mí! —Exclame sin que nadie se diera cuenta pues me hallaba a una distancia considerada del lugar. Corrí hacia el monte para sentarme y contemplar la luna entre aquellos prados, ver las estrellas , mis lagrimas se reflejaban pero no dejaba de mirar el cielo. Hacia puños, hasta que me desmorone arrancando el pasto de cierta impotencia.
Mientras hacia mis rabietas, un gruñido en entre los arbustos, me hizo ponerme en alerta, pues tenía presente que la gente rumoreaba que había presencia de "Kitsunes", llamado así a los zorros de nueve colas, una leyenda urbana que solian contarse en el pueblo. Tomé una de las cuchillas que siempre cargo, pues mi habilidad cazando era perfecta. Yo no tengo familia, pero un hombre me crio siendo como su hijo, ese hombre está muerto, debido que uno de esos zorros lo asesinó hace mucho tiempo. Me acerque cuidadosamente al arbusto, aun no me sentía del todo bien para atacar, pero me armé de valor para confrontar a la criatura. Note como de entre las sombras, aquel animal de pelaje rojizo, se iba parando de pie, adoptando forma humana. Mis labios titubearon por un momento, ¿acaso mi mente estaba jugando cruelmente conmigo en ese preciso momento?, cerré mis ojos de nuevo. No podía ser verdad, si bien, sabia que los zorros de ese origen pueden duplicar el aspecto de la persona, no sabía exactamente que tanto habrán investigado. Ese zorro parecía tener la apariencia de Light, pero no, no quería aceptarlo.
—¡ALÉJATE DE MI ANIMAL! ¡TÚ NO ERES ÉL! —Dije entre lágrimas mostrando la cuchilla, pero aquel kitsune, solo caminaba pasó a pasó, note como sus ojos se clavaban como un cuchillo en los míos, sus labios mostraban sus dientes crugiendo, esa piel nivea y tersa, su cabello castaño, sus ojos estaban pintados de un color carmín, evidencia para desconfiar conpletamente. Noté como hacia puños.
—TÚ ERES EL QUE DEBE ALEJARSE SI NO QUIERE MORIR. —Replicó el Kitsune mientras sacaba sus garras de sus manos. Estaba vestido de un traje entre blanco y rojizo, parecía un traje muy antiguo.
—¿AHORA ME DIRAS QUE SABES HABLAR COMO EL? —Sin pensarlo me dirigí hacia el para atacarlo pero me retuvo.
—No sé... de quien demonios hablas, sólo te hago una advertencia, la manada está en caza, vete de aquí ahora. —Gruñio el Kitsune mientras intentaba forcejear al azabache.
—A mi no me das órdenes, tratas de engañarme para luego matarme.... ¡LIGHT YA BASTA! —Eso ultimo se me salio sin querer entre lágrimas al forcejear sus hombros, y lograr quitarle uno de sus collares. —Lo tengo..
—¡Oye!... ¿CÓMO DEMONIOS SABES QUE ME LLAMÓ ASI? ¡RESPONDE Y DEVUELVEME ESO! —Dice el Kitsune preocupado.
—Eso no te concierne, además eres una vil copia de él, tú no puedes ser él. Tengo entendido, que con esto puedes obedecerme si quiero que no me ataques. ¿Verdad? Tengo entendido que me darás algo a cambio si te regreso esto, pero no te lo regresaré, así no dejare que me mates, no confio en ti. —Dije firmemente sin más. Mientras me ponía aquel collar.
—Tsk... Grr... No... No... Damelo por favor, ese collar es lo único que me queda, si es destruido puedo morir. Y no quiero morir. —Dijo el Kitsune hincandose frente al azabache.
Sinceramente, no pude siquiera aguantar las lagrimas, ver una vez el rostro de aquel castaño en lágrimas, es como ver a Light en el, no se si porque sea débil o no, ¿acaso mis plegarias habían sido escuchadas? No lo sé, aún se que no puedo hacerme la idea, este zorro es idéntico a Light, pero no puedo confiar en el, note como lloraba en silencio, y me hinque para tomar su rostro.
—No puedo regresarte tu collar... Pero puedo hacer que vengas a mi casa. ¿Qué dices? No dejaré que mueras. Light... Vamos. —Le tome sus manos, estaban más frias que de lo costumbre sin embargo, aquel Kitsune no se daba cuenta de ello.
—¿Prometes que lo cuidaras? En ese caso... Yo prometo hacer que nadie de mi especie se acerque a tu casa, te dare más conocimiento de lo que quieras. —Se limpia las lágrimas y sonrie con cierta travesia, sin duda esas expresiones me confundian demasiado.
—De acuerdo, entonces vamos Light, ah, por cierto... No vengas en tu forma de zorro, no quiero que la gente se espante. No hay que causar revuelo. ¿Te parece? —Le di la mano.
—Bien, pero... —El castaño se había acercado a olfatearme. —Este aroma... Ya lo habia olido antes pero no lo recuerdo...
—Debes estar confundido, al único que podrían reconocer es al de mi padre... Bueno no hablemos de eso, vamos..QUOTEAquí dejo este fic que hice con love,espero que les guste. Les leo pronto, matta ne. ^^
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El azabache y el zorro (L x Light) (Mpreg)¿Qué pasaría si de repente el amor de tu vida aparece en una extraña circunstancia? Descúbrelo. |
