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𝙁𝙞𝙘𝙝𝙖 𝙙𝙚 𝙈𝙞𝙨𝙚𝙧𝙮.𝙇𝙞𝙖𝙢 𝙊’𝘽𝙧𝙞𝙚𝙣
Datos Generales
Nombre: Liam O’Brien
Edad: 31 años
Nacionalidad: Inglés con ascendencia mexicana.
Ocupación: Policía
Cumpleaños: 19 de marzo / Piscis
Orientación sexual: Bisexual / Versátil
Lugar de residencia actual: Nueva Zelanda
Historia
Liam nació como el primogénito de Thomas O’Brien un hombre trabajador que trabajaba en una fábrica de automóviles y de María Sánchez, una mujer inmigrante mexicana que fue a Londres por una mejor vida, volviéndose ayudante de cocina en un restaurante prestigioso. Eran una familia de bajos recursos viviendo en uno de los barrios peligrosos de Londres: Harlesden.
Pero, a pesar de la forma de vida que tuvo gran parte de su vida, fue un niño que mostraba felicidad, astucia e inteligencia. Desde pequeño entrenó box para defenderse de los delincuentes en su barrio y observó cómo funcionaba el tráfico de armas, drogas y el robo, evitando que afectaran a su familia. Obtuvo becas para estudiar en buenas escuelas y lograr un mejor futuro para sus padres que se partían la espalda para darle lo mejor dentro de sus posibilidades.
Entró a una escuela de gente adinerada con una beca del 100% y allí fue donde conoció a su mejor amigo: Elliot Rees. Al inicio, no quiso acercarse porque lo reconocía como el niño actor de una de las películas favoritas de su mamá, pero cuando se dio la oportunidad de trabajar en equipo, convivió de poco a poco con él.
Liam era diferente a todas las personas que se acercaban para aprovecharse de su fama, simplemente le gustaba estar con una persona tan seria como Elliot ya que sus personalidades chocaban. Él era más extrovertido, animado, bromista, una persona que sería descrita como un sol. Se dio cuenta que incluso en la vida de los ricos, había mucha tristeza rodeándolos, así que decidió que protegería a su mejor amigo.
Se volvieron cercanos, pero Liam prefería no visitar la casa de Elliot para que sus padres no renegaran que tuviera un amigo de bajo estatus social, algunas veces lo invitó a su casa a que conociera a sus padres y conociera un poco de normalidad, pero claro, todo a escondidas.
La secundaria y la preparatoria la cursaron juntos, siendo el apoyo mutuo del otro. Liam fue una de las razones que Elliot comenzó a tener demasiada confianza en su actuación y no se ponía ansioso en las audiciones; quizá con la tonta promesa de hacerle su helado o postre favorito si las pasaba, puesto que desde pequeño se le daba bien la cocina, sobre todo a repostería.
«Si quieres hacer feliz a alguien, hazle su comida favorita»
Aquellas palabras se grabaron en su memoria cuando su madre se las dijo con una gran sonrisa. Cuando salieron del bachillerato, los viajes de Elliot se hicieron más presentes, pero Liam fue paciente, sabía que su amigo era un gran actor y que los problemas en su casa le causaban estrés, estaba al tanto de su relación con su hermano menor, al cual solo conocía por la televisión o cine. Liam se dedicó a pensar qué deseaba ser en un futuro, puesto que sus padres no querían que trabajara mientras estudiaba, pero ahora siendo mayor de edad, era tiempo de ver por su futuro, así que decidió meterse a la Academia de Policías.
No tuvo dificultad al hacer los exámenes que validaban su inteligencia y su condición física además de su excelente salud. Nunca reveló que era mejor amigo de Elliot Rees y lo mantuvo en secreto para que la prensa no lo acosara ni buscara chantajearlo por información sobre su mejor amigo. Se veían poco, pero se mantenían comunicados a través de mensajes o videollamadas. Terminó a los 22 años como oficial de policía y al principio le encargaron tareas sencillas como hacer rondines por si había robos o problemas entre ciudadanos. Después de un año, logró sacar a sus padres de aquel barrio peligroso y los puso en un mejor lugar con un buen departamento mientras él se largaba a vivir solo.
Elliot lo visitaba de vez en cuando, pero siempre evitaban ser capturados para que no se expandieran los rumores, después de todo, Liam nunca negó que le atraían tanto chicas como chicos, pero jamás vio a su mejor amigo de otra forma, era como un hermano; sin embargo, la prensa podría destruir la carrera de Elliot en segundos si descubrían su secreto.
«Vámonos a Nueva York juntos.»
Fueron las repentinas palabras de Elliot cuando tenían 24 años, pero con una sonrisa Liam se negó. Había empezado una relación que llevaba tres meses con un chico llamado Harvey, así que no deseaba dejarlo, puesto que, ante todo, Liam era un maldito enamoradizo que cuando terminaba enculado, se entregaba por completo. Elliot, posiblemente porque nunca vio a su amigo tan enamorado antes, no se lo tomó a bien.
Pasaron tres años y fue cuando Harvey le dio el tiro de gracia al hallarlo engañándolo en su propio departamento. Planeaban casarse ese verano, incluso Elliot había aceptado ser el padrino a regañadientes si era una ceremonia privada, pero aquel idiota de Harvey fue tan descarado para hacerle esa traición de la peor forma posible. Le dejó el departamento y se marchó a casa de sus padres con el corazón roto.
Una persona muy sensible como él, no superaría aquello. Intentó superar su corazón saliendo con chicas o chicos, pero no funcionó y entonces pidió un traslado a donde fuera, pero lo más alejado de Londres, allí fue como terminó en Nueva Zelanda a los 28 años.
Siguió la carrera de su mejor amigo, disfrutando de ir al cine a ver sus películas y sintió una especie de curiosidad por Wyatt su hermano menor, clavándose con la serie medieval que este hizo. Realmente era bueno, al menos para sus expectativas. Intentó salir con más personas, pero decidió no involucrar su corazón si no estaba seguro de que la otra persona fuera igual de entregada que él.
Hace poco, le sorprendió que una productora se acercara a su trabajo y le pidieran ayuda como asesor en una nueva serie policiaca donde necesitan pegarse más a lo verídico, usando su experiencia en el campo como parte de una guía a los actores y guionista de la serie. Debido a que la paga es alta, ha aceptado, así podrá ayudar mejor a sus padres. Tiene esperanza de que Elliot lo visite en Nueva Zelanda ya que han sido pocas las veces que se ven desde que se mudó.
Gustos
🦮Cocinar, es su pasatiempo favorito. Adora cocinarle a sus personas amadas, Elliot siempre disfrutaba de verlo a escondidas porque le hacía sus platillos favoritos.
🦮Boxear
🦮Correr por las mañanas, le gusta ejercitarse de todas las formas posibles.
🦮Ver películas, halló el gusto al saber que su mejor amigo era actor, pero le fascinan en donde participé él.
🦮Los perros, le ponen muy feliz.
🦮Los y las rubias. Son su tipo ideal.
🦮Los videojuegos retro, es un alma vieja, le encantan los juegos de arcade.
🦮Paintball.
🦮Convivir con Elliot y sus padres. Siente que su mejor amigo puede relajarse cuando está con él.
🦮Los musicales, lo admite, es su gusto culposo.
🦮Bailar, tiene sangre latina, ¿cómo demonios no le va a gustar?
🦮Vino tinto.
Disgustos
💀Los drogadictos. Fue doloroso para él arrestar a personas que conocía desde pequeño y que incursionaban en este tipo de adicción.
💀La infidelidad, quedó traumado con lo de Harvey.
💀Los reptiles, gran parte de ellos le causan repelús.
💀Tener que disparar, prefiere no dañar a nadie, incluso si son malos.
💀La gente prepotente, racista, clasista y las injusticias.
💀Corrupción.
💀Los fantasmas, puede verlos en el cine, pero le dan mucho miedo por las leyendas que su madre le contaba de pequeño.
💀Que olviden fechas importantes, una vez le dejó de hablar a Elliot por no recordar San Valentín y festejar juntos el día de la amistad, desde allí, aquel actor aprendió a poner alarmas para cosas importantes.
💀Que sean descuidados consigo mismos. Es demasiado protector y cuidador y le fastidia que alguien se dejé hundir.
Extras
✨Salió en el mes de marzo en un calendario de los policías más guapos que hicieron de broma en la comisaría, pero milagrosamente, se vendió muy bien.
✨Lleva una pulsera de amistad desde bachillerato que comparte con Elliot, nunca se la quita.
✨Tiene un perro Golden Retriever que se llama Clifford.
✨Es muy hogareño.
✨Sabe hablar inglés y español fluidamente.
✨Una vez le ofrecieron ser modelo cuando lo vieron en la calle, pero se negó rotundamente, detesta el mundo del espectáculo gracias a que vio a Elliot sufrir para llegar hasta donde está.
✨Tiene excelente puntería, pero nunca le ha disparado a nadie.
✨Tiene como fetiche el amarrar a sus amantes. No lo revela de inmediato, pero le excita.
✨Es sensible de los pezones (¿?)
✨Harvey intentó localizarlo muchas veces para pedirle perdón, pero lo bloqueó de todos lados. Su ex era un modelo que conoció gracias a Elliot. Solo él sabe que son amigos cercanos.
✨Es muy malo cantando, pero lo hace con sentimiento (¿?)
✨Compra la mercancía que puede de Elliot, para apoyarlo, pero cualquiera pensaría que es MUY fanático.
Apariencia
𝙁𝙞𝙘𝙝𝙖 𝙙𝙚 𝙇𝙞𝙜𝙝𝙩&𝙆𝙖𝙯𝙚𝙒𝙮𝙖𝙩𝙩 𝙍𝙚𝙚𝙨
What more could he wish for?
Wyatt Rees
〡28 años 〡 Actor〡 Versátil 〡Nueva Zelanda〡
Desde que Wyatt vino al mundo se supo que sería alguien capaz de tenerlo todo en la vida. No era sólo un bebé tranquilo que apenas lloraba y capaz de distraerse con cualquier tontería con la que empezar a reír, sino que era hijo de un famoso compositor británico, conocido por algunas bandas sonoras que ambientaban películas galardonadas con múltiples premios, y una modelo americana que conoció a su marido en, precisamente, uno de esos eventos.
Wyatt nació en Londres y, aunque esta ciudad no destaque por su buen tiempo, eso no nubló su brillante sonrisa. ¿Qué podría borrarla? Vivía en una familia muy cariñosa, sin ninguna clase de problema económico y, aunque su mayor preocupación a veces fuera no poder ver a sus padres por trabajo, su hermano cuatro años mayor que él, junto a algunas trabajadoras contratadas, se encargaba de suplir esas necesidades. Elliot Rees mucho más reponsable y serio que su travieso y adorable hermano pequeño fue contratado a la edad de nueve años para participar en una película romántica como actor infantil principal. Que la película fuera una comedia romántica para adultos, en la que participaba su tío por parte de madre, también actor, no le quitó mérito a su hermano que fue nominado para varios premios.
El salto a la fama parecía estar asegurado para el mayor de los hermanos Rees, pero ¿qué había del pequeño? Mientras Elliot se enfrascaba en aprenderse las líneas de sus diálogos, Wyatt se entretenía viéndolo actuar extraño o "ayudándolo" con las líneas de otros personajes exagerándolas o cambiando las emociones con las que se suponía que había que leerlas por justamente la contraria. Esto molestaba sobremanera a su serio hermano mayor y a Wyatt sólo lo divertía más y más.
Hubo una ocasión en la que sus padres le preguntaron seriamente si él quería ser como su hermano, si le gustaría participar en alguna película y la respuesta del menor sólo fue el silencio junto a un encogimiento de hombros. Por el momento Wyatt parecía más interesado en seguir jugando y acudiendo al colegio con normalidad.
No todo fue siempre agradable, en el colegio ya era conocido por ser el hijo y hermano de... Muchos niños y padres, algunos peores que sus hijos, lo conocían y trataban de acercarse a él para adularlo y otros para molestarlo. Algunos pequeños envidiosos empezaron a decirle que nunca podría ser igual a su hermano, que él era un fracaso y es que hasta los profesores se quejaban del comportamiento y notas de Wyatt al no parecerse a las de su hermano.
Fue en ese momento que Wyatt cambió de parecer y le pidió a su hermano que le dejara practicar nuevamente las líneas con él. Su actitud no cambió del todo, pero sí empezó a tomárselo más en serio puesto que una pequeña, pero sana, rivalidad había nacido en él. No se quedaría atrás.
A los nueve años apareció por primera vez en pantalla, junto a su hermano, pero apenas le dieron unos minutos de los cuales en el metraje final se quedaron en segundos. No tuvo suerte, o eso pensó, la próxima vez iría mejor... no fue así.
Era difícil, muy difícil, acudir a las audiciones sabiendo que tu hermano también estaba en ellas. No porque lo hiciera mal, al contrario, los seleccionadores y directores de reparto parecían bastante satisfechos con su actuación, pero en cuanto Elliot aparecía nublaba el resto de audiciones y se quedaba con el papel. Muchos pensaban que era complicado competir con un niño de dieciséis años con experiencia en varias películas, pero no se imaginaban lo humillante que resultaba para Wyatt. Y aún cuando en algunas no estaba Elliot, siempre había otro niño con algo más de experiencia, con alguna aptitud diferente u otro aspecto que encajara más. Su apellido no bastaba y se sentía tal y como le llamaban en el colegio: un fracasado.
Quería a su hermano con locura, pero esto empezó a dañar la relación que tenía con él, y si sumábamos el hecho de que sus padres no llegaban a comprender por qué Wyatt pedía que no dejaran a Elliot participar en al menos alguna audición en la que él participaba, animándole con un "esfuérzate más", se convertía en una bomba que siempre estallaba cuando sus padres no estaban.
Las discusiones y tensiones entre los hermanos se hicieron palpables, las trabajadoras de la casa no sabían cómo pararlas y ambos hermanos les pedían que no se metieran puesto que no tenía nada que ver con ellas. Afortunadamente o, por desgracia, Elliot ya no pasaba mucho tiempo en la casa por los constantes viajes de rodaje que tenía, dejando a Wyatt solo y abandonado en una casa demasiado grande para él.
Wyatt no sabía cómo lidiar con la frustración que sentía y empezó a desarrollar un pequeño problema...
Fue precisamente, en esa época de educación secundaria cuando se dio cuénta de lo mucho que gustaba a las chicas de su instituto y... a chicos. Gustar a los demás se convirtió en una adicción que empezó a llenar el vacío que sentía en su interior. Empezó a experimentar, más nunca fue nada serio, no al menos con las chicas. Éstas se conformaban con presumir que habían salido con él durante una semana o un mes, pero con lo chicos... con ellos era diferente. El secretismo, el miedo a que pudieran descubrirle en cualquier momento por tener algo prohibido lo incitaba a desear más y, mientras las chicas eran su perfecta tapadera, uno de los amigos de su clase se convirtió en su primer novio oficial, a escondidas del resto del mundo.
A los quince años, participó en una serie infantil como uno de los actores protagonistas, no tuvo el éxito esperado y se canceló, pero al menos había adquirido experiencia y su nombre empezó a sonar en el mundo: el pequeño de los Rees parecía tener talento también. Por fin ganó algo de esa atención deseada, pero debido a los rodajes dejó de asistir a clases presenciales de su instituto, su relación con Colin se rompió por la distancia y, aunque era lo que quería, romper con él le resultó bastante duro.
Tardó en olvidarlo, pero sus nuevos papeles en diferentes series británicas ayudaron a no pensar mucho en ello. Ahora tenía compañeros de casi su misma edad y muchos de ellos muy atractivos. No todos iban por su mismo camino, pero su instinto nunca le falló en eso.
El tiempo pasó, su hermano se mudó a Nueva York por la cantidad de oportunidades que recibía y por comodidad. Wyatt continuó con algunas series británicas que, poco a poco y gracias a internet, empezaron a ser más conocidas por el mundo y no sólo en el país, intercalando con algunos trabajos de modelo que, no le gustaban mucho, se veía obligado a hacer al haberse independizado a los dieciocho.
No fue hasta los veintidós años que recibió uno de los papeles principales en una serie medieval con el que se dio más a conocer fuera del país y, gracias a las cinco temporadas, con el que lo nominaron cada año a varios premios y ganando uno de ellos como mejor "actor de drama" y otro a la categoría de "mejor química" compartido con su compañero de reparto.
Y, en cuanto el rodaje terminó, decidió mudarse también a Nueva York en busca de nuevos proyectos. Sí, esa fue la idea inicial, pero la competencia allí fue mucho más dura de lo esperado. Fue difícil abrirse paso entre tanta estrella naciente y volvió a frustrarse, decidiendo que lo mejor sería salir de allí, marcharse lejos y no, no volvería a casa. No había nada allí a lo que pudiera considerar su hogar salvo los fans que lo seguían en las distintas redes sociales. Buscó más lejos, relacionó el género de su serie de más éxito con el lugar donde más películas se rodaban de ese estilo fantástico-medieval, Nueva Zelanda.
Datos extra:
🎬 Su hermano sigue triunfando, mientras que él ahora mismo está pasando por una época algo difícil al no encontrar nada y tener que dedicarse al modelaje. Incluso parece que se ha comprometido con una actriz de también gran renombre y a la que no le han presentado.
🎬 Afortunadamente, o calculadamente, no se ha visto envuelto en ningún escándalo amoroso. Y no se puede decir que haya tenido pocos amoríos.
🎬 Adora a sus fans y lo locas que muchas están al shipearlo con algunos compañeros de reparto. Él precisamente es uno de los actores que fomenta eso, se ha dado cuenta de que así llama más la atención y lo quieren más, y le resulta tan sencillo llevarse bien con los demás que es difícil no aprovecharse de algo así.
🎬 Sabe cantar, muy bien de hecho. Su padre les enseñó a hacerlo de pequeños, pero es su secreto mejor guardado. No quiere participar en musicales.
🎬 Se dice de él que siempre lleva la alegría y travesuras a los rodajes. Todos sus compañeros están de acuerdo en que es el más divertido, siempre alegre y sonriente, gastando alguna que otra broma, pero llegar a casa tras la finalización de cualquier trabajo, es volver a sentir la soledad atacándole y aún le duele.
🎬 Ya no tiene relación con su hermano, y apenas habla de vez en cuando con su madre sobre temas superficiales. Le resulta muy doloroso el hecho de que su familia anteponga el éxito a los sentimientos, así que ha preferido ocultarlos de ellos y seguir su vida a su manera.
🎬 Muchos lo envidian. "¿Qué más podría desear?" piensan, y él sólo lamenta que parece tener una familia disfuncional a la que ninguno de sus miembros parece interesarle sus problemas emocionales puesto que están demasiado ocupados con sus carreras. Echa de menos la relación que tenía con Colin y le gustaría volver a tener algo así.
🎬 No sabe qué esperar de Auckland, tiene claro que le va a encantar perderse entre las preciosas vistas de la ciudad, y que probablemente lo primero que hará será buscar una nueva agencia que lo represente, pero... tal vez, podría tomarse unos días de relax, de disfrute personal para... liberar ciertas tensiones.𝙋𝙚𝙧𝙨𝙤𝙣𝙖𝙟𝙚𝙨 𝙎𝙚𝙘𝙪𝙣𝙙𝙖𝙧𝙞𝙤𝙨
𝙕𝙖𝙘𝙝𝙖𝙧𝙮 𝘿𝙤𝙮𝙡𝙚 (𝙢𝙚𝙟𝙤𝙧 𝙖𝙢𝙞𝙜𝙤 𝙙𝙚 𝙇𝙞𝙖𝙢)
Zachary Doyle | 29 años | Diseñador de interiores | Homosexual | Sagitario | Soltero, pero en busca del amor.
Irlandés. Es un gran amigo de Liam, se conocieron cuando lo rescató de una riña con un cliente y desde allí se volvieron cercanos. Es extrovertido y muy extravagante, le gusta llamar la atención a donde sea que va. Le gustan los chicos varoniles, pero tiene un terrible don, siempre escoge a patanes. Liam ha arrestado a varios exes cuando intentan violentarlo, por eso se preocupa demasiado por las decisiones de Zachary. Es una persona directa que dice lo que piensa, sin tacto, pero tiene un gran corazón con sus seres queridos. Detallista y algo perfeccionista, eso le ha ayudado con su trabajo.
Hacía apenas una semana que había llegado a Wellington, capital de Nueva Zelanda. Allí esperaba encontrar algo muy diferente a Londres y... Nueva York. Sus anteriores fracasos le hicieron decidirse por buscar algo más lejos de su entorno habitual, ya fuera su familia o su carrera profesional.
Fue uno de los actores principales en una serie que tuvo bastante relevancia, pero hasta llegar a ella y, desde entonces, no ha tenido ningún papel similar. Así que quiso apartarse un poco de ese mundo, pero estando todavía pendiente de las oportunidades que pudieran surgir. Mientras su manager se encargaba de buscar nuevos trabajos, él se limitaría a tratar de despejar su mente y recobrar nuevas energías.
Si bien era verdad que aún se hospedaba en la habitación de un hotel, puesto que no había encontrado un piso de alquiler que lo convenciese, pensaba tomarse su tiempo en disfrutar y conocer de la ciudad. No quería tener prisa, ya no más... Y, hoy, viernes por la noche, había decidido que saldría a conocer la vida nocturna de la capital.
Con una sudadera negra, cuya capucha no quería quitarse, y unos vaqueros simples, decidió salir a dar un paseo y, con la ayuda de su móvil, buscó bares que pudieran ser de su interés. Encontró varios que podrían ser de su agrado, sin embargo la ambientación de estos tenía demasiada luz en su interior, era más una cafetería que un bar y pensó que tendría problemas si lo reconocían. Por eso siguió buscando hasta dar con uno que pareció encajarle.
En la búsqueda de su móvil no ponía nada, pero por lo que notó parecía un bar gay y... bueno, ¿por qué no? No pensó en encontrar a alguien con quién divertirse esa noche, pero... tal vez así pudiera librarse de ciertas tensiones, hasta encontrar un gimnasio en el que pudiera ejercitarse.
Entró y caminó directo, sin mirar a su alrededor, hasta la barra. Pensó en pedir una copa, pero se limitó a una cerveza. Tampoco quería tener ese puntillo esa noche. Aún tenía muchas cosas que pensar y que arreglar en su vida allí y no quería sufrir una resaca a la mañana siguiente. Claro, una copa no le afectaría tanto, pero detrás de una... siempre venían más.
Tan pronto le fue servida, se centró por unos segundos en el líquido antes de darle el primer trago. Ojalá la vida fuera a veces tan sencilla como: beber.
Se giró a mirar a su alrededor, por si encontraba algún chico que llamase su atención y, sí, justo a su derecha tenía a uno sentado bastante atractivo. Ojos bonitos, barba arreglada, parecía mayor que él y solía preferirlos más jóvenes, pero ese hombre tenía algo... Además, se le notaban los músculos trabajados, seguro que podría seguirle el ritmo en el gimnasio, o recomendarle uno bueno, o... motivarlo a ir en las mañanas que menos le apetecía hacer ejercicio y sólo se quería quedar en la cama.
¿En qué estás pensando Wyatt? Sólo un lío de una noche, nada más por favor. Bastante tienes con el desastre que es tu vida ahora mismo...
Sólo había un pequeño, pequeñísimo problema que solventar. Siguió la mirada de aquél hombre y notó que la tenía clavada en una mesa, una en la que estaban charlando animadamente dos tipos. Las alarmas de Wyatt se dispararon. Pensó en que tal vez se tratase de un stalker o algo así, pero una persona así se ocultaría más ¿no? ¿Llegaría a ser tan descarado al punto de que otros pudieran descubrirlo?
De hecho, ahora mismo él podría pasar por uno, con la capucha de su sudadera negra puesta para ocultarse, seguro que daba mal rollo a muchos.
— ¿Quién de los dos es? — se atrevió a preguntarle, pero mirando su cerveza antes de darle un trago. — Tu ex — aclaró, — ¿quién de los dos? — tampoco es que notase odio en su mirada como para estar resentido por algo... Tal vez malinterpretó las cosas y por eso se atrevió a preguntarle.
Su curiosidad siempre fue muy mala... Terminaba por meterle en muchos líos y no aprendía.
Edited by Light&Kaze - 26/4/2024, 22:25
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Todos dicen que el amor duele, pero es mentira.
La soledad duele. El rechazo duele. Perder a alguien duele. La envidia duele.
Y todos confunden estas cosas con el amor, pero la realidad es que el amor es la única cosa en este mundo que puede aliviar todo el dolor y hacer sentir bien de nuevo a una persona.
El amor es la única cosa en este mundo que no duele ni lastima.
—Liam Neeson
Habían pasado muchos cambios en su vida en las últimas semanas. Primero sus padres le habían llamado para contarle que debido a una tormenta que hubo en Londres, su casa había recibido daños. Sabía que sus padres solo le contaban aquello para desahogarse, pero Liam, con lo preocupón que era, estaba buscando una forma de conseguir dinero extra para ayudarlos a minimizar la fuerte suma que saldría arreglar todos los destrozos.
Lo siguiente fue la repentina petición de uno de sus amigos de Nueva Zelanda. Elliot era su mejor amigo, el hermano que nunca tuvo, pero Liam no era un asocial ni nada por el estilo, al contrario, a la gente le agradaba su compañía.
—¿Es prudente ir a una cita a ciegas? Sé que Nueva Zelanda no es como Estados Unidos o Londres, pero los locos están en todas partes, Zachary. —mencionó angustiado mientras el pelirrojo negaba con la cabeza.
—Por eso es bueno tener de amigo a un oficial de policía, ¿cierto? —sonrió con descaro, provocando que Liam suspirara. Si sus compañeros en la comisaría supieran que usaba sus conocimientos y habilidades para proteger a su amigo homosexual en una cita, claramente se echarían a reír.
Torció la boca. No quería ir a un bar a fingir que tomaba unas cuantas cervezas mientras vigilaba al impulsivo de su amigo, pero no podía negarse, si no lo acompañaba, ¿qué tal si le pasaba una desgracia? Jamás se lo perdonaría…
¡Puto Zachary! ¡Sabía bien como conseguir lo que quería!
—Bien, te acompaño, pero me debes un favor. —sonrió divertido mientras su amigo se alegraba y corría a abrazarlo con entusiasmo.
—¡Eres el mejor! Deberías aprovechar, si mi cita va bien, no estaría mal que también consiguieras a un chico ardiente para superar al bastardo de… —Liam alzó una mano y lo hizo detenerse. No quería hablar de su ex novio infiel.
Sí, han pasado años, pero todavía le duele.
—Solo vayamos a tu jodida cita, ¿quieres? Alístate antes de que me arrepienta. —se quejó y Zachary no lo pensó dos veces y se marchó a cambiarse de ropa. Menos mal que se lo dijo en su día libre y no cuando andaba con el uniforme, seguramente los gays huirían de él como si tuviera el sarampión o incluso el bar le negaría la entrada.
Cruzó los dedos para que su amigo consiguiera un buen ligue, Zachary era el peor escogiendo hombres, y miren que no era quién para juzgarlo.
Liam fue el primero en entrar al bar y rápidamente sintió las miradas encima suyo. No estaba usando nada vistoso, pero la ropa siempre marcaba su cuerpo bien trabajado gracias a un entrenamiento riguroso y su gusto por el box. Usaba una camisa cómoda de mangas largas color gris, unos pantalones de tela caqui y botines negros. Nada fuera de lo normal. Se sentó frente a la barra y el fue recibido con una sonrisa por parte del barista. Liam correspondió la cordialidad y pidió una cerveza sencilla.
Observó que el barman la abriera frente a sus ojos y se la entregara. Sí, gajes del oficio, no quería ser drogado allí mismo, sería tan estúpido para un policía con años de experiencia. Tragó ligeramente de ella, no planeaba emborracharse como un adolescente idiota. En ese momento estaba de «servicio» obligadamente gracias a su amigo.
A los minutos llegó Zachary y se sentó en una mesa con un chico más joven que él, pero de apariencia varonil. Tenía facciones italianas, ¿lo sería? Bueno, era claramente el tipo de su amigo. Sonrió al beber la cerveza, al parecer parecían encantados el uno con el otro.
Al menos uno de los dos tendría acción esa noche.
No se daba cuenta que realmente parecía un jodido acosador, volteando a cada rato para ver cómo iban las cosas con Zachary. Tal vez eso fue lo que ahuyentó a todos los chicos que estaban interesados en él, pues pensaron que era un maldito ex celoso o un puto loco que perseguía a alguno de esos dos.
Vaya reputación que se hizo en pocos minutos.
Estaba concentrado en Zachary que cuando le hablaron, reaccionó sorprendido. Se giró y notó que ese chico parecía jodidamente sospechoso con su capucha puesta encima, ¿era un maldito asesino serial o un rarito?
Frunció ligeramente el ceño, no podía verle bien por la baja iluminación, pero cuando comprendió que le preguntaba sobre si Zachary o el italiano eran su ex, dejó su mala expresión y esta cambió a incredulidad y luego se echó a reír.
¡Wow, qué situación tan mas subnormal!
—D-Disculpa…—intentó recuperar el aire mientras se sostenía el estómago. —No me había dado cuenta que actuaba sospechosamente, debí parecer un acosador, ¿cierto? La respuesta es ninguno. —le aclaró. No quería que pensaran que era sospechoso y llamaran a la policía, si sus amigos lo atrapaban, sería una anécdota vergonzosa.
No, por favor, en su día libre no.
—Mi amigo es el pelirrojo. —se giró sobre la barra para darle la espalda a aquella mesa. Las cosas marchaban bien, estaba fuera de peligro. —Está en una cita a ciegas con el tipo italiano, pero me pidió que le cubriera la espalda, pero creo que no lo necesita, ¿qué opinas?
Sonrió de lado mientras tomaba su cerveza y le daba un largo trago, ¿debería marcharse y dejar de parecer un jodido delincuente?
Miró de lado al nuevo y mostró una sonrisita burlona.
—¿Te quedaste en la vieja moda de la comunidad emo? ¿Por qué el atuendo tan sospechoso? —comentó divertido mientras le daba otro trago a su cerveza. —Si yo luzco como un ex resentido, tú pareces un acechador. —se rió.
Ah, vaya, qué día.
—Mi nombre es Liam, ¿cuál es el tuyo? —preguntó amablemente.
Si tan solo supiera que estaba hablando con el hermano menor de Elliot, se le hubiera borrado hasta la sonrisa.SPOILER (click to view)¡Muchas gracias por abrirlo, te quedó perfecto!
Bueno te dejo el atuendo de Liam. Es algo sencillo.
Me gusta dejar una mini ficha de mis personajes secundarios por si luego gustas usarlos también♥QUOTEZachary Doyle | 29 años | Diseñador de interiores | Homosexual | Sagitario | Soltero, pero en busca del amor.
Irlandés. Es un gran amigo de Liam, se conocieron cuando lo rescató de una riña con un cliente y desde allí se volvieron cercanos. Es extrovertido y muy extravagante, le gusta llamar la atención a donde sea que va. Le gustan los chicos varoniles, pero tiene un terrible don, siempre escoge a patanes. Liam ha arrestado a varios exes cuando intentan violentarlo, por eso se preocupa demasiado por las decisiones de Zachary. Es una persona directa que dice lo que piensa, sin tacto, pero tiene un gran corazón con sus seres queridos. Detallista y algo perfeccionista, eso le ha ayudado con su trabajo.. -
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Ah, vaya... Esa no era una mala reacción. Giró levemente su rostro para poder verle por el rabillo del ojo, sin que la capucha lo molestase, viendo divertido cómo parecía estar pasándolo en grande por lo que le acababa de preguntar. Al final parecía que su intuición había sido buena y, realmente el otro no se había dado cuenta de lo que parecía al estar controlando esa mesa de manera tan... intensiva.
— Algo así — respondió con una sonrisa a lo de que parecía un acosador, pero su sonrisa se mantenía oculta por la capucha. — Oh... — así que su amigo estaba en una cita a ciegas y se estaba asegurando de que todo fuera bien.
Punto positivo para el otro. Había pasado de parecer un rarito a ser un gran amigo.
— Entonces, no eres un acosador, ¿sólo eres racista? — preguntó y apenas aguantó unos segundos antes de echarse a reír, jugando con el botellín de cerveza deslizándolo por la barra de una mano a la otra. — Es broma, es broma. O a lo mejor no, ¿algo en contra de los italianos? A parte de que parece que son conquistadores natos en esto del amor — rio otra vez, un poco.
Se giró a ver a la pareja para responder a su pregunta y vio al amigo del que tenía sentado al lado parecer bastante cómodo. Su trabajo le había hecho aprender bastante del lenguaje corporal y ninguno de los dos parecía tenso, charlaban animadamente y, aunque eso no pudiera revelar malas intenciones, no le parecía una mala señal.
Estuvo a punto de beber un trago de su cerveza, quedándose con el botellín en el aire y sonriendo cuando le preguntó si se había quedado en la antigua moda emo, y tardando unos segundos en beber otro trago.
— Entonces, supongo que hacemos buena pareja ¿no? — relamió su labio inferior y volvió a beber.
Dejó la cerveza en la barra y movió sus dedos por esta de manera nerviosa. ¿Sería malo si lo reconocían en uno de esos lugares? Siempre había cuidado de que sus sexualidad no comprometiese su trabajo, pero ahora mismo no tenía ninguno y, aunque los rumores podrían empezar a surgir en cualquier momento, el riesgo siempre le atraía.
— Soy Wyatt — giró su rostro para verlo y que él también pudiese mirarlo.
De esa manera pudo notar la expresión en el rostro del otro y algo le dijo que su apariencia le sonaba de algo...
— Cómo creo que has notado, tengo mis motivos para esconderme — sonrió, — pero no soy ningún acechador — asintió un par de veces. — Guárdame el secreto ¿eh? — pidió haciendo con el cuello de la botella el gesto para que guardase silencio como si fuera su dedo, antes de darle un trago más. — Hace poco que he llegado a la ciudad, y me gusta conocer la ciudad en la que resido — le explicó. — Y en este bar, como la luz es de un ambiente más íntimo, es más difícil que me reconozcan — esperaba que lo entendiese. — ¿Tú a qué te dedicas, Liam? — él ya sabía su secreto, su profesión, le tocaba darse a conocer.SPOILER (click to view)Grazie! No he caído en dejarte el atuendo de Wyatt, pero imagina que es algo así su look
Yo también preparo mini fichitas para los personajes secundarios, pero ahora mismo Wyatt está solo en la ciudad, puede que cuando le llame su manager te traiga la ficha
Por otro lado, lo que suelo hacer con los pjs secundarios es añadirlos a las fichas, así si queremos revisar algo sólo tenemos que ir a la página inicial y está allí todo ^^
Una última cosa, ¿cómo has hecho ese separador de Querencia? Me ha gustado mucho
y me gustaría añadirlo en el tema inicial como separador en lugar de la línea negra decorativa que he puesto xD Si quieres coméntame por MP y te explico yo también cómo dar el formato a las fichas para que puedas abrirlas sin el spoiler . -
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Escuchó la broma sobre el racismo de los italianos y sonrió de lado. Este chico era gracioso y ocurrente. Se llevarían bien.
—Debes admitir que, así como son conquistadores innatos también pueden ser mafiosos. —¿una broma prejuiciosa? Quizás, pero hey, esperaba que se lo tomara como lo que era, un comentario tonto. Se rió por lo dicho y le dio otro sorbo a su cerveza, indicándole al mesero que le trajera otra botella.
Al menos podía relajarse un poco, ahora que sabía que su amigo estaba fuera de peligro, al menos por el momento.
Cuando le abrieron la nueva botella y escuchó el comentario de que hacían buena pareja, desvió la mirada y vio ligeramente el perfil de esta persona, pudo notar unos mechones rubios, vaya, al menos era su tipo. No contestó nada, pero le sonrió de lado como una especie de confirmación silenciosa.
Honestamente, no fue a ese bar con la intención de ligar, pero le agradaba este chico, tenía una especie de humor igual al suyo. No estaba nada mal conocer a nuevas personas.
Cuando el rubio se presentó y se giró para que le viera mucho mejor. Tuvo que controlarse para que su sorpresa no fuera DEMASIADA. Wyatt Rees… ¡EL HERMANO MENOR DE ELLIOT! Mierda, ¿qué hacía ese chico en ese lugar? Espera, era clara la respuesta, ¿también era bisexual o era homosexual? Parpadeó con asombro y le dio un trago a su cerveza.
Solamente podía pensar en todo lo malo de esta situación. Los hermanos Rees tenían una relación del carajo, cuántas veces escuchó a Elliot quejarse de Wyatt mientras se emborrachaban juntos en casa, sentía que ya lo conocía más allá de su serie televisiva y sus fotos de modelaje.
Si Elliot se enteraba de esto, tendría frunciéndole el ceño por volverse cercano a su hermanito; sin embargo, a pesar de que la relación de los hermanos Rees era del asco, ahora se sentía comprometido a echarle un ojo a esta persona. Sí, era muy preocupón para su propio bien.
—Secreto guardado, Wyatt. —sonrió de lado, teniendo nervios de acero para no ser atrapado. No sabía como reaccionaría este actor si supiera que era el puto mejor amigo de Elliot, es decir, sabía como reaccionaría su hermano mayor y no era buena señal.
Miró la ambientación del local y asintió. Era cierto, era más oscura de lo normal, pero podía ver el brillo hipnótico de esos ojos azules de Wyatt, casi parecían ahogarte si los mirabas insistentemente. Recordaba que, al ver su serie, muchos halagaban su apariencia, pero sobre todo su mirada seductora.
Concordaba.
Al preguntarle sobre su oficio sonrió divertido mientras le daba otro sorbo a la cerveza. Dejó la botella sobre la barra y se acercó un poco acortando la distancia. Si, quería ser juguetón, pero también no deseaba que los demás clientes se alertaran al tener a un policía allí.
No estaba de servicio, pero hey, si veía conductas peligrosas, les cortaría su rollo a los chicos.
—Ni te imaginas, Wyatt… por el poder que me concede el estado. —sí, era un idiota hablando tan seriamente cuando al final iba a coronar con una broma. —Estás oficialmente arrestado.
Y tras haber dicho esas palabras, mostró su placa policial para que la viera solamente él. Luego la volvió a guardar y se echó a reír dulcemente, volviendo a beber de la cerveza.
—Guárdame el secreto también, ¿sí? Creo que, si descubren de mi oficio, todos aquí se volverán locos y le arruinaré la cita a mi amigo. —comentó con un guiño de ojo. Repasó las palabras de Wyatt y pensó cómo seguir la conversación.
En realidad, no conocía de nada a este Rees, pero sentía curiosidad por él.
—¿Por qué escogiste Nueva Zelanda como tu nuevo destino? ¿Tienes mejores planes en este lugar? ¿Qué es lo que más te ha llamado la atención de la ciudad? Por cierto, me gustó tu papel en la serie medieval, eres un gran actor, espero ver nuevos proyectos tuyos. Sé que eres de Londres, así que compartimos tres cosas en común: el gusto por la misma cerveza, nuestra apariencia sospechosa y que somos ingleses. Nunca tuve tantas cosas en común con otra persona en tan pocos minutos.
Se rió suavemente y se acabó su segunda cerveza. Zachary había dejado de ser su objetivo esta noche.SPOILER (click to view)Gracias por dejarme la apariencia para imaginarmelo mejor♥
Y no te apures ya cuando vayan agregando mas personajes secundarios, estaré entusiasmada de verlos/leerlos.
Gracias por usar el separador y dejar el personaje secundario, además de enseñarme el truquito de las fichas♥. -
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— Claro, los italianos no pueden ser nada más que una de esas dos opciones — continuó su broma con una pequeña risa. — Seguro que si tu amigo se enterase que estamos hablando mal de su cita, no le haría tanta gracia — sonrió travieso, aunque el otro no pudiera verle.
No creyó encontrarse a un fan tan pronto y, por la reacción que tuvo, aunque controlada, parecía conocerlo bastante. Saber interpretar le había ayudado a conocer hasta las expresiones más sutiles y, aquel hombre ahora mismo era un poema. Se sintió de repente un poco nervioso, no le parecía mala persona, pero tampoco quería que la primera persona que conocía en ese lugar fuera el típico fan acosador...
Asintió como modo de agradecimiento cuando le dijo que guardaba su secreto, no parecía mentir, así que confiaría en él hasta que le demostrase lo contrario.
Al menos ahora, podía mirarlo todo lo que quisiese, puesto que ya había descubierto su identidad. Era un hombre atractivo, mucho. Estaba seguro de que si lo llevaba a una sesión de modelaje ninguno de los presentes se quejarían de su presencia, es más, lo harían participar en ella.
Notó que Liam se acercaba a él, tras preguntarle por su oficio y clavó los ojos en los contrarios con curiosidad por ese gesto. Alzó sus cejas en respuesta cuando le dijo que ni se imaginaba, y luego sus ojos casi se le salen de las órbitas cuando finalizó su frase con un "oficialmente arrestado".
— ¿Qué? — preguntó sorprendido antes de soltar una pequeña risilla antes de echarse a reír.
Estuvo a punto de preguntarle si bromeaba, pero la placa le cortó la risa y la respiración antes de volver a mirarle. Se visualizó levantando las manos y diciéndole que no era ningún rarito a pesar de su apariencia, sólo para pedir clemencia y que el policía no lo llevase arrestado como dijo. Pero al escuchar que tenía que guardarle el secreto también, apretó sus labios unos segundos antes de asentir.
— Y ninguno de los dos queremos arruinarle la cita a un italiano ¿verdad? — retomó la broma, tratando de relajar un poco el ambiente entre ambos.
Se giró por unos segundos a ver a su amigo y, de nuevo, las cosas parecían ir más que bien, así que devolvió su atención a la cerveza que tenía en sus manos.
Liam volvió a hablar, centrándose en hacerle... ciertas preguntas que no le apetecía responder, no con sinceridad al menos.
— Gracias. La verdad es que ese es el único papel por el que la gente suele conocerme... — torció su sonrisa con algo de desagrado.
No era que estuviera enfadado con esa serie ni mucho menos, al contrario, se sentía muy agradecido por la oportunidad y todas las temporadas que tuvo la suerte de rodar junto a su compañero, pero... había aparecido en otras, aunque no como actor principal y... Bueno, el resentimiento de que su hermano tuviera papeles que han marcado toda su trayectoria y él sólo uno... seguía ahí.
— Chin-chin — brindó, chocando suavemente el cuello de la botella de la cerveza de Liam con la suya, antes de beber el último trago y pedir otra más con dos dedos de su mano al barman. — Digamos que estoy buscando otra clase de ambiente — si ambos eran ingleses, al menos le debía eso. — Estuve en Nueva York un tiempo y no me gustó la experiencia, siendo sincero — chasqueó la lengua antes de sonreír juntando sus labios en una línea. — Y como, esa serie medieval me funcionó tan bien, he pensado que tal vez aquí podría tener algo más de... suerte — se encogió de hombros. — Y tú ¿qué? ¿Cómo has acabado aquí? Las pruebas de lo tuyo fueron muy difíciles en nuestra tierra y tuviste que intentarlo en otro lado — quiso bromear de nuevo, alcanzando la nueva cerveza y bebiendo un trago más.
Mientras esperaba a que le respondiese, pensó, sintió curiosidad. ¿Estaría únicamente en ese bar para apoyar a su amigo moral y... físicamente hablando en caso de que lo necesitase? ¿O realmente compartía los gustos de ese... bar en concreto? Ahora que lo miraba bien le recordaba a su compañero de rodaje. Moreno, con la barba arreglada, aunque el otro sólo pudo dejársela así cuando no rodaban, sus ojos parecían claros también aunque con la escasa luz no era capaz de verlos bien y labios carnosos. La única, pequeñísima diferencia que encontraba era la diferencia en musculatura. Wyatt levantó del suelo, como broma, en varias ocasiones a su compañero de rodaje casi sin esfuerzo. En este caso, creyó que la situación sería al revés, pero siendo policía, era normal que tuviera que estar... preparado.
— Entonces... — quiso tantear, — ¿sólo has venido aquí a acompañar a tu amigo? — otra mirada, ésta descarada, a sus labios intentando que captase la indirecta.SPOILER (click to view)Nada! Okay, imagino que en... como mucho una semana haré que le llamen para las pruebas y así ya vamos moviendo un poco lo de la serie ^^
Gracias a ti por hacer el separador tan preshioso
Muy chuli ^^ y tranquila, que si me entero de alguna forma más para hacer las fichas más guays, tomo nota de que tengo que avisarte . -
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Sonrió al ver que Wyatt al principio se tomó como broma lo de su oficio, pero con la placa policial alejó cualquier duda. No sabía si ahora se sentía seguro a su lado o alterado, pero era inevitable, no quería mentir. No le gustaba, pero ni de loco revelaría que conocía a Elliot.
Allí tendría que usar toda su energía para no echarse de cabeza. Agradeció que Wyatt también fuese discreto y no dijera su secreto. Notó que Wyatt volvía a ver la mesa de Zachary y le agradecía que a parecer fuera menos obvio que él. Confiaría en que le dijera si algo raro estaba sucediendo.
Cuando vio su expresión torcida al hablar de ese papel, sintió un nudo en el estómago. Al inicio, cuando él y Elliot comenzaron su amistad en secundaria, vio las veces que su mejor amigo se inmiscuyó en los libretos para que las cosas le salieran bien, lo mucho que practicó para las audiciones; las personas atribuían todo a que tenía un «don» y posiblemente así era, pero también fue dedicado y sufrió en el proceso.
Pudo sentir un poco de dolor y frustración en sus palabras, ¿quería consolarlo? Sinceramente sí, pero no quería que Wyatt se lo tomara como lástima o condescendencia.
—Creo que estás haciendo un buen trabajo, si me dejas opinar. —agregó pidiendo una tercera cerveza. —Las personas que no estamos involucradas en el mundo del espectáculo a menudo no pensamos en lo complicado que lo tienen los actores. Es difícil memorizar un libreto, desgastante cambiar tu cuerpo o personalidad para concordar con un papel, verdaderamente es admirable cómo llevan eso sin romperse en pedazos y luego traen a la pantalla personajes inolvidables.
Era sincero, desde que Elliot era su amigo, valoraba más a las actrices y actores.
—Confía en tu habilidad, tienes una chispa que ya lograron ver, pronto harás grandes cosas en Nueva Zelanda. —declaró con positividad dándole otro trago a su cerveza.
Solo deseaba que supiera que todo su esfuerzo estaba dando frutos, tal vez no de la forma en la que anhelaba, pero vaya, ya no estaba en el mismo punto.
Asintió cuando le dijo que un cambio de aires es lo que lo llevó a esta Tierra exótica, sí, a él también lo había acogido esta ciudad para huir de un pasado horroroso. Se rió al escuchar que seguramente las pruebas de policía en Londres fueron muy difíciles.
—Lamento no darte la razón, pero busqué un traslado por mi cuenta. Me gradué como el mejor de mi grupo, siempre he sido el cerebrito y ahora también soy el músculos. —tonteó mostrando como hacía fuerza con su brazo. —Solo quería alejarme un poco de Londres y probar que tenía suerte en otro lado, la ciudad me ha gustado, trasmite una especie de paz que me relaja.
Al menos, podía alejar los pensamientos sobre Harvey.
Cuando volvió a llamarle para que se vieran a la cara, sintió que la sangre se le iba a la entrepierna, ¡oh mierda! ¿Eso era un coqueteo? Claramente le había visto la boca, ¿era del tipo de Wyatt Rees? Bueno, él era su tipo, era rubio, MUY GUAPO, con buen cuerpo y divertido.
Pero no, esto estaba mal.
Ya de por sí, Elliot lo mataría por acercarse a Wyatt, ¿y si se enteraba que se metió con él?
Le rebanaba la cabeza y la exponía como un trofeo en la sala de su lujosa casa.
No sabía cómo contestar, ¿y si solo eran alucinaciones suyas? La luz era inestable, sí, era una locura que Wyatt Rees le coqueteara. Dio un trago a su cerveza y sonrió ligeramente.
—Ese era el plan, no venía con otras intenciones… por el momento. —¿por qué agregó eso último? ¡Era un idiota que pensaba con la polla! Se distrajo al escuchar que cambiaban la música y sonrió al escuchar el tono latino que tenía esa canción.
Se levantó de la barra y miró a Wyatt con diversión.
—¿Quieres bailar? Ya empezaron a poner las canciones buenas. —tonteó mirando como en una esquina oscura podían hacerlo sin que les prestaran mucha atención. Vamos, no quería liarse con el hermanito de su mejor amigo, pero no era ciego, este hombre era guapísimo y si podía colar una que otra mano usando el baile como excusa, ¿por qué no?SPOILER (click to view)Perfecto, así también pongo a que Liam reciba las mismas llamadas para apoyar en el guión y al futuro actor que escojan para el papel, este arroz ya se coció lol.. -
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Pensó que Liam no indagaría mucho, le daría unas pequeñas palabras de apoyo como cortesía y nada más. Sin embargo, se vio sorprendido por sus palabras. Viniendo de un desconocido no deberían significar mucho, pero esas palabras se sintieron como la palmadita en el hombro que llevaba tiempo buscando y que nadie le daba nunca. Para ser alguien ajeno al mundillo... sonaba como si fuera una de esas personas que no se quedaban sólo con la fachada de algo, investigaban y profundizaban para averiguar lo que podría o no estar pasando y... a decir verdad, él tenía razón. A veces la carrera de actor era muy desgastante.
— Muchas gracias — respondió, verdaderamente agradecido, y casi sin atreverse a mirarlo mientras deslizaba el botellín de cerveza entre las palmas de sus manos.
Como quiso cambiar rápido de tema, le preguntó por él. Le había dicho que era inglés y ahora coincidía en que también era de la capital, de la cual quiso alejarse...
— Vaya, no me digas que eras ese molesto que siempre quedaba primero en la clase — se burló. — Yo todo lo contrario. Hacía rabiar a mis profesores por aburrimiento, pero nunca suspendí, aunque no saqué tan buenas notas como podría... — comentó y rio, un poco avergonzado de esa época, pero siempre recordándola con ternura.
Puede que sus profesores lo odiasen por lo poco que se parecía a Elliot, pero más los odiaba él cuando les comparaban.
— Espero encontrar también esa paz aquí... — admitió y asintió, dándole otro sorbo a su segunda cerveza.
Viendo que tenían ciertos puntos en común, decidió indagar un poco más... Quería saber hasta qué punto estaba en ese bar por su amigo o... por sí mismo.
— Oh... — la respuesta le sorprendió.
Entonces, sí que compartía los gustos de aquél lugar. Pensó que sería el típico policía hetero que rápidamente marcaría límites, pero... pensándolo bien, alguien así los habría marcado desde el primer momento que le habló. Tenía sentido...
— ¿Y hay alguna manera... — de cambiar esas intenciones?
No pudo completar la frase, Liam se había levantado y lo estaba invitando a bailar. Gracias a la oscuridad, Liam no pudo ver cómo Wyatt palideció, aún cuando se le quedó estancada una sonrisa a mitad de camino en sus labios. Él no solía bailar, a él le bailaban, y con esta música... iba a hacer el ridículo, seguro. En cualquier otro momento le habría dado igual, cuanto más ridículo hiciera mejor, más divertido, pero delante de alguien que le parecía bastante atractivo y que encima era policía... Le daban escalofríos sólo de pensar en quedar mal.
— Eh... No quieres verme bailar — aseguró, intentando convencerle con la mirada. — No, no... ¿no tienes a un amigo a quién vigilar? — trató de convencerle de que se quedara sentado a su lado. — Recuerda que ambos estamos de incógnito... — se levantó para poder susurrarle.
Pero ante la insistencia de Liam y que le volvió a mostrar el lugar dónde quería bailar, se vio... coaccionado. ¿Acaso eso no era ilegal? Debería denunciarlo...
— ¿Pero tú no eras de Londres? — caminó un poco detrás de él, recriminándole para convencerle antes de que llegasen a esa zona. — Los londinenses no bailamos — le recordó.
Ahora ya no tenía tan claro que ese hombre no le hubiese mentido. Su curiosidad le había vuelto a meter en apuros y eso no le gustaba para nada.
Cuando llegaron, Wyatt se quedó quieto, mirando a Liam con cara de pena porque no quería estar ahí. En otro momento y lugar, a solas, todo él quisiera, ahí no.SPOILER (click to view)Okay!!!
¿Wyatt es un palo para bailar? Wyatt lo es jajaja Y Liam lo ha puesto en problemas xDDD. -
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Los actores eran interesantes, realizaban un gran trabajo para modificar su personalidad acorde al papel que les asignaban, pero cuando volvían a ser ellos mismos, te encontrabas a alguien tímido, quizá extraño o muy vulnerable. Elliot siempre parecía serio y dedicado, pero era un alma sensible que hacía de todo para no romperse en el proceso.
Se alegraba de haber sido un gran pilar para reforzarlo.
Asintió cuando le dio las gracias. Creía que sus palabras le habían llegado y esperaba que esa aura de decepción se esfumara pronto. Él tenía mucho talento, pero entendía que estar bajo la sombra de una familia que siempre estuvo bajo la mira de reflectores, era algo pesado. Elliot era una súper estrella y había leído artículos donde los comparaban.
Era un asco, seguramente eso aumentó la rivalidad entre estos hermanos. Elliot le contó que no siempre fue así, se llevaron bien de jóvenes, pero ahora era como enfrentar a dos enormes osos que mendigaban el último trozo de carne.
Quiso bromear sobre ser el listillo de clase, pero solo se río y asintió. Sinceramente, varias veces su mejor amigo quiso darle con el libreto en la cabeza cuando recordaba que revisaran la tarea. Menos mal que nadie se metía con él porque sabían que practicaba boxeo.
—Oh, tú eres el payaso de la clase que nos hacía reír a todos. —bromeó. —Ciertamente, desde allí tenías un público a tus pies, Wyatt.
Un subidón de confianza con un comentario inocente, no estaba de más. Notó que Wyatt logró capear la indirecta, pero tenía que controlarse. Si fuera otro rubio más en la barra que no tenía conexión con Elliot, posiblemente ya le hubiera colado la mano en el trasero, pero este era su hermanito menor.
Joder, ¿por qué alguien tan jodidamente atractivo?
Elliot te odio a ti y tu familia con genes perfectos.
Sacudió esos pensamientos cachondos de su mente mientras guiaba a Wyatt a aquel rincón oscuro del bar. Le encantaba bailar todo tipo de música, vamos, hasta estaba de ridículo oyendo K-pop como si fuera adolescente, pero sus canciones favoritas eran las de ritmo latino, quizá porque esas eran las que ponía su mamá para trapear. Sonrió al ver la incomodidad de Wyatt, ¿sería un tronco para bailar? Al parecer esto era de familia. Solo debía dejar que su cuerpo fluyera con la música.
Le daba gracia como intentaba sacarle la vuelta a bailar, agregando lo del estereotipo de los londinenses. Se giró y lo encaró mientras lo jalaba de la mano para que se acercara más a él.
—Mi madre es mexicana, así que no escaparás de mí, lindo* —mencionó lo último en un español muy seductor. Su voz se agravaba más cuando hablaba ese idioma. Notaba su incomodidad y de verdad le pareció algo lindo.
No quería que sufriera.
—No te sientas incómodo, mira a tu alrededor. —le indicó con la mirada para que viera a las demás parejas. Todos estaban concentrados en sus citas o se movían al ritmo de la música sin importarles otras personas. —La única persona que te verá soy yo, ¿qué tiene de malo?
Acortó la distancia mientras acercaba una de sus manos al hombro de Wyatt y con la otra tomaba ligeramente su cintura.
—¿Puedo? —bueno, ¡vaya huevos! Le pedía permiso después de tocar. Todo un caballero Liam O’Brien. Tu madre te daría una tunda en la cabeza con esos modales. Comenzó a moverse junto a Wyatt quien estaba todo tieso.
Le parecía divertido, pero quería darle confianza.
—Relájate, de verdad solo te estoy viendo yo y estoy cegado por lo guapo que eres, no me importa si no bailas bien.
¡¿QUÉ DIJISTE IDIOTA?! Oh mierda, le estaba coqueteando al hermano menor de Elliot, ¡eran las cervezas! Sí, estaba estúpido por las cervezas. Bajó la mano del hombro de Wyatt hasta su mano y entrelazó sus dedos con los suyos para guiarlo mejor mientras se tambaleaban con el ritmo de la canción.
Liam le sonreía de vez en cuando para demostrarle que lo estaba haciendo bien.
La canción pasó y luego pusieron una lenta, ¿qué jugarreta del destino era esta? Todas sus alarmas se estaban encendiendo. Le gustaban sus ojos, verdaderamente era de un azul penetrante. Se pegaron más con ese baile y Liam no dejó de verle a la cara a pesar de que la iluminación fuera precaria.
Si se inclinaba solo un poco.
Solo un poco… podría besarlo.
No, ¡era el hermano de Elliot!
¡No pienses con tu pene, Liam O’Brien!
—C-Creo que está canción no es tan movida, la bailas bien. —sí, titubeó. Se estaba delatando un poco. Apretó ligeramente la cintura de Wyatt y sintió la garganta seca. Estaba jodido.SPOILER (click to view)Le agradecemos a Wyatt por ser un tronco, así tenemos una excusa para manosearlo con consentimiento (?
Me da risa que como mexicana tenemos el estereotipo de saber bailar... NO ES CIERTO. Solo Liam, acá una como el Wyatt siendo un puto poste.. -
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Rio divertido cuando lo llamó "el payaso de la clase".
— Pues claro, ya por ese entonces era de los populares... — continuó riendo divertido. — Aunque no para mis profesores — se rio travieso.
Poco después, y sin saber bien cómo, se vio arrastrado a una zona oscura de la pista para bailar con Liam... Una idea que no le agradaba en lo más mínimo, no por la compañía claro, eso sí le gustaba, era la parte de bailar la que no le atraía para nada.
Dejó que tirase de él y le miró atento cuando le dijo que su madre era mexicana, para luego fruncir su ceño confundido con la palabra que escuchó.
— ¿Lin... dou*? Nunca se me dio bien el español — respondió algo divertido y nervioso porque no sabía qué le había dicho, ni por qué le había puesto tanto esa voz repentinamente agravó.
Hizo lo que le pidió, miró a su alrededor para luego mirarle a él con aquella pregunta. ¿Que qué tenía de malo? Mucho... ¡TODO! ¿Cómo iba a usar toda su artillería pesada en materia de ligoteo si lo primero que hacía era ponerse en ridículo involuntariamente? ¿¡Qué parte de TODO no se entendía!? Literalmente era lo peor que podía pasarle en ese preciso momento.
Abrió sus brazos al ser sorprendido por cómo le agarró el otro tan atrevidamente para luego pedirle permiso. Wyatt se miró a sí mismo, mejor dicho, a las manos que lo agarraban, luego al propietario de esas manos para luego reír confundido.
— Ya lo has hecho — continuó riendo.
Notó que el otro se movía y trató de seguirle los pasos, pero eso no era tan sencillo como ponerse a bailar haciendo el ridículo mientras su compañero de escena y él esperaban a que les dieran el okay para empezar a grabar la toma. Era muy diferente. Y Wyatt... Wyatt no era de los que se dejaban guiar, él marcaba el paso. Así que trató de seguirle el ritmo de sus pasos, moviéndose más o menos al compás, pero sin saber por qué el otro meneaba tanto sus caderas, y sin poder dejar de mirar sus pies para evitar pisarle. Como le pisara entonces ya sí que lo único que podía pedir era que la tierra lo tragase...
— Ah... — sus siguientes palabras sólo lo mataron un poco más, aunque notar que entrelazaba sus dedos le hizo reaccionar y trató de bromear para recuperar algo de... ese ambiente. — Vaya, fíjate por dónde. El nerd de la clase va conseguir hacer sonrojar al popular — se burló antes de reír un poco.
Lo notó, pudo notar fácilmente la atracción y el cómo el otro parecía querer arrebatarle un beso ya, pero Wyatt tenía que decidirse. Al menos ese baile era más lento y esos sí los dominaba más, aunque solía estar en la parte que dirigía.
— Escucha Liam — llamó, golpeando su hombro con los dedos de la mano que tenía en esa trabajada zona. — No es por romperte la ilusión, y de verdad me pareces muy atractivo, tanto que no me importaría probarte esta noche en mi cama de hotel, pero... — siempre había un pero. — Soy de esos que prefieren... atacar — le explicó. — Entiendes ahora el por qué de mi incomodidad — le guiñó un ojo con una sonrisa. — Y, aunque no me importa hacer excepciones en ciertos juegos de cama... — bajó la mano del hombro contrario y paseó sus dedos de manera juguetona por su costado. — En esto de bailar soy un pato cuando tengo que seguir el ritmo de otro — se echó a reír. — Aunque si te sientes más cómodo — se acercó a su oreja para susurrarle, — siempre puedo improvisar el papel de algún jovenzuelo que se esté derritiendo por estos fuertes músculos — la mano en su costado bajó todavía más para agarrar firmemente el trasero del policía, — y que esté deseando que lo invites a pasar la noche contigo... — sugirió, seductor, en su oído. — Es una oferta que no le hago a cualquiera — se había separado para mirarlo, aunque había guardado la distancia más que justa, para que sus labios no chocasen.
Bastaría un pequeño movimiento por parte del otro para que se apropiara de ellos.SPOILER (click to view)Jajjajaja En España se dice que eres un palo jajaj pero sí, Wyatt es eso, más aún cuando le guían en el baile, es como, ¿perdón? ¿Qué tú guías qué? xDDD Y Wyatt no se dejaría tocar por cualquiera, admitamos que aunque tu policía esté fuertote, mi niño también va al gimnasio para algo jajaja
Aquí también!!! Yo también soy un poste, de hecho una profesora mía de gimansia, nos daba un trimestre baile y nos dijo que entendía que había gente a la que se le daba bien el deporte en general y mal el baile y viceversa... Lo dijo mirándome a mí, y yo en plan... Well, no puedo decir que no sea así jajajajajaj. -
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Se rió ligeramente cuando escuchó la pronunciación de Wyatt con aquella palabra en español. Bueno, al menos podía decir tonterías en aquel idioma y el menor de los Rees no lo entendería. Podría juguetear con ello como con Elliot en secundaria y preparatoria hasta que aprendió palabras, sobre todo insultos.
Sonrió de lado al ver a Wyatt algo nervioso, al menos eso deducía al verlo reír ante la situación. Menos mal no lo empujó cuando tocó su cintura y comenzaron a bailar. Se notaba que se le complicaba un poco, pero se dejaba guiar con algo de dureza, ¿prefería ser de los que marcaban el paso…?
Sí, se lo preguntó tanto en el baile como en el sexo, pero sus dudas fueron aclaradas a los pocos minutos. Notaba que Wyatt se tomaba muy en serio lo de no pisarlo y seguirle el ritmo, ¿todos los actores se tomaban tan seriamente las cosas? Debían aprender a relajarse.
—Entonces este nerd es muy habilidoso. —se halagó a sí mismo cuando escuchó su comentario tonteando sobre el popular y el nerd. Al menos nadie lo trató en sus años de adolescente como el tipico inteligente que está metido en los libros, fue un gran atleta también, así que sus años de acoso nunca existieron milagrosamente.
En aquel baile lento, se pusieron las cartas sobre la mesa ante el asunto que claramente estaba surgiendo entre ellos y que Liam no podía evitar por más que titubeara. Desvió sus ojos a aquella mano que le daba un ligero golpecito en su hombro. Wyatt estaba aclarando sus intenciones, y sí, Liam ya no podía hacerte el tonto.
Había visto a traves de él.
Ladeó la cabeza cuando escuchó el por qué de su incomodidad aclarandole que prefería el papel de activo en la relación. Liam sonrió mostrando su perfecta dentadura. Vaya, era bueno saberlo. A Liam le daba igual lo de los roles sexuales, había estado en ambas posiciones, aunque la gente siempre deducía por la complexión de su cuerpo que prefería ser el de arriba.
El placer era el placer, no importaba donde estuviera puesto, pero Wyatt no se andaba por las ramas, y eso le gustaba. Harvey y él duraron mucho en ese coqueteo de tira y afloja antes de que diera el primer paso en una fiesta a la que lo invitó Elliot.
Sintió como aquella mano pasaba de su hombro hasta el costado de su cuerpo. Tenía que concentrarse en lo importante y no dejarse guiar por sus instintos, ¡este era el hermano menor de Elliot! Si su amigo se enteraba, lo iba a colgar de los testículos.
No podía.
No podía.
No podía-
Cuando se pegó más a él y comenzó a susurrarle al oído, todos sus pensamientos se esfumaron como humo. A la mierda, sí pensaba con el pene ¿y qué? Tenía meses que solo tenía acción en su cabeza y su mano era su unica amiga, podía esconderle un secreto o dos a Elliot.
Ojos que no ven, corazón que no siente.
Sintió como aquella mano ajena se movía y apretaba fuertemente su trasero. Sonrió divertido, volviendo a ladear su cabeza mientras le miraba coquetamente.
—Wow, ya pasaste a segunda base y ni me invitaste una cerveza, sí que te aprovechas de lo guapo que eres. —tonteó, pero claramente no estaba enojado u ofendido. Terminó de escuchar la propuesta de Wyatt y sus ojos se oscurecieron.
Si su mente pudiera blanquearse por un momento y solo actuar por lo que deseaba.
¡A la mierda, Elliot!
Aprovechó que Wyatt estaba a pocos centímetros de él y se abalanzó contra él para sujetar su cuello y besarlo pasionalmente. Sus estaturas eran similares, así que no tenían que batallar en que sus bocas se unieran. Estaban en un rincón oscuro, así que no tenían que temer que los demás les prestasen atención. Hace mucho que no besaba a otra persona, así que sentir la frescura de otra boca y saborear su saliva con rastros de cerveza, era un deleite.
La fricción de sus labios y la sensación de chupar sus labios o de sentir lo mismo. Podía sentir el calor de su cuerpo aumentando y rapidamente bajó su mano para afianzar el tacto de Wyatt sobre su culo, indicandole que no le importaba que le tocara allí.
Se separó para tomar algo de aire y sonrió divertido para luego volver a besarlo. Maldita sea, tanto tiempo de contenerse y todo se fue a la puta basura por esos ojos hermosos que tenía Wyatt Rees. Gracias Zachary por tener una puta cita hoy.SPOILER (click to view)JAJAJAJA me alegra que seamos dos palos/troncos para bailar, así me paso con la clase de baile de secundaria, el profe casi asi de que: bueno, menos mal que tienes otras habildiades jajajaja
Yo ahorita con esta escena es de:
Estaba pensando en que si estos se metan mano y la cosa termine con el chakachaka o si los interrumpe Zachary JAJAJAJA porque su cita se fue al carajo y me los deja con las ganas y a medio... merequetengue, así que te pregunto:
jajajajaja no sé, pero si ocupo de tu decision uvu. -
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— Me gusta ir directo al grano y ser popular tiene sus ventajas... — respondió, de manera sugerente, cuando le dijo que ya había pasado a segunda base sin invitarle a una cerveza ni nada. — Aunque lo de la cerveza tiene fácil arreglo — pensó en las que habían dejado sobre la barra y se dijo a sí mismo que ya no bebería de esa, por si acaso.
Le sorprendió la rapidez con la que se abalanzó sobre sus labios, parecía que hasta ese momento había estado dudando y ahora había decidido ir con todo, pues él tampoco se contendría. Buscó con hambre la lengua contraria y jadeó de placer con ese intenso y húmedo baile tan íntimo.
Joder, era atractivo, tenía cuerpazo y encima besaba bien. Como se propusiera ser actor tendría aún más difíciles las cosas.
Él también se agarró a Liam, aunque en lugar de su cuerpo a su cabeza, para que ni se le ocurriese separarse por un instante. Aunque notar que le ayudaba a apretar todavía más su glúteo le hizo sonreír y mordió los labios contrarios como respuesta, imaginándose que en su lugar estaba mordiendo esa nalga bien trabajada.
Suspiró y abrió los ojos cuando Liam se separó y correspondió su sonrisa con otra, antes de dejarse besar de nuevo. En eso no le importaba dejar el control a su pareja, le resultaba hasta excitante aprender cómo los demás besaban, nuevos trucos que añadir a su arsenal.
Pero la unión de sus lenguas no fue suficiente, y buscó pegar sus cuerpos aún más. La mano de su trasero subió para recorrer una a una las costillas de su dorsal, como si con esa acción pudiera quitarle la camiseta ahí mismo, y chocó sin complejos su entrepierna con la contraria. Aprovechando el movimiento del baile sólo para que sus miembros se frotasen entre sí.
Se separó de sus labios y agarró sus cabellos para que se quedase quieto, empezando así a recorrer su marcada mandíbula y su cuello con besos y mordiscos, hasta llegar a la nuez de adán, que atrapó entre sus dientes. Si sólo pudiese continuar más abajo...
Joder... Realmente necesitaba una noche así. Tenía bastante aguante, pero hasta él admitiría en voz baja que llevaba demasiado tiempo sin un buen polvo que le ayudase a olvidar sus problemas.SPOILER (click to view)Jajajaja me siento tan identificada jajajaj Joer, nos dijeron casi lo mismo, vaya tela xDD
Sip, coincido, la escena está bien ardiente, pero cuando te he leído esta mañana me he quedado con la duda y ahora que puedo responderte y que he visto que el rol va por aquí, me he decidido.
Al principio pensé, deja que se diviertan, ambos llevan mucho conteniéndose... Pero es que me parece tan gracioso que Zachary se meta y los interrumpa en plan "si yo no follo, aquí no folla nadie" jajajajaja Me mataría jajaja
Así que, por mí haz que el encantador Zachary los interrumpa e intente darles pena porque se ha quedado sin cita jajajajaj. -
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Era tan satisfactorio saber que no le era indiferente a Wyatt Rees. Liam confiaba en su propio sex appeal, pero a veces las celebridades tenían el estereotipo de ser más selectivos con sus acostones o la elección de su pareja.
Su beso fue aceptado con facilidad y correspondido al instante. Notó que como respuesta a que le indicara que podía tocarle el trasero tanto como quisiera, sus labios fueron mordidos, logrando que sintiera esa especie de descarga que solo se producía en este tipo de situaciones a lo largo de su espina dorsal.
Wyatt buscó la forma de pegar más sus cuerpos y sentirse mutuamente. De verdad que este tipo de baile intimo era lo que Liam estaba buscando por bastante tiempo. Sintió cómo sus ingles se frotaban y soltó un sonido de gusto que se ahogó entre sus bocas. Quería sacarse el jodido suéter y que se sintieran piel contra piel.
Comenzaba a experimentar el calor de la situación.
Cuando Wyatt lo tomó del cabello, soltó un ligero sonido de satisfacción ante su rudeza. Vaya, los jóvenes de ahora eran mucho más agresivos. Sintió los mordiscos y aquellos besos en su mandíbula sin dejar de sonreír y sentir que se estaba calentando mucho.
La sensación de que su manzana de Adán fuese mordida le estremeció, enviando escalofríos por toda su espalda. Mierda, solo quería sacarse todo allí y que lo tocara más y más. Meses sin experimentar el toque de una tercera persona. Sí, lo admitía, tantas veces que estuvo haciendose el santo, evitando tener polvos de una noche, y mírenlo, allí mismo, deseando que Wyatt Rees lo llevara a un hotel para sacarse las frustraciones mutuamente.
¡Excelente hipocresía Liam O’Brien Sánchez! ¡Eres un doble cara!
Sus manos se pasearon por la espalda del guapísimo actor, delineando su cuerpo bien trabajado. Seguro que sería grandioso arañar aquella espalda mientras se sostenía con fuera de él. Deseaba hacer tantas cosas y con ello su mente iba a mil revoluciones por minuto.
—Me vas a volver loco…—admitió y nuevamente quiso besarlo con fuerza. Estaba a nada de decirle que dejaran a Zachary con su cita, ya no creía que fuera necesario cuidarle porque todo marchaba bien, así podrían ir a un buen hotel a tener un encuentro mucho más cercano, pero al parecer, su suerte no era tan buena.
—¡LIAM! —separó sus labios de Wyatt al oír esa voz chillona de un Zachary avergonzado, enojado y triste. Sí, le gustaría decir que no conocía ese tono, pero ya estaba acostumbrado a oírlo. Zachary era la reina del drama y hacía berrinches regularmente.
Menos mal Wyatt estaba dándole la espalda, así que Zachary no lo vería directamente; no obstante, movió una de sus manos y bajó ligeramente la capucha de su sudadera negra. Le guiñó el ojo en complicidad. Le prometió que no revelaría su nombre ni profesión, y un policía, estaba para cumplir con ello.
—¿Qué pasó, Zach? —le apodó e intentó no soltar un tono de reproche. Sabía que, si Zachary lo buscó e interrumpió en medio de algo, era porque estaba hecho pedazos.
—¡ESE MALDITO ITALIANO ME ESTABA USANDO PARA DARLE CELOS A SU EX NOVIO! ¡NO SABES LA VERGÜENZA QUE ACABO DE PASAR CUANDO ESE RUBIO DE PACOTILLA FUE A PRESENTARSE Y SE LO LLEVÓ DE ALLÍ! ¡PERO SABES ¿QUÉ FUE LO PEOR?!
Oh por Dios, de verdad Zachary tenía un imán para atraer patanes.
—¡LA CARA DE FELICIDAD DE ESE IMBÉCIL CUANDO ESE RUBIO SE LO LLEVÓ A RASTRAS DEL BAR! ¡DIOS MÍO, DEBO SER EL IDIOTA DE HOY! ¡ESTOY TAN ENOJADO Y TRISTE, ME QUIERO IR!
Zachary sentía que las lágrimas se acumulaban en sus ojos, pero no quería llorar y verse más patético frente a todos en ese lugar. Cuando llegara al departamento de Liam se echaría a llorar hasta vaciar sus pulmones. Vio al acompañante de su amigo y se sintió (ligeramente, muy ligeramente) mal de arruinarle su aventura después de meses de no querer intentarlo con nadie.
Pero si él no tenía acción esta noche, Liam tampoco.
—Lo siento, chico misterioso. Me llevo a mi amigo, luego sigan lo suyo. —le mencionó a Wyatt mientras se daba la vuelta. —Te espero en el auto.
—Sí. —Liam soltó un gran suspiro decepcionado, pero los amigos iban primero que un acostón. Sabía lo estúpido que era Zachary cuando le rompían el corazón y temía que saliera en primera plana en el periódico al terminar estampado contra una pared o algo.
Soltó la capucha de Wyatt y lo miró con una mueca algo decepcionada, pero después le sonrió dulcemente.
—Es una pena, me arruinaron la noche, pero fue divertido mientras duró. —dijo sinceramente mientras se despegaba un poco de él. —Espero disfrutes de la ciudad, Wyatt. Tiene muchas cosas para ofrecer y siento que podrás hallar lo que tanto buscas. Cuando hagas una nueva serie o película, iré a que me firmes un autógrafo, superestrella.
Le guiñó el ojo. Sí, era su forma de decirle que si se volvían a encontrar, esta vez iría hasta el final con él.SPOILER (click to view)Perfecto, les arruinamos el polvo, pero al menos se dieron una probadita. Zachary la verdadera reina del drama en esta situación, siento que cuando Liam y Wyatt al fin tengan su momento a solas, se van a dar una revolcada de las buenas JAJAJA. -
+1 .
— Sí, ese es el plan... — sonrió satisfecho cuando le dijo que lo volvería loco, jugando a rozar su nariz con la contraria antes de volver a ser besado con esa intensidad.
Un grito detrás de él lo asustó e hizo que se separase al mismo tiempo que el nombrado. Apoyó el lateral de su puño contra sus labios, como si de repente sintiese vergüenza de lo que acababa de hacer y haber sido pillado. Luego recordó que se trataba de su amigo, al que vigilaba antes y se tranquilizó, un poco.
Le jodía que le hubiesen cortado el rollo a mitad, pero se quitó de encima esa sensación cuando notó la mano de Liam en su capucha, alzando la mirada rápidamente y advirtiéndole con ésta que no se atreviese, no sintiéndose del todo tranquilo aunque el otro le guiñase el ojo.
Wyatt se quedó quieto mientras Liam preguntaba a su amigo y se enteró de todo el cotilleo. Una sonrisa traviesa se dibujó en sus labios, no porque no le supuiese mal por su amigo, si no porque trataba de aguantar la risa que le provocaba el cómo lo estaba contando y cómo algunos estaban tan desesperados para darles celos a sus exs...
Miró a Liam y negó levemente, queriendo hacerle saber que no se reía de su amigo, ni de su situación.
Sin embargo, su boca se entreabrió cuando el tal "Zach" le dijo que se llevaba a su amigo. Le entraron ganas de girarse y preguntarle si es que no se imaginaba lo que estaba pasando como para, no sólo interrumpirles, si no cortarles de cuajo toda diversión.
— Espera, ¿vas a hacerle caso? — se rascó la cabeza. — Entiendo que es tu amigo, pero... — cerró la boca cuando Liam le dijo que esperaba que disfrutase de la ciudad y que le pediría un autógrafó cuando hiciera una nueva serie o peli. — Al menos dame tu teléfono — pidió y se quedó ahí esperando.
No sabiendo si el otro le había oído o no y, en caso de que sí, si se daría la vuelta para dárselo o simplemente lo ignoraría y se le jodería el plan por completo...SPOILER (click to view)Jajaja Polvo arruinado xDD Sé que no he avanzado nada, pero como no sé cómo reaccionará Liam a la petición del teléfono o no, pues... He preferido dejarlo ahí.
Me ha matado el motivo que le has dado a Zach, que el otro estaba poniendo celoso a su ex, me parto jajajajja Buenísimo, me he reído mucho xDD. -
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Que bochornoso para Zachary toda la situación que sucedió. No podía dejarlo solo y más porque el auto en el que fueron era el suyo, por si Zach se iba con su cita, él podía regresarse a casa sin inconvenientes, pero ahora sus planes de tener un buen acostón, se jodían por este mismo hecho.
Bueno, quizá debería agradecerle a su drama King, después de todo, estuvo a nada de dejarse coger por el hermanito de Elliot. Notó que Wyatt sonreía conteniéndose la risa, en realidad no se sentía ofendido, la situación era graciosa, si no se reía él también, era por el simple hecho de que Zachary terminaría llorando del bochorno.
Ante todo, protegía sus sentimientos.
Estaba dispuesto a marcharse detrás de Zachary, pero alcanzó a oír cómo Wyatt lo detenía para pedirle su celular ya que su amigo les había jodido el plan. Mordió su labio inferior dubitativo, si fuera cualquier otro chico, se lo daría sin dudarlo, pero era un Rees.
Si se seguían viendo… tendría que mentirle.
Abrió la boca, dispuesto a decir una gran mentira, pero entonces vio sus enormes ojos azules y sintió cómo su corazón daba un respingo, ¡maldito chico guapo! Bueno, con tal de estar en su cama podía decir una mentirilla o dos, total, dudaba que Elliot fuera pronto a Nueva Zelanda.
—Claro. —se giró y estiró la mano para que le entregara su celular. Comenzó a teclear el número y se guardó a sí mismo como «Poli privado⭐» y se lo devolvió. —No olvides marcarme para darte cuenta que no te di un número falso, superestrella.
Tonteó y cuando le entregó el celular se acercó a robarle un rápido beso en la boca mientras por el impulso iban a chocar contra la pared detrás suya. Era una pena tener que cortar esto, se despegó y le sonrió coquetamente.
—Nos vemos, Wyatt. —se despidió y dio la vuelta para salir del bar. Tendría que lidiar con un pelirrojo echando llamas por la boca, pero al menos este encuentro con Wyatt Rees le había hecho olvidar su desgracia con el modelo Harvey Smith.
Hoy había logrado un paso más en la escalera para superar a su ex.SPOILER (click to view)No te apures, gracias por dejarlo allí, al menos ya se tienen agregados♥ y me alegra que te diera risa lo de la idea para cortarles el rollo JAJAJAAJ el Liam se va a aguantar un dramon mas de rato.. -
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Menos mal que Liam accedió a apuntarle su número. Le extendió su teléfono y sonrió al tenerlo de vuelta y ver cómo se había guardado en su listado, y más después de recibir aquél fugaz beso.
— A sus órdenes capitán — sonrió travieso antes de verlo marchar. — Adiós Liam — se despidió también.
Tan pronto como vio que la puerta se cerró tras ellos, exhaló algo molesto. Rascó su cabeza no creyéndose cómo le habían interrumpido la diversión de esa noche y se limitó a maldecir internamente al amigo de Liam, ese tal Zach.
De verdad que, de haberlo sabido, él mismo se habría puesto a buscar alguien que fuera una pareja para el otro chico y que así los dejasen en paz por esa noche. Pero no... Con razón habían criticado al italiano, ahora pensaba que se lo merecía.
Bueno, pues ya está, tampoco era que pudiera hacer mucho más en ese bar. Le habría gustado probar un poco más de la vida nocturna en Nueva Zelanda, pero no era como si alguien más fuera a prestarle atención, no con sus pintas, y mucho menos después de haberle visto morrearse con el otro tío. Meh... se iría al hotel.
Además, conforme caminaba, se le estaba ocurriendo una travesura que quería poner en práctica...
Estuvo a punto de pedir un taxi, porque le habría gustado llegar cuanto antes al hotel para realizar esa travesura, pero... ¿y luego qué? ¿Se iría a dormir sin más? Algo le decía que esa noche le iba a costar conciliar el sueño si no se... aliviaba un poco antes.
Caminó sintiendo el aire fresco chocar contra su rostro y, para cuando llegó al hotel, subió directamente a su habitación. Una parte de él le dijo que podría tomar un trago más en el bar del mismo, pero no quería despertar al día siguiente con una especie de resaca ligera. Aún tenía muchas cosas que solucionar allí, como por ejemplo, buscar un alquiler decente.
Cerró la puerta de entrada a su habitación detrás de él y entró primero al baño. Encendió las luces y se miró en el espejo, pensando si finalmente llevaría a cabo ese juego o no. Era actor, podría buscarlo y encontrarlo casi como dios lo trajo al mundo, de hecho recordaba una escena en la que tuvo que quedarse así en la serie medieval que de hecho Liam parecía haber visto.
Bueno, no estaría mal darle un recordatorio.
Desabrochó su pantalón y los bajó un poco, queriendo que se pudiera ver hasta casi el comienzo de su entrepierna, y se subió la sudadera junto a la camiseta de tirantes que llevaba debajo. Se apuntó con la cámara al espejo y ocultó con su móvil y la capucha de su sudadera su rostro. Se fijó que en la foto se viera bien todos los músculos de su pecho expuesto, incluidos sus pezones, hasta el comienzo de su entrepierna, tapada por sus bóxer de color negro y que no se veían del todo porque no se había quitado el pantalón.
Hizo la foto y la revisó antes de mandarla.
Buscó su teléfono, «Poli privado⭐» y lo abrió en la aplicación de mensajería instantánea.
Es una pena que no te hayas perdido esto... envió bajo la imagen y escribió otro mensaje. En fin, supongo que otro día tendrás que llevarme esposado para asegurarte de que no nos separen y podamos pasarlo bien... junto a este mensaje, adjuntó un emoji que guiñaba el ojo y sacaba su lengua.
Ojalá lo hiciera reaccionar o, tal vez, responder... Si le respondía con una foto íntima suya no dudaría en usarla esa noche. Aunque quién sabe, quizás podrían caldear el ambiente de nuevo a través de mensajes... ¿Hasta dónde se atrevería el policía?SPOILER (click to view)Bueno, Wyatt no ha podido quedarse quietecito, es un rebelde sin causa, así que ha tenido que hacer algo... Imagino que algo no muy bueno para Liam, pero ya que le han jodido sin un buen polvo pues... jajajaja.
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