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.SPOILER (click to view)
The light of a candle
Is transferred to another candle —
spring twilight.
Empacó con una semana de antelación, no pudo hacerlo en menos porque era demasiado lo que quería llevar a su nuevo hogar. De no ser por su única persona de confianza habría tardado más y exigido llevar más carga de la necesaria, Shen detuvo sus manos que querían cargar su cortina favorita y las sábanas a las que estaba acostumbrado Tu nuevo esposo podrá comprar mejores Aclaró el pelinegro provocando un puchero en él. Es consciente de que no era un niño, tenía quince años pero dado su tipo de ritual y especie su crecimiento estaba atrasado y lo hacía ver como si tuviera diez años todavía, le parecía raro que enviaran a un alfa como él con un omega mayor, pero se debía a la pureza de su linaje más que otra cosa. Así, una semana después se encontraba despidiéndose de sus padres y partiendo con las contadas maletas y su criada, había montado un berrinche para que el hijo de Shen también los acompañara, desde que nació la función del zorro había sido criarlo eso quería decir que Shen le pertenecía y por ende Hao, su hijo, también debería ser incluido. No encontró demasiada resistencia, supone que fue la forma de su madre de intervenir y permitir el primer y único capricho que tendría como hijo de ese lugar antes de partir a una nueva familia.
El viaje había sido más largo de lo que esperó, de no ser por su distracción con el omega y el hijo de este que empezaba a balbucear hubiera sido más aburrido de lo que imaginó. Estaba dormido cuando su transporte se detuvo y el guardián de su padre que les había acompañado como protección tocó la ventana anunciando la llegada. Sintió las manos del pelinegro limpiarlo con un pañuelo y ajustar su traje para ayudarle a bajar.
Estaba frente a su próximo esposo, notaba como el pelinegro guardaba una distancia propia de la servidumbre con su cabeza baja y en su espalda el niño sujeto con un cargador de bebé. Soy Adler, no es necesario mi apellido porque tomaré el tuyo cuando formalicemos Anunció y se adentró en la mansión, Shen seguía el paso cargando la maleta de mano de su joven amo. Ha sido mi nana y criada, no me siento cómodo con otros Presentó brevemente, ahora que estaba frente a su omega se daba cuenta que el otro en verdad era un adulto, lo veía desde abajo.
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Observa el cielo claro que se extiende sobre ellos con una sonrisa tranquila, su largo cabello rubio se mece de forma casi amable con el viento, ha pasado mucho tiempo viviendo en la oscuridad por lo mismo un cambio de ambiente le es fascinante y tranquilizador. Su mirada se posa en el carruaje que se detiene frente a ellos, hace una ligera reverencia para recibirlo, detrás de él se encuentra su guardián que sostiene a su hijo, su hermano se aferra de su vestuario con fuerza. Espero que su viaje no fuera muy problemático, entendemos que vivimos un poco alejados de los pueblos principales. sus ojos brillan al momento de incorporarse, el rasgo más distintivo de su familia como forma de hechicería y la razón de que fueran cazados.
Mi nombre es Emmett, soy la cabeza de la familia, no tenemos un apellido que pueda ser pronunciado con orgullo. se presentó. Enseñó a los menores con la ayuda de su guardián. Él es mi hermano menor, Abel y mi hijo, Cain. el bebé apenas se removía entre las mantas con incomodidad hasta que lo sostuvo con firmeza contra su pecho, parecía ser que tenía hambre.
Adelante. no hizo mención de la clara energía maldita que emanaba el infante que sostenía entre brazos, los demás debieron detectarlo incluso desde lejos. Toma lugar en el salón donde los sirvientes les servían el té, todos sus sirvientes tenían una máscara sobre su rostro o de lo contrario una tela, no todos podían soportar una mirada directo de los ojos de su familia, hasta ahora solo Alex había sido capaz.
Es una pena conocernos por tan poco tiempo antes de la boda menciona. Abre el kimono que llevaba para dar de comer a Cain.. -
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Asintió ante las presentaciones al menos era positivo que el otro no hubiera mencionado nada hacia su apariencia de infante, por lo que devolvió el gesto sin mencionar nada acerca del bebé. La mirada ajena le hace percatarse porque su familia fue la seleccionada, otro novio diferente a él podría haber muerto solo sosteniendo miradas con el contrario. Es extraño encontrarse con que no hay apellido como tal, creyó que los hechiceros tomaban orgullo de tenerlos. Avanzó como le fue invitado y una mirada sobre su hombro ante su sirviente, recordaba que Shen pertenecía a una de las especies más puras y como protector de deidades había sido seleccionado por su padre para ser su nana tradicionalmente, camina con orgullo tomando en cuenta que su criada estaba por encima del promedio soportando una familia así con una alta energía.
No es problema, podremos conocernos con calma... Sus pies que quedan colgando una vez sentado en la silla se balancean con algo de vergüenza. No siempre me veré así Aclara al ajeno, la diferencia entre ellos era clara, Emmet le parecía otra figura adulta como la de su criada amamantando a su hijo.
Desde niño pasaba en soledad por lo que a veces sentía al pelinegro más como su propia madre a pesar de que no tenía resentimiento contra la biológica. Comenzó a comer con los modales de un adulto, lo cual provocaba que se viera adorable y no con la seriedad que buscaba transmitir, el leve sonido de Hao le provoca levantar la mirada y da indicaciones de que puede llevarlo a comer, el pelinegro era el único que permanecía en espera detrás de él la mayoría del tiempo. Mis padres siempre me dieron los mejores tutores, puedo empezar a ayudar en cualquier momento Recuerda que los consejos del contrario siempre fueron los de verse útil en un nuevo entorno.. -
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Ríe despreocupado cuando menciona que no siempre contará con la apariencia de un infante. Es bueno saberlo, sería un poco problemático. respondió. No se sentía atraído por la figura juvenil del otro, aunque entendía que estos matrimonios no se trataban precisamente de amor. Cain ha terminado de comer por lo que una de las personas del servicio se lo lleva a dormir, por lo general el infante era muy tranquilo siempre y cuando comiese, el resto del tiempo se la pasaba durmiendo profundamente. Pensaba que era una fortuna que el tiempo que se encontraba despierto era reducido, ya que dormido era más sencillo controlar su energía maldita.
Apenas nos estamos estableciendo así que serías de gran ayuda. dice emocionado. Abel tan pronto termina su postre decide abandonar la habitación para ir al jardín a leer los diferentes libros traídos a ellos como ofrendas. Suspira, al menos tendría tiempo de realizar su misión a tiempo de que los menores decidieran buscarlo.
Nuestra familia está encargada de limpiar impurezas. expresó. Pero solo somos llamados una vez se confirma que es imposible para los rangos menores hacerlo, estamos muy orgullosos de nuestra fuerza en combate. se incorporó dejando que arreglaran sus prendas y le colocaran la venda sobre sus ojos, era molesto salir y ocultarse, apenas lo toleraban otros hechiceros y no deseaba matar humanos o animales por error.
Alex. pide suavemente. La maldición abre un portal para ellos y hace una reverencia a sus invitados al igual que él. Ingresa primero para disipar las dudas del otro sobre el método de transporte. Observa los alrededores, según entendía su contacto debía ir con ellos tan pronto percibiera su energía.. -
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Sus mejillas se ruborizan cuando lo escucha reírse, es consciente de que debe parecer un niño más para el contrario pero desde que le mencionaron su matrimonio había aceptado su destino y de alguna forma asimilaba que iba a ser su omega y ese también su hijo, principalmente por un sentido del deber y porque tampoco le desagradaba las presencias ajenas aunque podían ser intimidantes. Tan pronto termina de comer se incorpora siguiendo al ajeno, la presencia de Shen que había abandonado el comedor para dar de comer a Hao se hace presente una vez más.
La apariencia del omega con su uniforme de criada desaliñado y Hao succionando con fuerza el único pezón que dejaba al descubierto le daba cierta ternura, era lo suficientemente importante para que el pelinegro priorizara venir ante la detección del portal.
Estaré bien Levantó su pequeña mano para detenerlo, era mejor si se quedaba cuidando de su bebé, podía tener apariencia de niño pero eso no indicaba que fuese débil. Tomó la mano del omega mayor. Iré, es mejor conocernos así, no necesito protección Aclaró que no pretendía ser un carga. Sujeto a la mano del otro cruzó el portal y avanzó, en su interior tenía una deidad oriental Byakko, por lo que cada paso que daba en terreno maldito resplandecía en luz blanca, además de que maldiciones pequeñas evitaban acercarse o eran desechas con su sola presencia.
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Su mirada se mantuvo sobre el portal, ahora desaparecido, en el comedor. Su joven amo había avanzado con tanta tranquilidad dentro y la pequeña figura de Adler evaporándose dentro de la dimensión seguía en su retina. No solía alejarse nunca del moreno, desde que le fue asignada la tarea de ser su nana, incluso, desde que este fue bienvenido en el mundo. Había asistido el parto de la madre como parte de un número seleccionado de omegas sirvientes, presenció el momento en que el pequeño cuerpo del primogénito fue acariciado por la luz y la fuerza de sus pulmones desencadenó en llanto. Gracias a su buena estirpe y lo compatible que era su especie con el hechicero es que obtuvo el ascenso de nana a sus 14 años.
Sintió la succión de Hao sin piedad en su pecho y lentamente volvió a la realidad, si su joven amo había salido debía terminar de preparar su alcoba, conocía a la perfección los caprichos del moreno así que pidió ser guiado a la habitación del otro, sería temporal por lo que evita descargar demasiadas cosas y deja solo lo necesario para que el otro se sintiera cómodo una vez volviera. Estaba terminando cuando sintió los movimientos inquietos de Hao en el cargador de su espalda, una vez despierto su bebé mostraba curiosidad por la casa y sus habitantes.. -
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Le es curioso que su guardián se preocupe tanto por él, en su caso realmente ocupaba un guardián para proteger a los menores para que no contara con ningún contratiempo a la hora de desenvolverse, algo así como un mueble útil que protegía a los menores mientras aprendían a utilizar su energía maldita, en el caso de Cain, hasta que aprendiera a caminar al menos. Siente la presencia del pelirrojo próximo a ellos y no duda en atraerlo hasta donde están por sus shikigamis. Yuuki. saluda. Recordaba el nombre de la persona que les encargó la misión, aparentemente era su contacto en esa oportunidad.
¿Has estado bien? preguntó. Su sonrisa está presente pero sus ojos no reflejan brillo alguno. Se que es difícil para los de tu especie cuando no estamos en invierno, me mortificaría si algo te sucediese en mi territorio. era una sutil advertencia al otro. Tenía su mira puesta en cualquiera que consideraba como sospechoso y el pelirrojo lo era.
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Es normal que en medio de su siesta despierte si siente que su madre no está cerca, a medida que el llanto se hace presente así lo hacen los sirvientes al igual que la energía maldita que lo rodea. Se siente molesto porque ninguno de ellos es útil. Abel en algún punto siendo de los pocos que podían mantenerlo a raya de aproxima sosteniendo a su sobrino en brazos.. -
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Era diferente a los demás, quizás la soledad de no contar con nadie más que su nodriza los primeros años de vida le llevaban a darle un lugar por encima de lo que normalmente se hace. Para empezar, nunca estuvo de acuerdo cuando su madre le notificó que Shen se ausentaría unos días, era tradición de los sirvientes más cercanos tener al menos un hijo para aumentar el número de la servidumbre íntima, el pelinegro había retrasado ese proceso por sus labores, mucho menos le gustó los meses en que el omega cuidaba de él con una gran barriga incordiando… No así, se sintió feliz cuando nació Hao y vio multiplicado a su sirviente en el pequeño bebé.
El semblante pensativo mientras camina a lado de su futuro esposo se desvanece ante la presencia del pelirrojo, no era normal ver yuki-onna masculinos, todavía menos verlos pelirrojos, no le extraña la solicitud de ayuda. Sintió la mirada sobre él y arqueó las cejas al presenciar el dramatismo. Muy ruidoso Su semblante era el de un niño haciendo un puchero, si Shen estuviera ahí ya hubiera callado al pelirrojo o cubierto sus oídos al menos.
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Eran considerados una especie pacífica, o al menos, lo más pacífico que podía ser el mantenerse en su montaña y solo cazar presas o perder humanos en las tormentas de vez en cuando. En comparación con otras maldiciones ellos eran inofensivos. No así, detestaba a su propia especie, cuando nació de una mezcla entre un ogro y una mujer de nieves, el cabello rojizo lo volvía blanco fácil para molestarlo. Ni siquiera ser un raro hombre le ayudaba porque su naturaleza omega le impedía engendrar a otras, por el contrario, debía estar en constante alerta contra ataques. Una aldea de mujeres principalmente era su principal pesadilla.
Así, después de una discusión donde perdió de nuevo, pretendía relevar el problema a otros, si lo que detestaba era a todas ahí, simplemente necesitaba deshacerse de ellas. Por desgracia es una hazaña incapaz de realizar por él mismo.
Se arrodilló en el suelo y unió sus propias manos rezando al otro. ¡Mi salvador! No debía ser tan complicado, él mismo había atraído otras maldiciones y provocado el caos en ese territorio, las aldeas de humanos aledañas fueron aniquilados pero aquello había sido un error suyo, inevitable. Es por eso… estamos tan débiles y una horda de monstruos no nos dejan en paz ¡Ah! Es terrible señalaba la cúspide de la montaña donde estaba su hogar, desde ahí se apreciaba el humo causado por el fuego. Solo necesitamos su ayuda
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Si la presencia habla sido imponente durante la comida, ahora que el ser con más energía maldita comenzaba a irritarse era abrumadora. El suelo bajo él tembló y por un instante pensó que estaban siendo atacados, mas escuchar los sonidos inconfundibles de un niño obstinado buscando a su madre le recordaron la presencia del pequeño que conoció. Si de niño pensó que Adler era un monstruo como tal, el moreno era el primero en heredar a Byakko luego de doscientos en la familia, nunca creyó que la presencia de alguien tan pequeño podía intimidar más. Avanzó al origen, Hao se movía inquieto siendo abrumado también, en su camino encontró algunos sirvientes desmayados y tan solo la pequeña figura del niño levantando al irritable bebé. Suspiró. Abel-samaReconoció sus presencias y ofreció una reverencia antes de acercarse a sostener al niño también. ¿El amo no dejó alimento? Debe tener hambre otra vez El pequeño que sostiene quema, es caluroso y opta por llevarlo a un cambio de mantillas, ha dejado a Hao en el suelo así que escucha al niño gatear para acercarse al rubio.. -
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Mantiene su sonrisa cuando le explican la situación, ah, sería un problema. Camina hasta donde está el otro y se pone a su altura ya que este se había arrodillado. Penoso. es lo primero que le dice, ha dejado de sonreír cuando se encuentra totalmente a su altura. Sostiene con fuerza su rostro, el súbito movimiento había provocado que su venda cayera revelando uno de sus ojos. No puedes mentirme, ¿sabes? aproxima su rostro hasta que es capaz de olfatear a la altura de su oreja, para él las personas con intenciones macabras despedían un aroma diferente, era naturalmente atraído en especial si se trataba de seres sobrenaturales.
Es una pena, pero pocas cosas pasan desapercibidas para estos ojos, en especial tus manos manchadas de sangre de inocentes. posa uno de sus dedos sobre la frente ajena, ya que el ajeno estaba dispuesto a mentirle, debería estar dispuesto a las consecuencias de ello, desde ese día sería su mascota. La marca queda grabada en su piel como señal de su pertenencia. Su tecnica maldita "someter" le permitía hacer contratos con diferentes tipos de entidades, además de humanos, animales, la condición para su activación es que él debía reconocer a la entidad como más débil que él mismo.
La razón de ser cabeza de su familia pese a ser un omega era esa, ya que había heredado los ojos malditos de su familia y su propia tecnica maldita no dejaba espacios a reclamos, aunque claro, el mató a toda su familia en cuanto tuvo la oportunidad. Ve y apaga el incendio Yuuki y vuelve para irnos, te enseñaré tu nuevo hogar
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Abel tan solo le cede a su sobrino porque en un principio no es como si quisiera atenderlo, solo quería que el aire alrededor de ellos dejara de ser tan denso, lo suficiente para poder respirar tranquilo. No, no es hambre, creo que extraña a su madre. se acomoda a la altura del otro infante. Le parecía cuirioso como pese a que el ambiente ahí era lo suficientemente pesado para que algunos de los sirvientes se desmayaran aquella criatura pudiera moverse.
Sostiene al infante con un rostro inexpresivo. Su técnica maldita era "conectar" parecida a su hermano, pero realmente su técnica lo volvía un objeto "agradable" o deseable cuando la activaba, no era tan violenta como la del mayor. Esto le permitía obtener información o inutilizar a cualquiera, se preguntaba si de activarla serviría con aquel bebé, aunque no le veía la utilidad, era simple curiosidad.. -
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La primera ocasión en que acompaña a su futura pareja es más interesante de lo que creyó, como todavía no es parte oficial de la familia todavía existen datos que desconoce sobre los rituales de los contrarios, mas era mejor poder verlos en persona. Es una lástima que su ojo no sea tan agudo como el contrario, elevó la mirada a la montaña y a las faldas de estas yacían las cabañas destrozadas de los poblados humanos. Supone que es un castigo justo, se aproximó al ajeno cuando este volvió a incorporarse. Eres fuerte Reconoce, en su estado actual el otro todavía era superior, de un momento a otro siente que heredó un ritual demasiado molesto si ni siquiera podía crecer a gusto. Es mejor que ese también lo acompañe Señaló al guardián.
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Desde que pensó en un plan sabía que la probabilidad de éxito era muy baja, todavía algo peor que lograr deshacerse sin problemas de su clan era el paso siguiente, Yuuki lo comprendió cuando la horda superó sus expectativas y supo que era requerido una fuerza mayor. Para su desgracia quien fue asignado como guardián tenía esa habilidad tan molesta. Mordió su labio interior y contuvo el aliento cuando la marca comenzó a emerger de su carne, dolorosa y alteraba toda su energía. No... fue mi cul Vanas palabras, cuando yace en el suelo se encuentra sudoroso y para su sorpresa su cuerpo obedece las órdenes. Volvió a levantarse y comprendió que debía al menos eliminar el incendio del bosque. Sus cejas se mantuvieron arqueadas mientras avanzaba al origen, detrás de él viene otro espíritu, no es como si pudiera desobedecer. Elevó sus manos y de estas se desprendió el hielo, no podía producir agua pero los témpanos funcionaban igual. Era una ardua tarea y cuando regresó al fin su contextura era peor. He terminado... Buscando la libertad terminó perdiendo todavía más, al menos en su aldea era libre de ir donde quisiera, pero ahora que se encontraba atado no era así. Lo peor es que todos esos inspiraban más temor en él que la misma jefa de aldea.
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Comprendió las palabras contrarias y examinó al bebé en sus brazos, en efecto debía extrañar a su madre, le recordaba a Adler cuando todavía lloraba por su progenitora. Avanzó de nueva cuenta a la habitación del menor donde revisó su pañal. Cain-sama, el amo está ocupado por ahora Contestó mientras cambiaba este con movimientos expertos, era el tercer bebé que cuidaba así que estaba habituado. Volvió a tomarlo en brazos para acurrucarlo, tenía un carácter bastante pesado el amo más pequeño de la casa. Lo mece en sus brazos, espera que la madre llegue pronto.
La especie de su madre eran espíritus con alta tolerancia a la energía maldita, lo que los volvía en sirvientes cotizables. Hao había nacido luego de la decisión de los padres de Adler para reproducir a Shen con un prospecto que potenciara los rasgos del sirviente, como quien busca mejorar la genética de su mascota. El pequeño conservaba rasgos de su madre principalmente, mas el color de ojos era herencia del padre, como tal también toleraba bastante bien la energía y los rituales ejercidos sobre él. El semblante del bebé se mantuvo inmóvil unos segundos hasta que comenzó a reír mientras acariciaba las mejillas del niño. Al ser un infante de meses sus recuerdos giraban en torno a su madre principalmente, recuerdos de ser alimentado por el omega, canciones de cuna, el rostro del moreno cuando lo conoció y demás escenas de su madre trabajando u observando otros sirvientes en la casa donde vivía anteriormente.. -
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Acomoda las vendas para no incomodar a su futuro esposo, sus ojos potenciaban aún más su ritual y no deseaba exponerlo innecesariamente. No.. esto no debe ser nada comparado a mi esposo. mencionó haciendo una leve reverencia. Los años le habían dado la experiencia suficiente para obtener el control total de su ritual así que realmente se veía más poderoso de lo que realmente parecía a ojos de otros, entendió que los verdaderos monstruos existían en ese mundo cuando trajo al mundo a uno. El nacimiento de su hijo había cambiado sin saberlo este su perspectiva del mundo, a veces le daba escalofríos pensar en cómo sería cuando alcanzara su edad madura. No te preocupes, tiene la fuerza suficiente para hacerlo, además la técnica de Alex no sería de mucha ayuda. tendría que dar al moreno sus conocimientos sobre su clan apropiadamente, si bien eran una familia pequeña, sería necesario para juzgar las futuras misiones.
Tan pronto el pelirrojo vuelve se encarga de hacer un ritual inverso para ayudarlo a sanar, no sería bueno que su reciente adquisición se encontrara herida, le gustaba cuidar de sus pertenencias. Ordena a Alex que abra el portal una vez más y retornan a la mansión, pensó que tendría tiempo para hablar al menos con su prometido un poco más sobre lo que sucedería en su boda, pero la urgencia de ver a su retoño se hace presente al sentir la energía que emanaba de este.
Gracias por cuidar de Cain. le alegraba al menos que nadie hubiese muerto en su ausencia, recuerda que en una de las misiones volvió encontrándose con Abel herido y todos sus sirvientes muertos, su retoño los había partido en pedazos sin piedad. Parece ser que le caes bien, es un alivio.
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Observa el destino del pelirrojo y le recuerda a su propia situación, sin embargo, el conocer al rubio había sido un accidente realmente, pero el resultado era el mismo, ambos fueron cazados por el mismo amo. Una vez se encuentran en la morada suspira cuando su amo se retira, como este no le ha requerido expresamente su presencia no debe acudir a él. Te acostumbras con el tiempo dice al otro. Estira sus extremidades, usar los portales después de un tiempo es agotador, las cosas han estado algo tranquilas desde que se mudaron a ese lejano país.
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Abel observa a su sobrino ser calmado con facilidad por aquella entidad, existían más personas así, capaces de mantener al margen a ese monstruo. Vuelve su atención al infante entre sus brazos, parecía ser muy feliz aunque aún no utilizó su técnica en lo absoluto. Raro. susurró. Nadie en su familia sonreía así, lo dejó en el suelo para ajustar las gafas que llevaba encima, sería malo si lo veía directo a los ojos siendo tan pequeño, su hermano mayor lo regañaría.
Acude a donde se encuentran el par del rubio para reportar que aparentemente aquel monstruo encontraba agrado en el zorro.. -
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Se lleva una mano al pecho cuando lo menciona, sabe que la rareza de su ritual es única y exclusiva de su familia, dentro no era muy común tampoco el ser heredada, antes de él ningún otro primogénito había nacido heredado esta en al menos un par de siglos. Sin embargo, él que la vivía en carne propia no encontraba muchos convenientes, abrumaba su cuerpo y aún cuando tiene la edad de un adolescente sigue con la misma figura de hace cinco años. Seré útil Mencionó, espera que el tiempo pase lo suficientemente pronto para poder dominar su técnica. De vuelta en la casa no le sorprende la imagen de Shen cargando a un niño, quizás porque estaba acostumbrado a verlo con Hao en los últimos meses, no así debe admitir que le extraña. La convivencia en esa casa es más amena de lo que imaginó, descartando que estaba rodeado de peligros, aspi tres días después de esa primera tarde se encuentra entrando en la oficina de su prometido con un ramo de flores de Lycoris radiata y Shen detrás de él cargando una canasta.
Todavía no hemos hablado mucho, podemos ir a un picnic Pretendía verse más adulto, no así, no previó que el escritorio con documentos fuese más alto que él y solo el ramo elevado podría alcanzar la vista del rubio, de todas formas no se rindió, avanzó al otro lado. Los demás también pueden ir... Compartir mi sirviente con mi hijo tampoco es problema Carraspeó en la última parte, debe admitir que ha tenido celos de ceder al pelinegro a cuidar al infante, todavía seguía siendo un niño en mente.
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Siente que es el peor día de su vida, no solo había tenido que trabajar apagando el caos que provocó, sino que entraba a una casa de monstruos. No bien había puesto un pie en la mansión, la energía maldita de un ser le mareó y terminó escondiéndose detrás del peliblanco ¿que se iba a acostumbrar a eso? Ahora empieza a pensar que no se estaba mal en su aldea a pesar de todo el bullying que debía soportar. Estás demente... Suspiró. Le ha costado habituarse pero encuentra que no todo es tan malo, estaba habituado a ver omegas en su pueblo, pero todos le parecían asquerosos, le sorprendió ver al zorro y por primera vez no sentirse asqueado de alguien con su constitución. De todas formas evitaba acercarse mucho porque cuando quería hacerlo este estaba cargando a ese pequeño engendro peligroso.
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Sus mejillas se encienden cuando escucha que parece que le agrada al niño, lo mismo había pasado cuando la matrona de su casa dijo que Adler parecía cómodo con él, ser elegido por un bebé no era una tarea sencilla así que le llenaba de orgullo hacerlo, quería ser útil también para ayudar a la posición de Adler. Nunca pensó que pasaría tan ocupado entre atender a Hao, a su joven amo y a Caín, motivo que lo llevaba a tener otro cargador de bebé, esta vez en su pecho. De manera que al entrar a la oficina contaba con Hao a su espalda y Caín al frente, esto pasaba porque fuera de la madre que le alimentaba y pasaba rato con él, el niño no quería estar con nadie más, un par de sirvientes habían muerto cuando intentaron cambiarlo porque él estaba ocupado acostando al moreno. Brindó una reverencia a Emmet, en su mano cargaba la canasta de mimbre con lo necesario para un picnic.
También veía que a su pequeño le agradaba el otro niño, de vez en cuando veía a Hao gatear torpemente hacia el albino menor y sonreír, lo veía llevar sus juguetes favoritos para compartirlos con el otro, le sorprendió cuando la otra vez sacó su chupeta favorita para entregársela al otro, debió disculparse con el contrario porque todavía contaba con baba de haberla usado previa a dársela.. -
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Los días pasan sin que se percate de ello, normalmente como la cabeza de la familia estaba ocupado reportándose a la organización que los acogió en japón o yendo a misiones, esperaba que su prometido creciera pronto y fuera capaz de compartir un poco aquella carga. Ese día es sorprendido por la actitud del moreno, no pensó que este se tomara tan en serio su matrimonio y en llevar una buena relación, creyó que solo se verían cuando era necesario, era bueno estar equivocado algunas veces. Tapó sus propios ojos con su mano ya que en soledad no llevaba nada para cubrirlos. Un momento. buscó sus gafas y al tenerlas listas se las colocó, estas eran especiales para ellos de forma en que su ritual no se activara ante cualquier cambio de emoción.
Suena encantador. le sonríe con sincera alegría, no con aquella que solía entregar a otros, de alguna forma el moreno le parecía muy tierno, ya que los propios niños de aquella mansión no se le antojaban tan adorables era bueno ver uno que si lo fuera. Llama a ambas maldiciones para que los acompañen, sería bueno si Yuuki dejara de mirar con tanto recelo a Cain y Alex era de buen uso para teletransportarlos a cualquier sitio. Eligió una montaña que había visto en una anterior misión, los cerezos florecían hermosamente dando un aire más tranquilo.
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Ríe con gracia cuando le responde de esa forma. ¿Debería teletransportar tu cabeza lejos de aquí y acabar con tu miseria? cuestiona. Una parte de él bromeaba, la otra no tanto, apenas era un recién llegado y ya se daba libertades molestas. Su convivencia los próximos días no es tan cercana, ya que el otro aún está muy tenso alrededor de ellos, decide que no le prestará atención, realmente era una cuestión de acostumbrarse. Arrastra al pelirrojo con él cuando les indican que su presencia es necesaria, en la oficina del rubio hace una reverencia y obliga al otro a hacerla antes de abrir el portal a su nuevo destino. Cuando todos están listos el pasa el portal cerrándolo tras él, su técnica maldita era bastante apreciada por la cabeza de la familia, por eso gozaba de un estatus mayor a los demás sirvientes.
Deberías aprovechar que es pequeño y causar una buena impresión, si no le caes bien a Cain-sama siendo grande, te matará. le susurra antes de ir donde su amo para servir al par.
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Es extraño ser objeto de adoración de un ser tan diminuto y sin gracia, no comprendía de donde venía esa extraña fijación del infante, creía que no había hecho nada especial para merecerlo. Cuando no se encuentra entrenando para practicar su domino se encuentra a si mismo en compañía del bebé llamado Hao. Esta vez en que todos van a un picnic no es la excepción, se encuentra apartado de la futura pareja y se dedica a entretener al otro. No es como si tuvieras algún mérito estando conmigo. mencionó. Acarició su cabeza por reflejo cuando le sonrió. Deberías hacerte amigo de Cain, si te casas con él podrías ser heredero de la familia.. -
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Todavía no tenía permiso para completar misiones por su cuenta, precisamente porque su ritual estaba muy inestable en su cuerpo que todavía no lo había asimilado por completo. Principalmente se había dedicado a realizar papeleo y documentos, Shen había colocado una pila de libros en su silla para elevarlo a la altura del escritorio de adulto que había solicitado para la tarea. No así, veía aburrido realizar solo eso y tener cero contactos con los demás. El lugar seleccionado por el otro es agradable, ve a su sirviente extender diferentes mantas, una para ellos, otra para el hermano de su prometido y el bebé, la tercera para Caín y él que se mantenía cerca y entregó una cuarta a las maldiciones que los había acompañado. De la canasta se encargó de sacar un par de postres una vez se sentó al lado de Emmet. Es mi favorito Extendió un dumpling de frijol dulce al otro, la canasta estaba principalmente repleta de dulces y tan solo un par de emparedados y bebidas para asimilar más un picnic.
Se sentó cruzando las piernas, mas cuando estaba comiendo de su propia selección se percató que estaba algo lejos, se arrastró un tanto para estar sentado al lado del mayor.
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Se sintió tentado a aceptar el ofrecimiento del otro para liberarlo de su miseria, por desgracia todavía tenía voluntad de vivir. En los días que pasa en ese lugar se dedica a recorrer la mansión, no podía alejarse de su amo sin el permiso de este de todas maneras. Encontrar que los sirvientes son en su mayoría espíritus de bajo nivel y fáciles de manipular es aburrido, aunque entendía la practicidad le hubiera gustado interactuar más ahora que adquirió un nuevo entorno. El único ser con el que pretendió hablar fue el zorro, lo cual fue poco fructífero porque estuvo a punto de morir no haber detectado las cuchillas en el aire. Cuando Alex volvió por él se encontraba tirado en su habitación con un par de libros para matar su aburrimiento, por desgracia, ahora se encontraba en una montaña acompañando al ser que lo encerró, un monstruo y otro par de personajes. Ya lo sé, pero no es sensato acercarse a él tampoco Respondió y fue el que aceptó la manta que les tendía el zorro para extenderla, venían a un picnic y no podían ser los únicos que arruinaran esa imagen, se sentó con una rodilla en alto donde apoyó su mentón.
Tampoco se ve que le agrades tanto Se ríe, no cree que el otro albino esté en posición de darle un sermón.
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En la manta que extendió para ellos descargó al bebé del cargador para permitirle acostarse, Caín estaba aprendiendo a gatear así que dejaba un espacio libre para que el bebé se moviera a gusto, el moreno le había indicado que no era necesario servirlos, así que solo podía estar a la espera de una nueva orden mientras cuidaba del niño.
Su Hao seguía encantado con el otro niño, desde su posición podía verlo sonreír y tomar sus propios juguetes para jugar con el mayor, como era un bebé no podía responder pero se veía bastante feliz cuando el otro le dirigía la palabra.. -
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Aceptó el dulce que el otro le tendía, estaba algo sorprendido por la actitud de su prometido aún, en especial cuando se aproximó más a él. Su anterior esposo no había sido en lo más mínimo, se unieron por una cuestión política, nunca se forzaron a intimar más de lo requerido, lo cual agradecía sinceramente porque ese hombre era francamente detestable. Limpió la comisura de los labios del menor con su pulgar y llevo este a su boca para terminar de limpiar los restos del dulce que estaba comiendo alegre. Que lindo. el halago sale casi por reflejo de sus labios, lo sorprende hasta él mismo pero no comenta nada más porque se dedica a beber el té que les han servido previamente. Cuando la taza del otro se encuentra vacía la llena nuevamente, era su deber como su futuro esposo.
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Contrario a lo que consumía su amo, por su lado estaba bebiendo sake, encontró el gusto a esta bebida cuando fueron a japón. Sonríe al otro. No creo que le agrade, pero es suficiente con que tolere mi presencia y reconozca mi utilidad. replica. No estaban seguros rodeados de esos monstruos, pero podían hacerlo si se ganaban el favor del amo o del infante. Tiende al otro algo del sake. Escuche que fuiste lo suficientemente tonto para intentar engañar al amo y terminaste aquí, ¿estabas tan desesperado?
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El integrante más joven de la familia se sentía frustrado intentando gatear, como veía comúnmente al otro bebé hacerlo. Si no lo mataba aún por envidia es porque eso haría sentir mal al zorro que lo acompañaba diariamente. Extendió sus extremidades con decisión y avanzó por su cuenta.
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Acepta los juguetes de Hao con una expresión de intranquilidad, ¿por qué era tan feliz? Acomoda sus gafas cuando las mueve por estar jugando con su rostro, no sería bueno lastimar al bebé.. -
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El puchero que formó en sus labios interrumpe la tarea de terminar su propio dulce, no le gustaban esa clase de cumplidos porque lo hacían sentirse como un niño y aunque actuaba como uno, realmente no lo era. No lo soy Responde ante el otro y sus mejillas se ruborizan por el contacto, fuera de su sirviente y en raras ocasiones su madre, nadie le había tocado con tanta intimidad. Terminó el dulce y tomó la mano del otro, había leído varias novelas cuando el aburrimiento le mataba en su casa y en todas las escenas románticas había una escena así. De todas formas, a pesar de lo intimidante que podía ser el ritual del otro y lo peligroso de todos los miembros ahí, realmente estaba cómodo, no había visto una persona más hermosa que Emmet y aunque anulara el compromiso nada le aseguraba casarse con alguien más joven o diferente. También se había sentido feliz cuando el otro lo recibió con seriedad al bajar del carruaje, pensó que se molestaría o se burlaría de su forma de niño pero el otro no había comentado nada.
Me gustas Confesó, los otros estaban en su propio mundo así que podía tener algo de libertad al hablar, tampoco sentía que estaba diciendo algo raro si iban a casarse sería lo normal.
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Aceptó la bebida mientras meditaba un poco, sabe que las palabras del otro eran correctas pero todavía no había aceptado del todo su actual posición, debía empezar a actuar con respeto o al menos imitar todo lo que hacía Alexander que era algo así como su mentor. Removió la bebida inclinando el vaso antes de beberla, sabe que lo hizo fue muy arriesgado, no así consideró era la mejor opción en el momento. ¿Nunca has ido a una aldea de yuki-onna? Murmuró, en el reflejo del cristalino sake podía ver a él mismo y no le gustaba, le recordaba a su madre. Son mujeres principalmente, un hombre nace nada siglo y es raro Rellenó su vaso vacío. Básicamente mi papel era perpetuar la especie y por eso iban a usarme, toda la aldea Frunce las cejas, recuerda el asco en su cuerpo. Aunque el tiempo se devolviera volvería a hacer lo mismo, odio los omegas
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Al ver la decisión de Caín en sus movimientos se levantó solo un poco para dejar el biberón a su hijo con la mezcla de leche y vainilla que le agradaba a Hao, así como un par de bocadillos para el niño que lo acompañaba y volvió a su sitio. Veía que el albino menor había logrado avanzar unos 10 metros, aplaudió suavemente. Muy bien, Caín-sama es muy fuerte Es la tercera vez que se encuentra felicitando a un bebé por gatear y no le molesta.
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Era un incordio no poder hablar, pero le agradaba el niño a pesar de la aura peligrosa de este. Tomó el biberón que le tendió su madre con ambas manos y se sentó en el regazo del menor para comer, alrededor estaban todos los juguetes que le había regalado al otro..
⋅◈⋅ Raise | me | Up ⋅◈⋅ |
