Posts written by Misuki Beyond

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    (Pov Meito)

    Ah pasado tanto tiempo desde que sentía una sensación así, el poder sentir sobre mi piel el calor de alguien. Tus lagrimas salinas son mi tesoro, ahora que agonizas en el suelo debajo mío, creo escuchar tus remordimientos con débil voz, te tomo de los brazos y te atraigo a mi para besarte con brutalidad.

    -Mi dulce Akaito – acaricie tu espalda con mis manos cuando te lo dije al oído.

    -P-Púdrete imbécil – dijo escupiéndome directo al rostro ¿Seguirás luchando?

    Eran tan semejantes uno del otro, pero sus miradas y sus cuerpos no se parecían. Eras mejor que ella, eres mas joven que esa nefasta mujer. Tantos años de mi vida se llevo consigo al denunciarme y atestiguar en mi contra en el juicio que duro seis días. Fueron esos malditos días donde estaba pudriéndome en una mugrosa celda esperando a mi condena, si no hubiera sido por el bastardo de Ted habría acabado con la vida de Kaiko esa misma noche, ya que mi objetivo era tomarla como mía para luego asesinarla, me iba asegurar que no fuera de nadie mas. Pero deje de lado esa cuna que ella protegió, como suplicaba que la dejara. Ambos suplicaban de la misma manera.

    Mueran, no te iras de aquí tu madre me hirió pero tu eres mi consuelo.El cuarto va a caer y mi alma va a correr, tratas de desenterrar la idea de verme mal, el odio que siento hace que te hiera pero estas manos no pueden estrujar tu cuello. Miénteme que te dejas, no se que me pasa al oírte llorar por que te dejara cuando volvía a penetrarte sin importarme tu condición, estas tan pegajoso por todo el semen que deje dentro tuyo, una vez dentro y otra afuera. Te habías aflojado un poco, pero tus gritos ahogados resonaban cada vez más fuerte pero esta vez por el placer que escondes.

    El sudor de tu frente, succiono uno de tus pezones mientras mueve mi cuerpo embistiéndote con mayor fuerza que antes, dejando que tu sangre sea el ideal lubricante para esto. Ese chiquillo nos miraba sonrojado hasta las orejas, le sonrió complacido al ver como frente a sus ojos le enseño como tratar a las personas, es lindo no lo niego es obvio que lleva mi sangre, con tan solo 6 años mato a un niñato… yo a esa edad solo mataba sapos. Cuando lo vi pensé que no me importaría tirármelo, pero no puedo ya que es mi sangre, pero este otro niñato no tiene nada que ver conmigo.

    Nuestra única conexión es esta que hacemos en este acto infernal que consumía mi cuerpo, por esta guardada pasión que salía con desenfreno, desquitándome con este niño destrozándolo por completo. Llegando hasta fondo en el. Cuando termine de correrme por quinta vez esa noche, me había agotado y tome de los cabellos a ese niño que sollozaba apenas en el suelo, lo cargue a la fuerza y lo lleve a su habitación a ambos, y lo tire a la cama para traer a mi lado a mi hijo ¿Hijo que raro suena verdad? Me recosté a su lado dejando que me abrasara sin miedo, luego de ver lo que era capaz no me teme, no es como su madre.
    En cambio no puedo decir maravillas de el de cabellos rojos, lo único que hice por el fue cubrirlo con una sabana, temblaba de miedo. Ya que ni siquiera quería voltear a donde estábamos, dormí en una cama decente. Que cálida se siente, sonrió de burla al ver que hare mañana con el niñato peli rojo.

    -Papá descansa con bien – dijo Kaito, así se llamaba el según me dijo una vez. Su nombre era tan familiar al de su madre. Pero las personalidades no se comparan en lo absoluto.

    Luego de tanto tiempo puedo dormir con tranquilidad, y la música para dormir fueron los sollozos del niño de la cama vecina, cerré los ojos y dormí pensando en que le pasara.

    Desperté alrededor de las nueve de la mañana para ver que aun ver que seguía el niñito abrasado a mi cadera, le acaricie su cabello para alejar sus manos de mi, volteo la mirada y veo que el otro niño no estaba en su cama.

    -Demonios – chasqueo mi lengua para levantarme e ir en su búsqueda.

    Reconocía algunos sectores de la casa pero otros eran desconocidos para mi, fue cuando escuche ruidos en la parte de debajo de la casa. Si quiere vivir que se esconda ya que no tendré compasión, no tengo paciencia con los niños desobedientes, estaba oscuro como creí que seria… la cocina al parecer quiso cortar sus ataduras pero no lo consiguió lo veo porque los cuchillos están todos en el suelo.

    -Que tonto es – digo algo divertido.


    Continuara...
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    Bello... ojala tenga continuacion
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    H-E-R-M-O-S-O
    No se que mas decir
    estupendo fic lemonoso tan asklahdkashf
    Genial

    ¿Nombres?
    Mmm... para los chicos Takashi y Takumi
    Y para la niñita Natsuki
    Extra....
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    -¡Piko maldito! ¡Nunca me escuchas nunca te lo dejare a ti! – grito sin sentido, no iba a permitir que ese sujeto me robara a Kaito, su amor era mío. Nadie más podía tenerlo.

    Rei me abrasaba hasta quedarse dormido otra vez, o al menos creo en ello. No comprenderé con que descaro viene y me arma una escena de celos, Kaito ¿Por qué eres un idiota? Sabes eso es tu defecto, nunca me separe de tu lado en este tiempo pero que haces tu, engañarme con ese sujeto el cual cada vez que veo sus ridículos ojos me dan gana de eliminarlo de nuestro hogar, apretó mis manos una con la otra para no hablar estas verdades que siento que fluyen de mi interior.

    Tenía ira, rabia, rencor y desespero al no poder estar junto a ti, con este brazo roto no podría abrasarte con libertad. Solo quisiera que fueras tu quien estuviera abrasado a mi cuerpo, que me dejara escuchar su respiración cerca de mi, pero ¿Qué viva llevare a tu lado? Preguntándome estaba mirando el techo creyendo que la respuesta llegaría, pero no viene.

    Veo por la venta y escucho el cantar de las aves.

    -Rin… ¿Dónde estas? – la recordé desde ya tiempo que no se nada de ella, si eta bien quisiera que me llamara aunque sea pero nada, es como si la tierra se la hubiera tragado.

    Este hospital, era al que solía venir mi hermana cuando tenía esos fuertes dolores de cabeza, con pesar me logro poner de pie y salir de la habitación, quería ver si por casualidades del destino podría encontrarla, necesitaba su consejo. “Len, si tienes algún problema puedes contármelo ya veras que juntos lo resolveremos…” esas fueron sus palabras, las ultimas que me dijo antes de dejarme en esa estación, ella habrá vuelto de ese viaje que tenia que realizar.

    En estos pasillos solo había personas de batas blancas según logrre descifrar sus siluetas, una de ellas me ve raro para irse. Pero una anciana que se transportaba en una silla de ruedas ¿Se espanto conmigo? Cuando me vio grito del susto, debe haberme confundido.

    -¡E-Es ella la muerta… ah vuelto para llevarme a la tumba! – esa persona me señalaba y otros mi vieron atentamente, una enfermera por lo alterara que parecía la mujer mayor se la llevo de donde estaba yo, pero esa mujer no dejaba de verme con miedo.

    -Pero que clases de locos hay en este lugar- dije algo molesto por esa forma de exponerme frente a los demás, me fui en busca de la recepción donde quizás podría haber algún dato sobre el paradero de mi hermana.

    Cuando llegue una mujer de aspecto como amigable me recibió y me ordeno que me sentara, le dije todos los datos que conocía de mi hermana, y solo me quedo esperar. Paso alrededor de media hora durante esa mujer tecleaba no se que cosas en el teclado de su computador.

    -¿Me dije Rin Kagamine cierto? – me pregunto viendo directo.

    -S-Si – me puse nervioso cuando junto sus manos entrelazando consigo los dedos, para suspirar.

    -Mira niño, tu hermana estuvo internada aquí hace ya un mes… pero según datos que recibí del ultimo lugar donde estuvo me enviaron su acta de fallecimiento. Al parecer tu hermana tenia un tumor maligno alojado en el cerebro inoperable lo cual le provoco le provocaba problemas frecuentes como tú me mencionabas y murió por ello. Para tu mala suerte pequeño no se en que pueda ayudarte ahora, según tus datos no tienes parientes, ni padres ni familia, tu tutor legal es Kaito Shion, al morir tu hermana es la única persona que acepto cuidarte y alojarte en su casa según veo - dijo amargamente para darme en las manos un pañuelo- No es bueno guardar la lagrimas pequeño, desahógate- dijo ella.

    -M-Mi… h.herma…na ¿murio? – las palabras se trababan en mi garganta, tenia una especie de nudo que me impedía hablar, mi cuerpo se paralizo de repente, mis ojos dejaron de ver las luces y todo se volvió oscuridad.

    Cuando despierte, todo habrá sido solo un mal sueño. Pero no importa cuantas noches pasaron luego de eso. Estaba ahora en la casa, dicen que me desmalle en ese lugar y que Kaito me cargo en sus brazos en busca de alguien, pero no logro recordar eso. No quiero recordar las mentiras que habrá dicho esa mujer, mi hermana no murió..ella no puede estar muerta.

    -¡Son mentiras! ¡ella esta viva! – grite sujetándome la cabeza negándome a aceptar eso que dijo.

    -Len - entro a la habitación viéndome con miedo, Kaito quiso abrasare pero yo se lo impedí- ¿Por qué me alejas? – pregunto asombrado.

    -Quiero que me digas donde se encuentra mi hermana ahora – le reclame molesto, es el único que puede decirme la verdad.

    -Tu ya sabes lo que ocurrió, ella te dejo conmigo para que yo cuidara de ti – dijo para tomar mi manos, no importa cuanto forcejee no me soltó- Pero escucha tu hermana te quería no te abandono, ella deseaba que no supieras nunca de esa enfermedad que la abatía día a día – tomando el lazo de mi cabello tirándolo solamente logro soltarlo, dejando que las hebras de mi cabello cubrieran parte de mi rostro, ocultando consigo mi llanto.

    -P-Pero ella dijo que estaría conmigo siempre – dije sintiendo como mi corazón se contraía, mi visión se nublaba aun mas con mis lagrimas. Quisiera ver bien tu rostro al decirme esto.

    -Yo seré tu familia partir de ahora Len - al decirme eso me abrasaste, no me contuve y dejó que mis lagrimas ahogadas surgieran, contener mas este dolor podría hacerme mas, deje que tus ropas se humedecieran por mis salinas lagrimas.

    Luego de saber esto, no puedo conciliar el sueño, me aferro a tu espalda mientras tu duermes con uno de mis brazos, ese tipo no vino esta noche lo cual me alegra. Ahora solo te tengo a ti, no tengo nada más en esta vida aparte de ti Kaito, y no pienso permitir que nadie me aleje de tu lado. Te amo y deseo con desenfreno cada día más, mis piernas temblaban mientras tu respirabas lentamente, dejándome estar a tu lado esta noche donde la luna nos iluminaba, aun con esta venda en mi ojos imagino tu rostro en mi mente. Todavía siento tu aliento en mis oídos, la luna brilla a través de los cristales, despiertas y nuestros ojos se miran fijamente. Por favor, que el tiempo se detenga ya que tú me haz intoxicado.

    -No puedes dormir – dices algo cansado

    -Kaito si me abrasaras podría dormir – dije apenado por pedírtelo peor tu cumpliste mi petición con una sonrisa un tanto forzada, estas pensando en el. Lo noto por tu forma de verme.

    Tocaron las doce oímos ruidos y sales deprisa a ver quien es dejándome solo en esta habitación… si pudiera encontrar ese momento del acción podría saber que ocurrió realmente, tengo imágenes borrosas pero no fue Gumi, era falso lo que dijo Piko ¿No habrá sido el? El me odia con todo su ser por querer tomar lo que me pertenecía por derecho, solo puedo pensar en la forma de deshacerme de ese tipo de una vez por todas. Que vuelva de las calles de donde nunca debió salir, aunque haya tocado tu corazón Kaito, no puedes quererlo tanto como debes quererme a mi. Ya no te permitiré más desplantes, tu solo deberás verme a mí, aunque eso signifique destruirme a mi mismo por lo que pienso.

    Tu eras todo lo que tenia en esta vida ahora, no pienso dejar que alguien te aleje de mi, no quiero que se repita la historia de Rin, que dejo que quien amaba se fuera de su lado por otra persona y todo por no darse su lugar en la relación.

    Oigo como le gritas y algo se termina rompiendo, esos sonidos que tu deberías solo producir cuando estas conmigo a solas lo repites con el, oigo esos sonidos en el piso inferior de la casa, no me levantare para ver ese espectáculo. Solo por esta noche creeré que son otras personas que no son ellos en realidad… con esta venda en mi ojos no los veré juntos. Solo espero que mis ojos mejoren de una vez para verte su cara cuando sus ojos dejen de brillar.


    (Fin pov Len)

    (Pov Kaito)

    Ambos me pertenecían a mí, ellos no pueden elegir a quien quieren en realidad. Este niño al cual tomo esta noche en mi casa, solo se dedica de disfrutar y gemir mi nombre por el placer que le produzco, en cambio el otro chico el cual descansa en mi cama a el no podre tocarlo en un tiempo hasta que su cuerpo este recuperado. Sus uñas se incrustan en mi espalda conforme entro mas en el, sus ojos bicolor me observan con esa sonrisa de satisfacción que pocas veces veo en el otro, mis celos me vuelven loco y no logro contenerme.

    Piko aceptaba todo lo que le daba con gusto, en cambio Len era demasiado sensible y terminaba pidiendo que me detuviera cada vez que le quería hacer el amor. Si tan solo pudiera tenerlos a dos en donde iré seria magnifico.

    -K-Kai…to – dijo para ambos llegar al orgasmo, y terminar el recostado en el sillón solo con una camiseta, yo en su lugar me cerré el cierre de mi pantalón y me fui a la habitación dejándolo hay durmiendo, tenia que ver como se encontraba el otro chiquillo al cual no dejaba de convencer de que se quedara aquí.

    Continuara... quizas no se
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    Vaya ... Hola y bienvenidas al foro

    Es dificil pero mi escritor favorito seria †‹ELIANN›† por las excelentes historias que elabora y desarrolla, sin contar con su bella forma de redaccion. siendo el el primer escritor que lei al ingresar al foro, siendo el uno delos mejores escritores que haya podido conocer desde ya tres años

    Nozomi-sama por sus historias tan kawaiis que crea conforme pasa el tiempo, ademas de ser una de mis colegas del foro. la extraño demasiado y mas a sus contys con cada vez algo nuevo que agregar a la historia que hace.

    ~Kaminari The Killer Chan~ que fue de las principales escritoras que me alento a entrar a escritura. la forma que posee de redactar es bastante buena en si, sus historias con ese toque de personalidad individual que caracteriza a los personas de los cuales escribe historias, siempre deja con ganas de leer un poco mas.

    Parrot.79 Y no podria olvidar a Parrot-san ya que ambos tratamos de sacar a la luz una de las parejas mas desconocidas para el foro. Meito x Akaito. se que algún dia lo lograremos. Y ni hablar de su escritura es mas que buena, las tramas que poseen sus historias son la que capturan la atencion de quien las lea.

    Para cada uno de ellos no puedo decir la alegria que tengo al saber que continúan con nosotros... y si están leyendo esto ya era tiempo que supieran que son muy importantes para mi ^u^
    Nos veremos
    Sayo
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    Desperté en una habitación blanca, tan blanca que mis ojos lastimaba. Otra vez tenia algo conectada a mis venas, movía apenas débilmente la cabeza tratando de ver donde me encontraba. Una mujer que me llamo por mi nombre me dijo que no me alterara y puso en mis manos un biberón ¿Q-Que hará? La veo volver con un pequeño bulto en sus manos… ¿S-Shizuka?

    (Fin Pov Mikuo)

    (Pov Normal)

    Dando los primeros pasos, fue en busca de su hogar. Llorando buscaban la forma de hacer verle la verdad, pero ¿Los niños no comprenderán verdad? Los padres no podían con el dolor y falta de apetito que sufría el pequeño Shizuka, ya que en sus recuerdos solo podía ver a quien era su tío de sangre, como su padre verdadero. Probando apenas bocado día a día solo pedía lamentablemente que pudiera ver a su querido padre nuevamente.

    No obstante el joven de cabellera azul yace conectado a un respirador, un disparo con el cual pudo haberle causado la muerte instantánea no lo consiguió y quien lo provoco término suicidándose pocos momentos después. Si no hubiera sido por la acción de los policías quienes acudieron a ingresar por la fuerza a la casa, en estos días se hablaría de una muerte lamentable.

    Sujetando su mano estaba Gakupo, sin querer separarse ni un solo momento de su lado. Solo podía dar gracias por que a su amado a quien no vio durante ya casi cumplidos dos años desde su desaparición, ahora en ese instante este sujetando su mano con tanta fuerza rogando a que lo dejare ver, que le permitiera ver sus memorables ojos los cuales se asemejaban al azul que el mar poseía.

    Pasaron días hasta que este recobrara el conocimiento, pero lo que no se espero el y los demás fue que… nada había cambiado. Sus recuerdos seguían perdidos, y en su mente solo venían imágenes incandescentes de todo ese tiempo que estuvo al lado de la persona que tanto mal le había hecho a el y a los que lo rodeaban. Sofocado, perturbado por esos borrosos momentos solo quería salir corriendo pero no pudo, sus manos las cuales vi al querer moverse le produjeron un ligero apretón, debido a que en sus muñecas tenía unas esposas sujetas a la cama de hospital donde estaba recostado.

    -¿Q-Que hago aquí? – mirando directamente a sus alrededores hizo esa pregunta que dejaron perplejo a Gakupo, quien quizo en un intento desafortunado lo beso repentinamente.

    Siendo rechazado para su mala suerte, creyó que con un simple beso podría hacerle recordar, que podría traer devuelta al Kaito que el conocía y del que se enamoro. Como en los cuentos de hadas que pudieran terminar con un final feliz luego de tanto sufrir, pero no era así… era la realidad y no basta con un simple beso para cumplir lo que nuestros corazones añoran con desespero. Las lágrimas que surgieron al instante de los ojos de Kaito desaparecían al encontrar en contacto con su cuello, donde se perdían. Contaban que las personas cuyo amor era puro y sincero podían superar cualquier obstáculo ¿Pero era este el caso? ¿Un amor olvidado aun se siente? ¿Puede alguien olvidar tan fácil ese amor que sentía por aquel ser? ¿Pueden ser esas lágrimas fruto de aquellos perdidos sentimientos que aun siguen vivos dentro del corazón de Kaito? Nadie nunca lo sabrá, quizás solo fue en ese instante donde sus vidas darían un giro irracional a toda la historia.

    No fue como todos, fue un día donde un grito logro oírse desde fuera de la habitaciones mas alejadas del hospital, para decirles verdaderamente en las habitaciones donde estaban internados los pacientes con algún problemas psicológico, fueron los gritos de cierto peli azul quien puso a alerta a todos los demás huéspedes de la persona nueva que pronto verían cuando las puertas de las habitaciones fueran abiertas para salir al pateo de recreos donde podían ver por una hora la luz del día.

    -¡Sáquenme malditos! – gritaba todas la noches apretando en sus manos enrojecidas de su propia sangre, debido a que su desespero lo obligaba a golpear sus propios nudillos contra la pared de su habitación hasta manchar las paredes con su sangre.

    De todos los presentes esa noche sus gritos cesaron de un momento a otro, abrasado a sus piernas cantaba la canción de cuna que le solía cantar en el pasado a su querido y siempre recordado Takumi.

    -Pronto te recuperare pequeño – dijo formando una enorme sonrisa en su rostro que asustaría a quien lo viera. Observo en su cuarto y tomo entre sus manos un bisturí el cual le había robado al doctor que se encargaba de controlar que estuviera bien, solo con dejarse manosear por escasos segundos pudo con el solo movimiento de sus manos encontrar entre las ropas que llevaba puesto el doctor un bisturí que tenia en uno de sus bolsillo para ocultarlo debajo de su cama, luego de empujarlo lejos suyo y empezar a gritar como un demente para que se fuera de hay antes que alguien se percatara de su presencia, ya que el doctor ese día fue con una sola intención esa noche.


    Continuara...
    Esto se va a poner feo....
    Jejejjejeje ya veran, si antes era el villano Meito, y ustedes pidieron su muerte se lamentaran haberlo pedido jejejje.
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    Increible...
    Pido continuacion de este espectacular fic
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    Excelente fic... cada vez mejoras aun mas
    Pido continuacion.
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    Excelente historia... jeje
    me ah gustado bastante
    Si las parejas poco usuales me llaman la atencion.
    Pido conty
    Sayo
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    Un sonido sordo se logro oír con la sinfonía de un leve jadeo. Todo se obscurecía para mi… espero que nos volvamos a encontrar en otro sitio. Adiós…

    (Fin Pov kaito)

    (Pov Mikuo)

    M-Me duele, estar aquí tan lejos de encontrar lo que tanto anhelo hallar mi corazón. Aquella parte de mí que yace perdida, en un lugar donde no puedo llegar. Ahora de pie estaba aquí, en este sitio, en esta casa donde vivía esa persona en compañía de Akaito quien no soltaba mi mano, muchas veces intente entrar pero ellos lo impedían, tenia miedo de no poder verle.

    El tenerlo en mis brazos era mi única petición, las gotas de lluvia acompañaban mi desespero… maldito sea el tiempo que eh perdido estando aquí, cuando de la nada unos disparo se oyeron dentro de la casa, mis labios temblaron y mi cuerpo se desplomo al suelo… creo ir a Akaito gritar mi nombre pero… solo veo como se mueven sus labios. Todo a mi alrededor se oscurecía, quedando un farro de luz que fue la mirada de desesperación de el cuando todo se volvió oscuro.

    Desperté en una habitación blanca, tan blanca que mis ojos lastimaba. Otra vez tenia algo conectada a mis venas, movía apenas débilmente la cabeza tratando de ver donde me encontraba. Una mujer que me llamo por mi nombre me dijo que no me alterara y puso en mis manos un biberón ¿Q-Que hará? La veo volver con un pequeño bulto en sus manos… ¿S-Shizuka?


    Continuara...
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    -Mira este lugar… ¡Que te hace falta para que me ames! – dijo el dejando a Takumi en su cuna.- Solo dilo, aunque sea una vez que me amas – dijo tomándome con sus manos, levantándome del suelo. Sujetando mi rostro forzaba a que lo viera, sus manos estaban rojas.

    Con dolor le dije lo que sus oídos querían escuchar… Solamente me abraso por escasos segundos para soltarme y entregare un arma en las manos, quede helado cuando lo hiciste. Pero ver tu mirada me produjo un punzante dolor en el pecho. Liberándome de su agarre, estábamos frente a frente ahora. Apuntándonos con dos armas, solo que a diferencia yo temblaba. Temía por mi vida, pero ya no quiere estar aquí… incluso si llegara a perder la vida quisiera que este niño pudiera salir de aquí.

    -Adelanta dispara, quiero que tu termines con esto – dijiste dejando de apuntarme.

    -¿Q-Que? – profirió en silencio ¿Sera esta la salida? Ojala lo fuera, pero no permaneceré aquí mas tiempo, por mis nervios una de las balas sale e impacta en la pared, casi dejo caer el arma por la fuerza de impulso que tenia la misma, tenia los ojos bien abierto a tus movimientos.

    -Solo te queda una bala. Espero que no falles – dijiste con una sonrisa melancólica- Date prisa si no jamás podrás volver a ver a quienes dejaste en el pasado – tus ojos me miraban fijamente, el día se volvió noche ya que las nubles impedían que el solo reflejara algún rayo de esperanza para mi, que consiguiera sacarme de esta oscuridad.

    -No me dejas otra opción tu quieres mantenerme prisionero aquí, a tu lado- dije con miedo e impotencia, tenia que matarte para obtener mi libertad. ¡Pero demonios no puedo! No tengo la valentina para empuñar esta arma y dispararte a sangre fría, nunca en la vida pensé que haría esto-N-No puedo… ¡No te puedo disparar Meito! – dije bajando el arma, demonios… maldición porque no puedo lastimarte luego de todo lo que tu me haz herido ¿Por qué no tengo el valor necesario para matarte? todo termino.

    -Entonces parece que seré yo quien le ponga fin a esto – apuntaste con el arma a mi frente, cayendo al suelo trato de que no me veas- Si no estas conmigo, mucho menos permitiré que estés al lado Gakupo – e-ese… era su nombre. Ese momento era borroso pero… era el estaba seguro.

    Un sonido sordo se logro oír con la sinfonía de un leve jadeo. Todo se obscurecía para mi… espero que nos volvamos a encontrar en otro sitio. Adiós…


    (Fin Pov Kaito)



    Continuara...
  12. .

    -Soy tu amigo y tengo derecho a abrasarte – dijo con una graciosa sonrisa.

    Solo tenia una pregunta… si el era menor que yo ¡¿Por qué es mas alto que yo?! No parecía de quince parecía de dieciocho. Comencé a ver como su actitud era sobre protectora conmigo, no quería que ningún chico se me acercara, se ponía en medio siempre. Algunas dijeron que había un chico que sacaba cosas de mi casillero por las noches, eso me inquietaba muchas de mis cosas desaparecían, como fotos de mías con mi familia y algunos objetos personales.

    Por favor… ya no mas. Mi boca no paraba de sangrar, esos golpes no eran nada comparado al dolor que sentía en mi corazón, esas personas me trataban de mujerzuela. Mis compañeros ya no me hablan, fue ella… fueron sus rumores, que se llevaron consigo a mis amistades. No tenia a nadie, ellos se apartaron de mí.

    -No puede creer esto – dije lamentándome en uno de los baños.

    Mis cosas… todas rotas. Las demás chicas escribían cosas horribles de mí en las paredes de cada baño de esta escuela, todos me miraron cuando salí. Trae de engañarme a mi misma, diciéndome todo esta bien. ¿A quien quiero engañar? ¿Ya no me dejaran entrar? La campana de entrada esta a punto de tocar.

    Miro a mis compañeros y entre ellos veo su sonrisa, la de Meiko la cual tenía entre sus manos, más bien sujeta en sus dedos con firmeza mi libro de la clase de historia, con el cual haríamos un trabajo el día de hoy. Cuando quise recuperarlo, ella se lo lanzo a una de sus amigas. Luka de cabellos rosados, ella era mas bruta de lo normal. Sujetándome de la mano hizo presión, lastimándome por su fuerza, cuando empecé a sollozar me soltó. Mire mi mano y en esa zona vi la marca de sus dedos.

    -Solo sabes llorar, así no es divertido – dijo ella tirándome el libro al fondo del salón.

    -¡Guarden silencio clase! – dijo entrando el maestro, me vio pero solo suspiro para señalar a la puerta. Ni siquiera el maestro me ayudaba – El día de hoy tenemos un nuevo compañero, entra y preséntate – dijo y de hay entro un muchacho de cabello rojo, con una especie de cola de caballo que le llegaba casi a la cintura. Deje de verlo y fui a buscar mi libro el cual no estaba muy lejos de mi, no me pude levantar ya que cuando lo intente una de las chicas me puso el pie e hizo que me cayera de nuevo. Solo mire abajo, no quiero que me vean llorar, ya no mas… por favor.

    ¿P-Por que todas me ven a mi? Cuando levante la vista tenia a ese muchacho frente a mí, y en sus manos sostenía mi libro. Con una sonrisa me ayudo a levantarme con delicadeza, y sostuvo mi mano abriéndola y haciéndome agarrar con fuerza el libro. Su mirada era tan… no se como describirlo, pero genero algo en mi que provoco que mis mejillas se sonrojara.

    -No permitas que ellos te pisoteen, alguien como tu no debe llorar ante cualquiera- dijo en voz baja con el propósito que yo solo lo escuchara- Déjame presentarme, mi nombre es Ted Kasane – dijo en tono normal, estirando su mano para que yo le correspondiera el saludo, así lo hice.

    -Y-Yo soy…

    -¡La zorra del salón! – gritaron unas chicas haciendo que soltara su mano rápidamente.

    -¡Gumi, Luka ya me están cansando! ¡Cayense! – dio el profesor.

    No pude evitarlo y salí del salón de clases llorando por la vergüenza que pase, frente a la única persona que me ayudo en todo este tiempo. Corrí por toda la escuela hasta llegar a los jardines traseros de la escuela, pocas veces vi a personas aquí, ya nadie venia desde que creían que aquí habían matado a un chico. Aunque desapareció un chico nunca se encontró hallazgos de que hubiera estado aquí, no me importa. Este era el único lugar donde podía estar sola sin las molestas palabras que me decían mis compañeros. Cubrí mi rostro con mis manos y solloce. Quería desahogarme…

    -No llores… - no por favor, el no.

    -Quisiera estar sola Meito, tu hermana ya me ah lastimado demasiado – dije algo molesta ya que por su culpa indirectamente se inicio todo esto.

    -Oye, no sabes cuantas veces le eh pedido que te deje en paz, pero ella es terca y no me escucha. Pero no te preocupes pronto ella no te volverá a molestar – dijo el intentando tocarme el cabello pero de un manotazo lo aparte.

    -¡No me toques! ¡Escuchas, es tu culpa! ¡Tú eres el culpable que todos me odien! No sabes cuanto te odio – le grite para remangarme las mangas y mostrarles mis marcas- Mira ¡Mira lo que me hizo tu hermana y su amiga! Mejor hubiera sido que me ignoraras el día que me conociste, no vez que me das miedo. No quiero verte mas, no te me acerques mas – dije con lágrimas cristalinas bajando por mis mejillas.

    -Me duelen las cosas que dices, pero si así lo prefieres ya no te ayudare mas – dijo bajado la mirada yéndose ¿S-Son lagrimas? No debí desquitare con el… pero no puedo soportar mas este maltrato. El se fue y desapareció de mi vista.

    Estaba sola, tal vez nunca lo estuve pero ese chico Meito, me producía una extraña sensación de incomodidad. El siempre intentaba ayudarme, incluso cuando todos querían tirarme harina y huevos, el me protegió con su cuerpo y me ayudo a salir de esa situación. Deje derramar la ultima de mis lagrimas al recordar ese momento, ahora ya no lo tenia a el ni siquiera.

    -Perdóname – dije bajando mi mirada.

    Las nubles se ennegrecieron encima mío y las primeras gotas se hicieron presentes, estuve parada hay todo el día, dejando que la lluvia tratara de llevarse este dolor que sentía. Las gotas de lluvia cubrían el salir de mis lagrimas autenticas.

    -No uses la lluvia para cubrir tus lagrimas – el chico nuevo me cubrió con su paraguas, empapándose el por la lluvia, en cambio yo con mis ropas ya mojadas no le impidió cubrirme de esta lluvia que parecía no llegar a su fin.

    Nos miramos por escasos instantes hasta que el me entrego mi mochila con todas mis cosas, y susurro a mi oído.

    -Puedo acompañarte a tu casa – dijo con una voz suave y educada.

    -P-Por supuesto que puedes- no me di cuenta que las clases habían terminado.


    Nos hicimos amigos de inmediato ese día, paso el tiempo y me enamore de el sin darme cuenta. Un día cuando me acompañaba a mi casa me hizo detenerme antes que pudiera entrar a mi casa y el algo apenado me confeso sus sentimientos por mi, no pude ser mas feliz en toda mi vida al oírle decirle que me amaba como yo lo amaba a el. Ese día yo… recibí mi primer beso, fue tal y como lo imagine tan suave y dulce. Al momento de despedirnos no quisimos, éramos ahora novios oficiales.

    Pero… no todo era color de rosa, mi casillero ya no estaba llena de notas si no ahora eran amenazas, eso me asustaba un poquito pero de seguro eran de esas chicas, a ellas le gustaba Ted, pero el me quiere a mi. Nunca desconfió de su fidelidad conmigo, no importa cuanto chica se le insinué el siempre las rechaza rápidamente.

    La época escolar había llegado a su fin, me gradué con honores de la preparatoria al igual que Ted. Al poco tiempo nos casamos y tuvimos un hermoso bebe, se parecía mucho a mi pero tenia el color de cabello y ojos de su padre, de color rojo. Era feliz, y el regalo de mis padres fue la casa donde viví en tiempo que estuve en la preparatoria, tenía mi hogar formado ¿Qué más podía pedir?

    Era feliz con mi familia. Pero… una noche, un tipo entro a la casa cuando Ted no se encontraba presente, yo asustada me encerré en la habitación del bebe para protegerlo, prefería que se llevara lo que quisiera pero que dejara a mi hijo tranquilo. Rompió a patadas la puerta ¿T-Tu? ¿Qué crees que haces?

    -No me toques – dije al verlo acercarse a mi hijo, su forma de verme. Sus ojos sin brillo, me tomo de las manos con extrema fuerza lastimándome-M-Me lastimas- proteste al oír el llanto de mi hijo. Mi hijo tenia apenas dos años de vida, el necesita de mi es muy pequeño.

    -No sabes cuanto tiempo espere tenerte así conmigo, tres años, estuve esperándote tres años. Pero nunca me hablaste, nunca me buscaste para disculparte conmigo- dijo molesto para mirar mi camisón. –Sabes ya no soy un niño, ahora soy lo suficientemente mayor para poder estar contigo – dijo sacando algo de su bolsillo, era una navaja.

    -P-Por favor, no me hagas nada– dije asustada completamente espantada por esto. Ayuda por favor.

    -No importa lo que digas esta noche tu y yo nos divertiremos bastante – dije lanzándose encima mío. Yo le patee el estomago y salí corriendo de la habitación, tenia que alejar a ese loco de mi bebé, tenia que alejarme corría bajando las escaleras tratando de llegar a la cocina para buscar con que defenderme pero no logre... No pude llegar.

    E-El me detuvo y me llevo a la fuerza a la habitación del piso de abajo y me tiro a la cama. Luche y trate de defenderme… pero el. Esa noche me destruyo la vida por completo, el abuso de mi. Me termine desmayando a los pocos minutos ya que el intento asfixiarme con la intensión de que no gritara más.

    Cuando desperté estaba en una cama de hospital conectada a una maquina, estaba feliz de estar viva, pensé que moriría en manos de ese tipo. Y yo que pensé que el era mi amigo, pero cuando vi entrar a Ted su mirada no me agrado.

    -Abortaras a ese niño –dijo el

    - ¿De que estas hablando?- dije aun mareada por los analgésicos

    -No quiero que nazca, deshazte de el cuando te recuperes – dijo entregándome unos papeles-Mira esta en tus estudios que estas embarazada de ese maldito – dijo

    -N-No es posible – mis lagrimas mojaron esos papeles

    Grite desgarrada del dolor por que ahora en mi interior crecía lentamente una vida, que ni yo se si quiero verlo nacer. Es fruto de una violación, pero no tiene la culpa. No importa lo que digan pero este bebe no tiene la culpa de nada, pero no quiero tenerlo, no puedo tenerlo.

    Pero mi familia no aprobó lo que queríamos hacer y nos terminaron convenciendo a ambos que tuviera al niño, ya que el no tuvo la culpa. Pero Ted si el no me hubiera amado como lo hace creo que lo habría perdido para siempre, aunque lo niegue creo que este bebe… en un futuro me traerá problemas.

    Mientras tanto solo puedo pedir que quien me hizo esto se pudra en la cárcel como lo esta haciendo ahora, que nunca salga ya que no se que pueda hacerme. La habitación donde fui ultrajada la clausuro Ted, la cerro con una candado para que Akaito mi hijo mayor nunca pudiese entrar, mientras que en pocos días daría a luz a mi segundo hijo Kaito.

    Ojala mi historia no se repita.

    (Fin pov Kaiko)

    Continuara
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    No se porque lei Meito x Akaito....Jejej error mio
    Pero me gusta tu fic, es intrigante Y LA PAREJA IGUAL
    Pido conty

    Continua es bueno que varien con las parejas... Y yo creo haber visto en otro sitio una pareja como esta
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    Ajadnjkasfnkjasgnakjdg... *-*
    Necesito continuacion... pronto
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    -Hermanito sabes en esta casa moriras, donde tu me mataste a mi al naceré en esta nuestra casa – dijo Kaito apretando aun mas el cuello de Mikuo, tratándome de enloquecer, lastimando lo que mas amo… en esta y en mi ultima vida.

    Me quede en silencio al no verlo forcejear mas, ¡¿Mikuooo…?! Un dolor sordo penetro mi corazón, llenándome de agonía la vida. Nos entramos, y ahora tenemos que despedirnos… injusta fue la vida conmigo, no había nada que pudiera contener estas lagrimas que me nublaban la mente, jugaba a pelear contra la ira, pero ahora solo quería romper estas cadena y romper el cuello a mi hermano. Hubiera sido mejor irnos por separado, no quería causar problemas.

    Ah, es tocada, destrozada y arrancada, la felicidad que teníamos. Susurrabas quizás por lo bajo creí oír tu voz, pero solo fueron alucinaciones. La felicidad es destruida…

    Los días compartidos, los recuerdos amontonados, vienen a mi mente hechos pedazos. Odio esto, es doloroso.

    -Pobre imbécil – dijo ese sujeto para ponerse delante de mí, mostrándome esa sonrisa de satisfacción- No te preocupes muy pronto iras a acompañarlo hermanito bastardo – dijo, tire mi cabeza para atras para impulsarme con fuerza a adelante, dándole un cabezazo directo a la cara.

    -¡Basura! ¡Te matare! ¡Te despedazare en mil pedazos! – le grite para ser golpeado por ese otro sujeto el cual me toco la cara, con sus sucias manos.

    -Oye, cálmate - dijo sonriéndome, para besarme… le mordí la lengua con fuerza- Tsk… será a las malas entonces – me golpee como tres veces en el estomago, y dos en el rostro.

    Cuando se fueron, luego de terminar de divertirse conmigo se marcharon. Dejándome en compañía de el cuerpo de Mikuo, no se movía… ¿P-Podre ver aunque sea tu rostro por ultima vez? Pregunto adolorido intentando caminar hasta donde puedo, ya que no estaba atado ahora no estaba a un poste, en lugar tenia mis pies con grilletes y un limite de cadenas, quiero llegar a ti.

    Quisiera verte, acariciarte, contemplarte, para besarte… para acompañarte… a que ambos consigamos ser felices en la muerte


    Continuara...
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