Posts written by Misuki Beyond

  1. .
    (Pov Akaito)

    Me dijeron que podía tenerlo todo ¿Entonces que ocurre con tu amor? Te eh observado todo este tiempo, pero tu no volteas a verme ni un solo instante. ¿Es por ser quien era? No puedo hacer las cosa mas sencillas cuando no me notas, quisiera que al menos me llamaras por mi nombre cuando nos presentan en esas asambleas donde éramos participes.

    -Un gusto – le extendía mi mano, al menos quería sentir sus labios rozar mi piel, pero el estrecha mi mano con la suya saludándome de esa forma siempre.

    -Hola joven – me respondiste para ir con mi padre a hablar con todos esa ancianos sobre cosas que desconozco.

    Las flores florecieron bellisimamente en los arboles ese día, extendía mis manos intentando alcanzarlas sin mucho éxito, para mi sorpresa apareciste tu con tu altura. Alcanzaste un racimo de flores y me las entregaste a mí, con mis manos temblorosas… la tome gustoso al saber que venían de ti. No podían haberse enrojecido más mis mejillas que cuando tus bellos ojos marrones me observaron fijamente para irse de mi vista.

    Mi hermano mayor te quería solo para el, por ello me mantenía lejos de ti pero esa vez no lo podía evitar. Estaba en otro sitio, te seguí para agradecértelo pero no me dejaste acercarte a ti, pusiste entre nosotros una barrera. Cerrando la puerta de la habitación la cual compartías con mi hermano ausente.

    Cada vez que me rechazas haces más mi anhelo que tus labios y los míos se rocen siquiera. Me fui a media noche a uno de los baños de mi casa, le pedí a una joven sirvienta que me preparara bañera con sales aromáticas y con fragancia de rosas. Cada rincón de mi cuerpo con el solo sumergirme en esa cálidas aguas, perfumaron cada rincón de mi cuerpo. Estaba seguro esta era mi oportunidad, acercar mi mano a mi rostro se podía percibir el aroma a rosas silvestres.

    Con una rosa rosada en mi cabello, adornaba mi ser dándome un toque de inocencia. Me encamine solo llevando puesto un kimono negro casi abierto en la parte superior de mi dorso, dejando expuesta parte de mi piel.

    Esta noche donde mi padre y mi hermano se habían ido a patrullar los alrededores con los demás soldados, menos contigo. Era la perfecta oportunidad, mi lento andar fue por mis nervios, mi corazón aceleraba su ritmo por cada paso. El suave eco de mi ser al solo posarse en tu puerta, abriéndola con cuidado, era fácil hacerlo ya que tu estabas dormido.

    Confundí mis propios pensamientos, pero era tantas las sensaciones que este joven me hacia sentir con solo su presencia. Su kimono blanco con el cual dormía con mas comodidad, me dejaron ver su fundoshi. Con una mano en mi pecho trataba de regular mi aliento, por que el solo verlo tan de cerca cautivaba mi alma.

    -Esta noche, me entregare a ti. En cuerpo y alma – pronuncie cerca de tu oído para empezar a besar tus labios.

    Te fuiste despertando, pero cuando me viste te quedaste perplejo lo note por tu reacción. Apartándome cruelmente de tu lado, un ingrato amor es lo que tenia a tu lado. Ya que tu no me quieres, era menor que tu. Me dijeron que tú serias como un hermano para mí, pero en mi vida nunca podría verte de esa forma ¿Si no lo fuiste para mi hermano mayor? ¿Por qué yo no podía quererte como te quiere el?… me tire en tus brazos siendo recibido por obligación, los latidos de tu corazón me calmaban.

    Cada vez que tú te quieres ir, te detengo tomándote con mis manos tirándote sobre mi cuerpo, deseaba que tú fueras quien me poseyera. No deseaba nada más, solo quería estar contigo. Nadie puedo amarte como yo… quizás fue por el calor que emitía nuestros cuerpos lo que por pena o calidez hizo que aceptaras mi beso. Dejándome deleitarme por tus labios aquellos que me quitaban el aliento cuando rozaban la piel de mi hermano al espiarlos. Lo se, ellos se querían y yo a pesar de saberlo me interpongo entre ambos.

    ¿Si lo quieres a el por que me correspondes? Me pregunto feliz, eso me da esperanza al pensar que tus sentimientos pueden pertenecerme un poco. Tus besos consumían mi piel por el calor que me dabas, tus fuertes brazos rodearon mi espalda acariciándome despacio, contorneando con tus manos y dedos mi ser entero. Jadeo dulcemente a tu oído cada vez que tu aliento rozaba mi cuello, y por el solo tacto de tus manos sobre mi cuerpo calentándome, dejándome consumir por la pasión.

    Besabas demandantemente mis labios, mordiéndome el labio inferior al separarnos tirando un poco de el, pronto mis ropas cayeron al suelo de esta habitación, quedando completamente desnudo para ti. Olfateabas el aroma a dulces rosas que brotaba de mi cuerpo con encanto, yo seré tu más bella rosa. Quiero que tú solo me desees a mí, únicamente y exclusivamente a mí.

    Me dijiste “Yo te quiero” y la noche fue testigo de nuestra pasión. Nadie nunca podría amarte como yo te amaba, amor nunca me dejes desde ahora. Hasta el alma nos quisimos, dejando que el calor de nuestros cuerpos nos consumiera hasta el amanecer... dejaste leves marcas en mi piel, mis piernas sucumbían a tus movimientos enredándose en tu espalda mientras me penetrabas profundamente, siendo pecadores en esta noche de luna. Robándome la inocencia que tanto quería perder contigo.

    Como animales en plena época de celo, nos devoramos nuestros cuerpos sudorosos uno al otro. Arañaba tu espalda marcándote como mío, no me importaba si mi hermano lo descubre quizás así se de cuenta que eres mío, caminamos juntos hacia pleno campo de batalla por esto. Gemidos indecorosos resonaban en este lugar, me aferraba a tu espalda esperando tu esencia, deseaba ser llenado por ti… El tiempo fue clemente y me permitió disfrutar de tus acciones por largos periodos de tiempo esa noche, la arrogancia que tenias nunca te permitió verme como algo más.

    -M-Meito… aahg… te amo – dije a su oído para terminar llegando al orgasmo perfecto otra vez, mi cuerpo estaba débil y muy sensible cuando termino usted viniéndose dentro de mi nuevamente, sentía su esencia cálida en mi interior. Me estremecí bastante cuando salió, me hizo tanta falta que si no fuera por la hora, podríamos continuar- Contenme presiento que no podre caminar- le hice entender cuando estire mis manos delante suyo.


    Continuara...

    R1HSUVZ

    Edited by Misuki Beyond - 21/1/2016, 10:26
  2. .
    Esto se tornara en una historia de trios amorosos Hahaha *risa malevola*
    Bueno subire un pequeño fic sobre esta pareja tan kawaii Meito x Akaito, sera un poco mas sadica a mi pàrecer, lo ahora mismo
    Solo lo notifico aqui
    Volvere a mis actividades moral mente dudosas
    Nos vemos

    Prussia Scarlett: Jeje ya veras que el azulino sabe convencer a cualquiera, a hacer su voluntad
  3. .
    La estoy leyendo... pronto altualizare este fic...
  4. .
    -¡No quiero palabras vacías quiero hecho, cosas que me aseguren que ya no será un obstáculo mas! – Le grite histérico – Lo peor es que le pedí a Rook que viera a este lugar, maldición ¿Dime ahora que vamos a hacer si ellos dos se encuentras? ¡¿Dime que rayos haremos si Ted le dice todo lo que hicimos?! – le pregunte frustrado.

    -No lo permitiré, el no echara a perder todo lo que hemos logrado – musito algo alegre, el tenerlo aquí conmigo.

    Poseíamos parte de la acciones de la empresa, solo por el cometer aquel acto. Nadie sospecho de nosotros, no hubo pruebas que bastaran, para que nadie nos involucrara en ese caso de asesinato. Ese imbécil de Takeshi, al firmar esos papeles acelero su muerte. Solo basto un sorbo para que se durmiera, el resto fue obra mía, con los encantos que poseía logre hacerlo beber ese trago que contenía una droga que lo dejaría dormido por un buen tiempo. Aun recuerdo ver esas luces que alumbraron el cielo cuando ese auto y el cuerpo de ese infeliz se calcinaron envueltos en las llamas. Con ayuda de Meito, ambos conseguimos una pequeña parte de esa herencia.

    Siendo dueños de esas acciones, tenias una pequeña fortuna la cual nos alcanzaba para irnos lejos, pero no quiero hacerlo tampoco. Me engaño a mi mismo, que podríamos obtener aun más, deseaba hasta el último centavo de esa familia. Me equivoque, dejando que tu manipularas a tu antojo lo que debía sentir por ti, por ello no permitiré que nadie mas intervenga. Podría huir con Meito por que no podía irme y dejar a Rook, aunque lo niegue aun lo amo, el corazón es el culpable de que no pueda definirme a quien amo realmente.

    Nuestro pequeño hijo estaba en una habitación con un niño de cabellos negros conectado a un respirador, no lucia nada bien… no me agradaba que estuvieran en la misma habitación pero nada podía hacer. Tenia que irme rápido a la casa, me quería llevar a Takumi pero el doctor Hiyama me lo impidió, me dijo que lo dejara en esa habitación y que lo dejara descansar esa noche aquí.

    No puedo creer que después de tanto tiempo, tenga que aceptar esto. Pero no permitiré que mi hijo eche a perder mis planes, el hará lo que yo le ordene, no estudiara arquitectura estudia para poder manejar la empresa que poseía la familia, fue culpa de Natsuki, esa niña le metió ideas en la cabeza de que ella seria la que mandaría en la empresa y que el no se preocupara, no lo permitiré. Mis hijas pueden hacer lo que deseen pero no pueden aspirar a tomar el mando de la compañía, seria ridículo si en algún momento ella fuera la presidenta.

    -Volveré por ti en la mañana - dije con cariño a mi pequeño hijo al cual deje en su cama.

    -Como digas – dijo molesto para taparse con la sabana de la cama de hospital.

    -Duerme bien, pequeño – dije depositando un beso en su frente descubierta.

    Me fui de hay luego de despedirme, en camino a la casa vi a los alrededores buscando a Ted, no lo encontré en ningún lugar. Espero que no se le ocurra aparecer.

    (Fin pov Kaito)

    (Pov Takumi)

    -Hasta que se fue - dije para levantarme de la cama, e inspeccionar el lugar en donde estaba.

    No estaba mal, logre convencer a todos que realmente me dolía la cabeza para poder deshacerme de todos esos gorilas. Ahora podía estar tranquilo, tenia curiosidad de cómo era este lugar de noche, me puse mis zapatillas listo para irme. Pero unos tosidos me hicieron ver a un chico que estaba compartiendo la misma habitación, solo que no lo note por esa cortina. Cuando la quite, resulto ser un chico como yo, de la misma edad, lo se porque había una especie de expediente que estaba puesta en su cama, quizás para que las torpes enfermedad sepan su estado y su nombre.

    -¿Haruki? Mmm – leí su nombre par ver que abrió los ojos, viéndome con una sonrisa- ¿Por qué me sonríes? – le pregunte curioso.

    -Por que me haces compañía, no me agrada estar solo en el hospital – dijo para reír un poco pero luego tosió asustándome un poco, pero se estabilizo luego- ¿Piensas escaparte? No debes hacerlo esta noche el barrio es muy peligroso – mi dijo intentando asustarme.

    -¿Y como se que dices la verdad? – le dije.

    -Eh vivido en este lugar desde que recuerdo, mi padre siempre me dijo que no salga de noche por estos lados – se notaba que este chico era de estos lados, sus manos tenían unos cuantos raspados.

    -¿Cómo te llamas? – le pregunte curioso, de sus cabellos negros resaltaba un mechón de color negro en un costado de su cabeza. Tenía un ligero parecido a mi padre.

    -Haruki Kasane, ¿y tu como te llamas, compañero? – pregunto algo alegre a pesar de su estado, era un chico muy alegre.

    -Takumi Utau… no te duele eso – dije señalando esas agujas que estaban dejadas en un costado de la mesita de luz que estaba al lado de esa cama donde estaba.

    -Ya me acostumbre rápido, no siento mucho las inyecciones– dijo demostrando no dolerle lo que me di cuenta.

    -Mentir no te ayudara, además me haz retenido aquí – dije encaminándome a la puerta- Quizás volvamos a vernos, Haruki espero que te recuperes – le dije para irme de ese lugar.

    -¡Espera! No puedes irte…- grito cuando me fui, luego solo oí sus tosidos.

    Corre libremente cuando logre escapar, este sitio era inmenso al aire libre. Este sitio me encanto, el reflejo de las luces en el lago de este pueblo era hermoso, y lo mejor que no había ningún adulto que me retuviera. Deje que la brisa del viento oscilara contra mi cabello, era un mentiros ese chico ¿Qué puede haber de malo aquí?

    Eres un mentiroso, pero me cayó bien. Nadie toleraba estar cerca de mí, por la arrogancia que tenia, pero el nunca dejo de sonreírme a pesar de su estado. Cuando amanece y anoche aquí debe ser lindo, me senté en la orilla del lago quitándome los zapatos que tenía, deje que mis pies y tobillos se mojaran por esa cristalina agua que había.

    -Miren, no mas lo que tenemos aquí – una voz se oye detrás de mí eran un chico mayor.

    -¿Q-Que quieres? – dije con nervios al ver que se acercaba peligrosamente a mi, su mirada me asusto bastante.

    -Nunca te dijeron tus padres, que no salgas solo por estos lados en la noche– dijo para empujarme al suelo colocándose encima mío, tomo mis manos con una de las suyas y las estiro sobre mi cabeza colocándolas hay.

    -¡¿Q-Que haces?! – Dije asustado para ver como besa mi cuello- ¡No me toques! ¡¿Alguien?! ¡Déjame por favor! - me tapo la boca con una pañuelo que saco de su bolsillo, este tipo me tocaba con sus manos lo que resultaba repugnante.

    -Que delicioso sabes pequeño, intentare que disfrutes esto tanto como yo – susurro este tipo a mi oído, amarro mis manos con la camisa que se quito, y a mi me levanto la camiseta que traía puesto, dejando descubierto mi dorso ante el.

    -P-Por favor… no – logre decir al escupir ese mugroso pañuelo, mis lagrimas bañaban mis mejillas, pero a el no le importo y empezó repartir besos en mi abdomen ascendiendo a hasta mis pezones, los cuales empezó a succionar uno a uno.

    -¡Déjalo idiota! – grito alguien rompiendo una especie de tronco en la espalda de este tipo, cayo encima mío inconsciente. El otro sujeto me desato y me tomo de la mano para ayudarme a levantarme del suelo – Estas bien – dijo con una voz sonrojándome por su aspecto, creí que se trataba de una mujer pero solo por su delicado rostro.

    -L-Lo estoy, le agradezco que me haya ayudado, tuve mucho miedo – dije tratando de controlar mis lagrimas, esta persona me abraso y luego arreglo mis ropas- ¿P-Por que me ayudo? – le pregunto apenado.

    -Tengo un hijo de tu misma edad, y me recordaste a el, por ello no podía dejar que ese sujeto te lastimara. Por que creí que tú eras mi pequeño hijo – dijo algo triste al mencionármelo.

    -¿Y como se llama su hijo? – le pregunto algo triste al verlo entristecerse.

    -Se llama Haruki, ahora debe estar durmiendo en el hospital pensaba ir haya para ir a verlo, pero tu estabas en peligro y te fui a ayudar – me dijo dejándome perplejo.


    Continuara...
  5. .
    -P-Por favor, hare lo que sea pero quiero volver con mi mamá – dijo en mi cuello. Su cercanía me hacia sentir un extraño cosquilleo en mi interior. No me contuve y capture sus labios con los míos en presencia de mi hermano.

    Su resistencia fue escasa, se dejo guiar por mi beso. Pero me separe de el a su tiempo, vi el sonrojo de sus mejillas. Era lindo demasiado… si cortaba sus ataduras seguro será como mi hermano, intentara huir. Por ello no lo hare, si es que Kiyoteru te trajo aquí, aceptare compartirte solo con el. No te iras de aquí, no puedo imaginar estar ahora sin tu presencia.

    -Tu nombre… ¿me lo dirías? – le pregunte con una sonrisa alegre. Seguro debe ser lindo-Yo soy Kaito Shion, un gusto en conocerte – dijo tomando su mano en conjunto y depositar un sutil beso.

    -M-Mi nombre… es Rei Kagene – dijo apenado luego al sentir mi mano en su piernas expuestas por ese short que traía puesto.

    -Comprendes esto verdad, si te portas bien conmigo veré que estés seguro en esta casa, pero por si algún día se te ocurre huir – con mi dedo señale directo a Akaito – Terminaras como mi hermano Akaito, pero yo seria hasta capaz de cortarte hasta estos bellos labios si llegaras a besar a alguien más que no sea Kiyoteru o yo – le advertí en su mirada se notaba el miedo.

    -E-Esta… bien – dijo cooperando conmigo, me puse muy feliz y lo abrase llevando su cabeza a mi dorso como antes. Pero hizo lo mismo, lloro y empapo mis ropas.

    -Seré muy dulce contigo, no dejare que ellos te maten – susurre a su oído, intensificando mi agarre a su cuerpo-Solo corresponde mis sentimientos, solo eso pido Rei… ya no me interesa más mi alma, si tuviera que perderla para estar contigo lo haría sin dudar – dije dulcemente a su oído para besar su mejilla, y con mis manos secar sus lagrimas.

    -Eres un enfermo como todos los demás Kaito – dijo molesto ese intruso en la habitación – Tu crueldad hará que pagues esto que haces, ese niño tiene incluso tu edad quizás ¿Y tu le pides que este a tu lado apartándolo de su hogar? ¿No puedes comprender su miedo? Estas tú loco, un demente que no merece que alguien lo ame, cuando todo esto termine, cuando al fin logre huir hare que te metan a un sanatorio mental o a la cárcel ¡así pagaras el haber matado a Mikuo! – me grito llamando la atención de Rei.

    No lo permitiré, no será tuyo. Deje a Rei tirado en la cama, y me lance encima de Akaito para empezar a luchar con el, logre poner mis manos en su cuello ejerciendo presión, iba matarlo pero este me pateo en el estomago escapando de su agarre. Al levantar la mirada me proporciono una patada justo en la espalda lo cual me hizo gritar, dolió un poco pero no estaba listo, finjo caer inconsciente para que se acerque a mí. Cuando funciono saque la navaja del bolsillo, le apuñale profundo a su brazo izquierdo, la sangre que broto era majestuoso, su grito desgarrador me encanto. Quería oír más, un poco mas de ese sonido tan dulce que salía de la boca de mi hermano.

    -Tú no puedes ganarme. Me pregunto ¿En cuantos pedazos podría cortarle? – dije ansioso sentía la sangre de su cuerpo fluir con prisa.
    Akaito cayó al suelo, estaba contra la pared sujetando su brazo herido. Lloraba por su dolor, pero yo en lugar de sentí pena por el, quería verlo gritar un poco mas. Ver la expresión de miedo reflejarse en sus ojos carmesí, eso siempre me gusto de el, sus ojos.

    -No te muevas, no quiero dañar tus ojos cuando los saque – dije acercándome a el, levante mi mano la cual tenia la navaja, estaba listo para darle muerte…

    -¡Ya bastaaa…!

    P-Pero el grito que provino de atrás, me hizo dejar todo. Era Rei, me mirada lleno de terror. Cuando fui con el, cuando quería tocarle este sollozaba mas fuerte ¿C-Creíste que te lastimaría?

    -N-No me hagas daño – sollozo pronunciando eso.

    -No lo haría, Rei mírame por favor - le pedía pero este por el miedo no lo hizo.

    -A-Aléjate, no me toques – dijo apenas entre su llanto. Cuando me vio por fin, me causo dolor ¿Todas esas lagrimas eran por mi culpa?

    -Rei no me temas, no debes hacerlo – lo tome a la fuerza de los hombros haciéndolo verme forzadamente -¡Tu debes aceptarme! ¡Deber es estar conmigo! No me hagas lastimarte, porque si no me dejaras otra alternativa – dije fríamente.



    Continuara...
  6. .
    Haber mi querida parrot
    Niño de cabello negro corto. Ojos ambar ¿quien es segun tu?


    Aviso que no actualizare por un tiempo ...
  7. .
    -¿P-Por que me calienta si se dormirá? – dije molesto me iba aparar pero este me sujeto de la cadera impidiéndome el que me fuera.

    Maldición como me deje llevar por este sujeto, ahora no podía irme. No me quedo de otra que intentar dormir, pero… ¡¿Cómo se supone si el aliento a alcohol de este tipo daba a mi cuello?! Chasqueo la lengua molesto para verle la cara y tomar una almohada y usarla de barrera, funciono pero este me apretó aun más la cintura apegando mis glúteos a su hombría. Era incomodo yo quedaba en posición de feto cerca suyo, el estaba de lado.

    -Maldito, mañana me las pagaras – me extraño no escuchar los gemidos de gata de mi hermano. Pero conociéndolo se contiene, porque simplemente acepta el lugar que le corresponde, yo tenia suerte ya que tenia la libertad de hacer lo que desease, pero ahora… con la llegaba de este pervertido no se como le hare para no perder mi primera vez. Pero si ocurre, espero que no sea como le paso Akaito… el idiota por resistirse a papá casi se desangra en el suelo.

    A las pocas horas logre conciliar brevemente el sueño, pero cuando desperté. Vi a Akaito intentar huir por una de las ventanas de la cocina cuando iba bajando al comedor, no lo dude… tome en mis manos la escoba que encontré tirada y con ella le golpee fuertemente la espalda.

    -D-Duele… imbécil - ¿aun puedes quejarte?

    -Tu eres un imbécil hermano, además ¿Por qué usas ropa de mujer? – dije para notarlo ahora, me sonroje bastante se veía muy… lindo.

    -Tsk… cierra la boca – se sacudió el cabello con sus manos dejando caer algo de su cabello, era un listón con un moño- En vez de estar en mi contra deberíamos irnos de aquí juntos, antes de que esos tipos despierten - ¿es eso acaso una orden?

    -No es muy temprano para que me hagas reír – dije para sonreír – Papá y el otro sujeto despertaran en unos minutos deje mi despertador programado para ello… ¿A dónde irías si logras escapar?-pregunte cansado por la infinidad de veces que me propuso que huyamos.

    -A cualquier sitio, menos que aquí – dijo decidido.

    -Papá tiene razón necesitas disciplina, quizás de esa manera se te quiten esas absurdas ideas de la cabeza - me canse de hablar con el y fui al refrigerador y tome un poco de leche del mismo pote.

    -Kaito… algún día te arrepentirás de no haberme escuchado. – y con eso se marcho a la habitación, me reí por lo bajo de el ¿Arrepentirme? ¿Yo?

    Subi a las habitaciones...Me quede callado escuchando por los pasillos esos sonidos tan indecorosos que salían de la boca de mi hermano mayor. Eran gritos desgarrados para mi oír, pero despertaron algo en mi, un fuerte estruendo capto mi atención, provenía de la cocina.

    Corrí para ver quien era, saque la navaja de mi bolsillo y fui con cautela a ver quien demonios estaba entrando a la casa. Susurro débilmente unas cuantas palabras, para salir frente a esa persona.

    -E-Espere – dijo con sus temblorosas piernas, vi sus manos estaban atadas juntas y sus piernas tenían marcas de cortadas- No me lastimes, por favor – su suave voz resonó en mi oído cuando vi directo a sus ojos color ámbar, quede hipnotizado con solo eso.

    -¿A que haz venido intruso? – dije recobrando la cordura, dejándole ver mi navaja la cual puse luego en su mejilla, impregnándola con sus lagrimas.

    -E-El me trago aquí – musito asustado para quedar a córralo contra la pared por mi.
    -¿Qué? - no me lo podía creer tal mentira.

    -Fue un hombre de cabello marrón y trae puesto unos lentes, pero… no recuerdo nada mas – dijo para sollozar -¡Q-Quiero volver con mi mamá! – dijo para colocar su cabeza en mi pecho, mis mejillas se enrojecieron por ese echo.

    No me di cuenta pero cuando lo note tenia un de mis manos puesta en su cabeza, y el rostro del otro niño se adentraba cada vez más en mi dorso. Cuando quise que me soltara nuestras piernas enredaron entre ellas por el forcejeo y caímos los dos juntos. Terminando el debajo mío, y yo encima del cuerpo tan delgado que poseía, nuestros rostros estaban demasiado cerca que casi podíamos sentir la respiración del otro. Cuando este movió nuestros labios se rozaron por escasos segundos, fue un golpe en mi cabeza lo que me hizo besarlo bruscamente.

    -Vete a la habitación si quieres tirarte a este mocoso – dijo el bastardo amigo de papá, viéndome entretenido por la visión que le dábamos.

    -C-Cállate – me levante del suelo para irme pero el niño me tomo de la mano con dos de las suyas intentando retenerme.

    -N-No me dejes a solas con el – dijo con oz muy quebradiza –Tengo mucho miedo – susurro por lo bajo.

    -¿Qué tanto te dice? – Pregunto ese maldito para tomarle con fuerza el cabello al chico, este me soltó para quejarse del dolor, este tiraba cada vez más de su cabello. Hasta llegue a pensar que le arrancaría la cabeza por la fuerza que ejercía al tirar.

    -Por favor deja que me vaya – suplico para seguir siendo maltratado.

    -Detente – le ordene poniendo el filo de la navaja en su cuello, cortando el flujo de su aliento quizás lo soltara.

    -Insolente como tu padre – dijo este para soltar su agarre del cabello y verme directo a la cara. Cada vez que se movía apretaba más la presión que ejercía sobre su cuello, pero ahora tenía una de sus manos puesta en mi mejilla mientras que de su cuello surgían caminos carmesí.
    Creo escuchar algo pero lo que se rompe finalmente fue otra cosa, mi padre nos miraba molestó con una botella de la cual estaba rota dejando expuesto sus filos ante nosotros. Temblé al verlo de esa manera, luego apareció mi hermano detrás de él, se sorprendió por su forma de verme. Cuando me percate sentía algo en mi espalda, volteo mi cabeza para taras y veo una cuchilla lista para ser insertada en mi espalda directo a mi corazón.

    -¡¿Qué ocurre aquí?! – grito padre para golpear directo en el rostro al otro sujeto-Kiyoteru ¿Ibas a matar a mi hijo? – exclamo muy molesto con el ¿Kiyoteru era su nombre?

    -Tranquilízate primero, fue tu hijo el que comenzó. Además los niños que traigo aquí no tienen nada que ver contigo, y mucho menos para que tu hijo intente ayudarlo o algo mas – dijo observándome cuando decía esas palabras tan vergonzosas ¿A-Algo más? ¿A que este niño y yo…?

    El aire se puso muy denso y me marche de hay pero me lleve al chico conmigo, Kiyoteru, el quiso evitarlo pero mi padre se lo negó. Akaito nos siguió me enoje por su molesta presencia, pero este no evitaba como yo, al ver a este niño de cabellos negros.

    Cerré la puerta de esta habitación y lo deje recostarse en mi cama. Este nervioso lo hizo y me vi para tomar mi mano y suplicarme que lo liberara.

    -No puedo hacer eso – le dije para sentir su abraso, desde ese día no se de mi.

    -P-Por favor, hare lo que sea pero quiero volver con mi mamá – dijo en mi cuello. Su cercanía me hacia sentir un extraño cosquilleo en mi interior. No me contuve y capture sus labios con los míos en presencia de mi hermano.


    Continuara...
  8. .
    El honor es mio por leer tan bello fic escrito por sus suaves manos... *sonrie extrañamente*
    ¿Desepcionarme? eso jamas, al menos que abandones el fic eso si romperia el kokoro que no tengo (me lo robo una bella loli, no me juzguen XD)
    Mi lady... tu fic es tan bueno.
    El lemon zuculentho
    Necesito una conty pronto... oh me muero
  9. .
    AnYuYo... Debes saber que soy de pocas palabras

    Sinceramente me dejaste sin mas palabras de las que creia.

    Estupendo fic, y usaste a Kaito de padre pedofilo e incestuoso

    Muy bueno en verdad

    ademas de usar una pareja poco o casi desconocida

    Solo dire ahora...

    Dame una continuacion pronto... o morire.
  10. .
    -De pesadillas – complete para recibir de respuesta un almohadón del sillón que impacto contra mi pecho- Ya cálmate Kiyoteru… pero solo una cosa sabes. Si tocas a mi hijo sin su consentimiento, no me importa ninguna excusa… si lo atacas y le haces lo que te haces a los otros niños contra su voluntad te castrare a pisadas con mis pies, hasta fracturarte tu hombría – le amenace, no naci ayer este sujeto ya le hecho los perros a Kaito y cuando este tipo ve a su objetivo no se rinde nunca hasta obtenerlo.

    Nos pusimos borrachos por tanto beber, contándonos uno a uno las cosas que hicimos, estábamos conectados por una gran brecha de amistad. Guardando el secreto del otro, mirando dentro de nuestros ojos los contábamos.

    Cuando ya no pudimos seguir bebiendo nos apoyamos el uno al otro para subir a la habitación de los niños… pero cuando fuimos a verlos, nos sorprendimos.

    -¡Ya sueltalo! – dije azotando su espalda con mi cinturón el cual cuando me iba acercándome me sacaba.

    -Agrr… - se quejo dejándose caer al suelo llorando. No tolero las peleas, Akaito estaba asfixiar a Kaito mientras este pataleaba para tomar aire, que suerte que subí, si ya lo habría matado.

    -G-Gracias… - tosió y tomo bocanadas grandes de aire para levantarse y abrasarme- Tuve miedo de que me separa de tu lado papá. Yo solo quiero que estemos juntos hasta que uno de los muera – dijo aferrándose con sus manos a mis ropas.

    -Bueno pero deja esa obsesión que tienes, para eso vine no te preocupes tu vendrás conmigo cuando m tenga que ir – dije para hacer que me soltara, me encamine hacia a Akaito el cual retrocedió asustado y si que debe estarlo-¿Qué dirás en tu defensa? Cual crees que deba ser tu castigo – dije mirándolo serio, sollozo para pararse y desabotonar uno de los botones de su pijama con sus manos temblorosamente- No lo hagas aquí… - dije con una ceja arqueada.

    -E-Entonces… - tenía tanto miedo que apenas y podía hablar.

    -Ven acompáñame – dije llevándomelo tomado a la fuerza de la mano, los niños se vieron fijamente antes de que los separa.

    Lo tire a la cama de su madre luego de sacarlo de es habitación llevándolo a la otra, me coloque encima suyo para que me viera, no quiso lo tome del mentón y lo forcé a verme a la cara. Puede ser que por tantos moretones en su cuerpo su rostro siga intacto, me canse y lo puse boca abajo y lo tome del cabello, este sollozo y se quedo quieto ya sabe que si se resiste le hidria peor, saque mi navaja y con ella de un solo corte comenzando por el cuello de su pijama fui cortando descendiendo hasta sus glúteos cortando hasta sus pantalones, tenia cuidado de no cortar su delicada piel, este tembló al sentir el ligero rose de la cuchilla surcar su espalda, le retire los trozos de tela de su cuerpo dejándolo desnudo completamente.

    -Ve al armario de tu madre y saca un camisón el mas pequeño que tenga quizás ese sea de tu tamaño – le ordene, este dudo si ir o no pero con verlo obedeció de inmediato.

    -E-Este esta bien – dijo con nervios. Mostro ante mi un camisón de un sutil rosado que le llegaba a cubrir su pies, que dejaba expuesto los hombros, y en la parte superior tenia cuatro botones que cerraban o abrían el sector de los atributos de las mujeres, en el cuello tenia un bordado que terminaba de completar el camisón ¿Kaiko tenia eso?

    -Es perfecto póntelo – le dije ansioso de verlo, con lentitud se lo puso, me sonroje cuando termino de vestirse, lucia completamente perfecto en el, lo hacia ver como si ángel estuviera frente a mi. Me levante y busque entre las cosas que Kaiko tenía y encontré un lazo rojo, lo ate a su cabello para dejarlo como un moño. Este pequeño tenía el rostro completamente enrojecido.

    -E-Esto es muy vergonzoso – dijo viéndome apenado a la cara.

    -No temas pequeño, hare que esta vez los disfrutes – dije con mi embriagante aliento en su cuello, para sujetarlo de la cintura y levantarlo para depositarlo en la cama- Luces hermoso… - dije para desabotonarle sus botones dejando al descubierto su pecho, esos botoncitos rosados que el poseía con tan solo tocarlo con la punta de mis dedos se endurecían, comencé a succionar uno de ellos mientras con mi mano apretaba y jugaba con el otro, este pequeño empezó a gemir dulcemente para mi. Su tersa piel se calentaba con solo sentirme encima de él, intentaba ocultar la sensación de placer que sentía por las atenciones que le daba, mi vista se fijaba a su rostro. Tenia los ojos cerraros y apretaba los labios intentando inútilmente acallar sus bellos y suaves gemidos y alaridos que resonaban en mis oídos.

    -Ngh…mmm – esos gemidos tan ligeros me encantaban.

    Me relamí los labios para descender hasta sus piernas levante un poco ese camisón dejando desnudas sus bellas piernas, las separe y tome una de ellas para lamer la piel de la misma, ascendiendo y descendiendo con mi lengua por sus delgadas y largas piernas que poseía. Dejando chupones y mordidas ligera en ese sector haciendo que Akaito se retorciera de placer.

    -P-Por favor- dije tratando de que dejara su pierna izquierda, me reí para repetir lo mismo con la otra, haciendo el mismo procedimiento haciéndolo sufrir lentamente.

    Se retorcía por miedo o placer no lo se, pero este pequeño ya estaba excitado. Levante el camisón dejando descubierto la parte inferior de su cuerpo, solo lo cubría este camisón… tal vez sea el alcohol pero todo empezó a dar vueltas.

    Me reí y me deje caer encima de su cuerpo, capturando su pequeño cuerpo con el mi. Tenia mucho sueño, demasiado me habré quedado dormido porque no recuerdo nada más…

    (Fin pov Meito)

    (Pov Kaito)

    Este tipo esta completamente ebrio, tocaba mis piernas encima de la tela. Le daba golpes pero seguía insistiendo, capturaba mi cuerpo con el suyo. Impidiéndome escapar, no podía pedir ayuda a nadie… me beso fogosamente pero me deje llevar con el embriagante aroma a sangre que desprendía de su cuerpo, mi sangre corría deprisa por mi cuerpo llegando a mis mejillas. Estaba sonrojado esperando a lo seguía pero el imbécil, cayo dormido a un lado de mi cama.

    -¿P-Por que me calienta si se dormirá? – dije molesto me iba aparar pero este me sujeto de la cadera impidiéndome el que me fuera.

    Maldición como me deje llevar por este sujeto, ahora no podía irme. No me quedo de otra que intentar dormir, pero… ¡¿Cómo se supone si el aliento a alcohol de este tipo daba a mi cuello?! Chasqueo la lengua molesto para verle la cara y tomar una almohada y usarla de barrera, funciono pero este me apretó aun más la cintura apegando mis glúteos a su hombría. Era incomodo yo quedaba en posición de feto cerca suyo, el estaba de lado.

    -Maldito, mañana me las pagaras – me extraño no escuchar los gemidos de gata de mi hermano. Pero conociéndolo se contiene, porque simplemente acepta el lugar que le corresponde, yo tenia suerte ya que tenia la libertad de hacer lo que desease, pero ahora… con la llegaba de este pervertido no se como le hare para no perder mi primera vez. Pero si ocurre, espero que no sea como le paso Akaito… el idiota por resistirse a papá casi se desangra en el suelo.


    Continuara...


    Aqui la imagen del camison que tenia Akaito
    SPOILER (click to view)
    CYb5lTL
  11. .
    -Tenía que hacerlo, después de todo fueron como siete años donde estuvo encerrado sin ninguna compañía - dije para suspirar.

    -Comprendería eso si pudiera, pero a mi me basta con un niño por semana o por mes –miro a Kaito- Escuchaste niñito s este no te estreno yo lo hare – dijo con una cara de perversión, le di un correctivo con un puño en la cabeza- ¡Oye! Idiota por que me golpeaste – se quejo.

    -Mas respeto, al que te insinúas es mi hijo – dije este puso una cara de no creerme.

    -Mientes seguramente – dijo como si fuera broma, yo negué - ¿Es verdad? Este niño... ¿es tu hijo? Ah fue cuando te tiraste a Kaiko, la dejaste embarazada y nació este chiquillo… mmm mira el lado favorable al menos lo supiste antes de intentar violarlo, estarías mas loco si te violaras a tu propio hijo – dijo para estirar los brazos.

    -P-Papá mi torpe hermano esta pidiendo irse a su habitación ¿Le permito eso o quieres que este aquí? – pregunto con obstinación Kaito.

    -Como quieran… ya es tarde duerman por esta noche juntos. La otra cama será usada por mí y mi amigo- dije para verlos subir las escaleras.

    -Que le dijiste a ese chiquillo para tratar de esa forma a su hermano según veo – dijo mirando atentamente las escaleras.

    -Tú sabes las mañas que poseo, le dije todo y me acepto como su padre. Y adivina, mi hijo ya mato a alguien no podría estar mas orgulloso – dije yendo a la cocina y buscar en los escondites donde habías unas botellas de sake de calidad.

    -¿Asesino a alguien? Salió igual de sádico que tú – dije este sonriéndome juguetonamente.

    -Y ¿Ese gato de Luki donde se encuentra? – pregunte sirviéndome un vaso con sake para beberlo.

    -Bajo tres metros de tierra – dijo para que me atragantara un poco.

    -Tsk… ¿Muerto? Pensé que estaba contigo, ya que yo lo rechaze – dije curioso.

    -Ya me tenia arto, no me dejaba traer niños a casa y era muy obstinado a la hora de la relación, un día me canse y le corte la garganta dejando expuestas sus cuerdas bocales le mostré tirando de ellas como las cortaba, se ahogo con su propia sangre – dijo recordando ese momento con una sonrisa- Y apropósito el me quería mas a mi que a tu, comparándome contigo yo soy un príncipe de…

    -De pesadillas – complete para recibir de respuesta un almohadón del sillón que impacto contra mi pecho- Ya cálmate Kiyoteru… pero solo una cosa sabes. Si tocas a mi hijo sin su consentimiento, no me importa ninguna excusa… si lo atacas y le haces lo que te haces a los otros niños contra su voluntad te castrare a pisadas con mis pies, hasta fracturarte tu hombría – le amenace, no naci ayer este sujeto ya le hecho los perros a Kaito y cuando este tipo ve a su objetivo no se rinde nunca hasta obtenerlo.


    Continuara...
  12. .
    Gotas carmesís brotan de la herida cortante que se origino en su mano izquierda con la cual cubrió el ataque de mi primogénito, sonrió satisfecho no le temía a este idiota. Todos los niños que este se habrá tirado en todo este tiempo siempre se mojaban los pantalones cuando lo veían, pero este no. Seguramente al llevar mi sangre no le teme a nada, su objetivo no lo se pero al parecer es el no quedarse solo, es la única conclusión que pudo sacar a relucir ya que por eso termino matando a ese niño hace un año atrás.

    -No creí que lo harías – respondió para intentar darle una patada a Kaito, la cual bloquee con mi pierna, ese imbécil no me importa quien sea pero a mi hijo no lo golpeara para eso me hago cargo yo.

    La habitación se lleno de tensión pero esta se esfumo al escuchar los pasos débiles de Akaito el cual nos miro con más miedo, este intento tocarlo pero antes de que pudiera ponerle un dedo encima lo tome del cuello de la camisa, frente a frente.

    -A el no lo toques, solo yo puedo hacerlo. Si lo intentas otra vez no dudare en matarte- musite molesto por su intromisión.

    -Como digas – suspiro para dejarse caer al sillón con los hombros detrás de su nuca- A todo esto ¿Dónde esta esa mujerzuela? - hablaba de ella.

    -Tú crearas que el celoso de Ted se la llevo de viaje dejando a estos niños solos – el dije para echarme a reír- Y ya que me escape de ese asqueroso basurero decidí venir a esta casa para darle una visita pero ya que ella no estaba… - le sonreía mirando discretamente a Akaito.

    -¿Te violaste a sus hijos? Esta ve te luciste – dijo este sonriéndome como si nada.

    -Solo a uno de ellos – le respondí

    -¿Que? No me digas que solo te aventaste a ese mocoso que esta hay oculto – Dijo señalando a Akaito – No te lograste contener, con tan solo verlo veo que le desgarraste las entrañas – dijo viéndolo un minuto.

    -Tenía que hacerlo, después de todo fueron como siete años donde estuvo encerrado sin ninguna compañía - dije para suspirar.

    Continuara...

    Jajaj tengo algo de inspiracion... poquita
  13. .
    Akaito vino cuando tire de su pierna por la soga que prendía de el, esto lo haría entender que no podía estar lejos de mi, y que cuando tirara de esta el tendría que venir de inmediato si no tu castigo seria severo. Su educación fue dura ya que este siempre se resistía a cooperar.

    Uno de mis favoritos era usar este látigo que empuño con ansias de verte rogar porque no te castigue con el, ver las marcas superficiales cubrirte te llenan de angustia ya que tus esperanzas se extinguen con cada golpe, tus lagrimas bañan dulcemente tus mejillas rojizas por tantos días conmigo.

    Los días con ustedes me dan tanta fatiga, recuerdo que había alguien a quien podía llamar para divertirme un poco como en los antiguos tiempos, según el como yo estábamos locos por vernos nuevamente, la ultima vez que nos vimos fue un día antes de que torturara a Kaiko.
    Siempre a de estar escondido en la casa menos pensada pero nunca cambio su teléfono, le llamo desde esta casa y este contento como asombrado al oír mi voz, noto su sorpresa y le invito a venir con nosotros… faltaban unas horas para que llegara, cuando esa puerta suene el fin de esta tranquilidad terminara.

    Recargado en la ventana veo a esta inmunda gente pasear sin sospechar nada, me escondí cuando una patrulla paso por la calle, tenia a Kaito vigilando a su hermano el cual estaba en un rincón abrasándose a su mismo, mientras trataba de pensar en sus errores, lo golpee demasiado lo admito pero este me había proporcionado una bofetada cuando tocaba sus piernas para entretenerme un poco mientras esperaba.

    -¿Cuándo aprenderás hermano? – dijo con fastidio Kaito al otro, este solo le respondió con una mirada de asco para voltear la mirada.

    -A ese imbécil ya se le hizo tarde – masculle molesto viendo el reloj de la sala.

    Uno de ellos fue a ver quien era esa persona que nos miraba de lejos, una silueta bastante curiosa a mi gusto. Cuando salió yo solo miraba de reojo ya que no podía dejarme ver por nadie, ya que si no seria delatado por completo. Cuando escuche un grito seco este entro rápidamente con Kaito en sus manos, lo cargaba como si de una muñeca se tratase, en cambio mi hijo solo quería que lo soltase. Dejo una maleta en el suelo para acercarse a mí y descubrirse el rostro y el cabello.

    -Sigues siendo igual de presumido que siempre – dije contento para poner mi mano en su hombro.

    -Y tú igual de demente, mírate aquí con los hijos de Kaiko Shion la mujer que te llevo a la cárcel, eres un enfermo – dijo para soltar a Kaito pero con lentitud pasando su mano por toda su espalda hasta terminar dando un ligero apretón con su mano a su trasero.

    -¡N-No me toque! – dijo el niño peli azul en respuesta para sacar de su bolsillo una de las navajas que le regale, mas bien que me pidió que se la obsequie por su cercano cumpleaños o eso fue lo que me creí.

    -Pense que los tenias sumisos a todos, pero te salió uno rebelde según veo – dijo este para acercárselo poniéndose a su altura, tomo la mano de Kaito y ubico el filo de la cuchilla a su rostro- Adelante quiero ver si tienes el valor necesario para atacarme – lo desafío, que idiota resulto ser… aunque no lo crea este niño no era como los demás.

    Continuara...
    ¿Quien creen que es el amigo misterioso?
  14. .
    -Que tonto es – digo algo divertido.

    Destroce todo lo que estaba en mi camino hasta dar en donde el maldito se escondía, cubierto con una camisa larga trataba de alejarse lo que podía ¿pero como hacerlo si esta pegado a la pared? Tus piernas las cuales temblaban abriéndose ante mí por miedo, me dieron una gran vista de tu parte intima, sonreí para ver tu reacción reflejarse en tu mirada. Tus ojos rojizos me observaron pero se cerraron cuando me incline a donde estabas, toque tu cabello para halar de el un poco, para oler tu cabello, este poseía un suave aroma que me atrapaba. Lo agarre del brazo tirando de el obligándolo a pararse, este se quejo y casi se cae al suelo, si no fuera que lo hubiera sujetado se habría caído bruscamente.

    -A-Aléjese - con lagrimas me lo suplicaba, me producía gracia el verlo.

    -No olvides que eres mi pertenencia, tu harás lo que yo te ordene y no puedes hacer nada al respecto – dije para unir su boca a la mía en un beso casto que lo hizo llorar aun mas. Los niños de ahora son unos llorones.

    Días pasaban como las noches donde este niño gritaba perdón por todos sus errores, le enseñaba que conmigo no se jugaba. Cuantas veces intento escapar pero mi hijo lo delataba y lo traía a mi cientos de veces, por su bien y el que su cuerpo dejara de recibir esas marcas de cinturón debía portarse bien, esta noche el no comería. Su comportamiento no era el indicado, lo forcé a quedarse en mi cama no como mi amante si esta vez como si compañía, no lo tocaría ya que estaba demasiado lastimado, lo tome de la cadera y lo apegue a mi cuerpo dándole a entender que no le haría daño, pero este solo lloro pensando lo peor.

    Suspiro para acariciarle el cabello, lo único que hice fue eso me detuve al verlo dormirse después de una hora alrededor, cuando dormía podía ver su mirada tranquila no con miedo como siempre ocurría cuando yo estaba cerca suyo.

    En la casa vecina deje una mascota un tanto fría ya que los muertos no pueden dar calor, mate a su perro luego que este intento atacarme, estos no me conocen y antes que anden de curiosos les deje el mensaje junto con el cuerpo si no esos ancianos morirán en mis manos.

    Al día siguiente en la cocina estaba cocinando el niño de ojos rojos, mientras era vigilado por Kaito quien vigilaba que no le metiera nada a mi comida ya que si no eso lo pagaría con creces. Aburrido fui a la habitación de sus padres, encontré bastantes cosas que me llevaría de aquí cuando me fuera, algunas alhajas de oro y unos relojes de buena calidad todo lo saque de su lugar y me lo guarde en mi maleta.

    Solo falta tiempo para que los días se cumplan y ellos regresaran. Tenía que dejarles un recuerdo mío, pagaran con la sangre de uno de sus hijos pero aun dudo si deberé hacerlo, con llevármelos bastaría para destrozar a Kaiko. Oigo como alguien sube…

    -Quiero morir quizás así pueda verte de nuevo Mikuo – Ese mocoso se atreve a engañarme al pensar en otros, pero nada debo hacer ya que mi hijo se encargo de mandar a ese niño a la tumba. Aunque lo intente no lo permitiré, primero morirá antes de poder conseguir su libertad.

    Hasta el día de su muerte, lo eh decidido este niñato se quedara a mi lado. Incluso conservara ese nombre que posee, ya no lo llamare “niño” pero antes deberé saber como demonios se llama. Si no hubiera olvidado… lo que realmente vine a hacer aquí, era principalmente venir a matar a este niño y dejarle su cuerpo podrido a su maldita madre, pero lo que no me espere que mi corazón fuera cautivado por su aspecto, le arrebate la pureza e inocencia noche tras noche, y llevarme a mi hijo legitimo de este sitio a empezar una nueva vida lejos de este lugar.

    -¿Cuál es su nombre? – tenia a Kaito en mis piernas cuando se lo pregunte mientras observaba a ese niño limpiar los platos como si fuera una esposa.

    -Eh, su nombre - este me miro pero respondió forzado- Es Akaito… así lo llamo mama – ¿con que Akaito no?

    -Me asombra que siendo un niño haga tan bien los quehaceres de la casa – comente algo emocionado con tan solo imaginarlo desnudo y que su cuerpo fuera únicamente cubierto por un delantal que cubriera solamente la parte delantera de su cuerpecito.

    -Nuestra madre siempre le pedía su ayuda, pero a mí nunca me presto de toda atención. Todas las noches era al único que arropaba con cariño, en cambio a mí me arropaba con frialdad. Ahora que te conozco se porque, tu siendo mi padre, ella no podía sentir mas que miedo, por ello la odio ahora quisiera que le dieras una lección… después de todo fue su culpa todo lo que ocurrió- dijo mi ansiosos hijo jugando con una de mis navajas colocándola en las puntas de sus dedos repetidamente, bien como su piel resistía ser atravesada por el filo de la cuchilla que poseía, pero el juego termino cuando empezó a sangrar.

    -Eres un torpe ten mas cuidado – dije viendo su mano tenia cortado uno de sus dedos pero a mi suerte solo fue superficial. Pero este llorón lloraba por su dolor, ya encontré uno de sus defectos.

    Akaito vino cuando tire de su pierna por la soga que prendía de el, esto lo haría entender que no podía estar lejos de mi, y que cuando tirara de esta el tendría que venir de inmediato si no tu castigo seria severo. Su educación fue dura ya que este siempre se resistía a cooperar.


    Continuara...
    aqui actualizando para ustedes mis bellas lectoras...
  15. .
    Estudia, ya se acercan las vacaciones hya todos podremos escribir con libertad, sin la molesta tarea de la escuela

    Esperare con pasiencia.
1364 replies since 21/3/2014
.