Posts written by Misuki Beyond

  1. .
    (Pov Akaito)

    -¡¡Me duele!! – refunfuñe mientras el vendaba mi brazo, no me agradaba que el se tomara esa molestia.

    -Cállate si no hare mas presión – dijo el, pareces bueno unas veces y otras me resultas un ser repugnante.


    -No logro creer que hayas golpeado a Kaito de esa manera – dije recordando su sufrimiento, ver su espalda con aquellas marcas.

    Se me hacia un nudo en la garganta cada vez que lo recuerdo, esos gritos desgarradores, yo no podía ayudarlo ya que mis piernas temblaban y estaban tiesas. Fue el miedo de eso momento lo que me paralizo, nunca mi padre haría eso con el. Con un pañuelo húmedo limpio mis lágrimas para seguir con mi cuello donde había unas cuantas manchas de sangre, fue cuando solté un quejido cuando ese pañuelo llego a mis labios.

    -C-Cuidado por favor – le pedí intentando relajarme para olvidar el dolor de mi brazo.

    -Lo intento Akaito – quede en silencio por que por primera vez me llamaba por mi nombre con una sonrisa puesta en su rostro.

    -Gracias – dije avergonzado al verlo para ver hacia otra parte.


    La habitación de mis padres era un desastre, la ropa de mi madre estaba esparcía por el suelo, y la de mi padre igual. Me puse más rojo cuando recordé lo que traía puesto, este camisón me hacia esta estadía mas vergonzosa.

    -“Madre ¿Dónde estas?” – pienso en silencio dejando que el me abrasara.

    Regresa por favor ya que si no mi hermano y yo terminaremos matándonos, hoy casi lo logra si no fuera por ese niño llamado Rei, cuando lo vi me quede perplejo por sus ojos color ámbar, eran muy lindos.

    -Terminamos – dijo dejando un casto beso en mi vendaje.

    -Se lo agradezco s-señor – dije ya que no se su nombre exactamente.

    -Dime Meito – dijo tomando mi mano y llevándola a su rostro, con gentileza.

    -M-Meito-kun – ¡¿Qué fue eso, por que dije “kun”?!

    -Veo ya me tomaste confianza – dijo para sujetarme del rostro acercándome lentamente a su rostro, estando escasamente a unos pocos centímetros de besarme.

    -¿P-Por que se detuvo? – dije sin saberlo, las palabras escaparon de mi boca.

    -Quiero que esta vez tu tomes la iniciativa – dijo provocando en mi una rara sensación de incomodidad quizás.

    Mi ser entero se movió solo cuando me percate mis labios estaban junto con los suyos. Fue un beso inocente de mi parte…

    Continuara...
    algo corto pero debo volver a foro inazuma eleven otras parejas.
    Me demanda contys haya
  2. .
    -K-Kai…to – dijo para ambos llegar al orgasmo, y terminar el recostado en el sillón solo con una camiseta, yo en su lugar me cerré el cierre de mi pantalón y me fui a la habitación dejándolo hay durmiendo, tenia que ver como se encontraba el otro chiquillo al cual no dejaba de convencer de que se quedara aquí.

    Estos niñitos eran mis prisioneros, o al menos eso creía al ver a Len coquetear con ese mocoso. No podía salir sin que alguien nos viera raramente, son interminables los días que concluyen y no logro apagar esta sensación de incomodidad que siento cada vez que veo a Len o a Piko ¿Qué me ocurre? ¿Es pasión o amor lo que siento por uno de ellos? No puedo sentir lo mismo por ambos, solo uno de ellos me vuelve completamente loco.

    Me fui a dar un paseo en auto con ambos, se habían peleado por el asiento delantero, ganando Piko victorioso se sentó a mi lado, todo transcurrió bien hasta que un hecho lamentable ocurrió.

    La lluvia arruino todo, y los limpiaparabrisas no me dejaban ver nada casi, había locos que iban a velocidad sin importarles nada.

    -Kaito – ignore a Piko quine quería que viera algo.

    -Ahora no Piko, no vez que tengo que estar atento en ver por donde voy– dije mirando bien el camino, las ruedas y el camino estaban patinazos debía ser cuidadoso.

    -Deberíamos detenernos – dijo preocupado Len, le temía a los truenos y ahora había muchos. Ambos estaban en el mismo lugar derecho, ya que no querían separarse ya que tenían mucho miedo.

    Este día era horrible es como si el cielo se hubiera desahogado con nosotros. Enviando mucha lluvia, solo que hubo algo que no llegue a ver a tiempo… y fue el camión que estaba delante nuestro sus cuerdas se aflojaron y dejaron caer un montón de barrotes de hierro al camino, intente esquivarlos como los otros conductores pero no pude ver lo que se avecinaba… una furgoneta impacto contra nosotros del lado derecho del automóvil. Fue tan fuerte el impacto que mi cabeza fue a dar contra el vidrio de mi ventanilla quebrándola con mi cabeza… todo se volvió nubloso luego de eso.

    (Fin pov Kaito)

    (Normal)

    Hoy 25 de septiembre se notificaron la muerte de al menos de seis personas en el accidente automovilístico mas lamentable en Japon este año, a urgencias entraron varias personas.

    Pero en un hospital publico fueron trasladados un joven identificado como Kaito Shion junto con su la persona que lo acompañaba que por el momento estaba estable, lamentablemente se ah dado a informar sobre la muerte de un niño que no supera los 15 años que también iba con ellos… El cuerpo quedo muy dañado ya que al chocar los metales del mismo auto al torcerse capturaron sus piernas rompiéndolas completamente, y su cuello tiene incrustado un barrote de metal que según los peritos se había caído del camión de carga que ocasiono el siniestro.


    Continuara...
    la ultima conty sera el final quizas.
    Pregunta para terminar con este fic tan loco que creo...¿Quien debe morir segun ustedes y quien debe estar asalvo?
  3. .
    Quisiera verte, acariciarte, contemplarte, para besarte… para acompañarte… a que ambos consigamos ser felices en la muerte.

    O cruel destino, ¿por que nos separaste de este modo tan infeliz? Creo que si colocara esta cadena en mi cuello podría asfixiarme rápidamente, deseo continuar apreciándote pero ver tu rostro. No puede moverte ya que no quiero perturbar tu sueño… un montón de luces aparecieron luego seguidas de varios disparos.


    Cuando menos me lo imaginaban unas personas con chalecos antibalas nos socorrieron, rompiendo nuestras ataduras, te midieron el pulso y estabas aun con vida Mikuo. Nuestros salvadores nos llevaron de este lugar, mientras saliamos vi las paredes huellas de sangre fresca, fue hay que los vi. A mi hermano y Meito, sus cuerpos estaban en el suelo desangrándose completamente, estaban muertos. No llore por su muerte, el ya me había lastimado demasiado incluso quiso matarme por eso ya no significa nada para mi.

    Las noches en este lugar donde estábamos, completamente blancos. Un hospital publico, me permitieron estar en la habitación contigo, esperando tu recuperación yo estaba bien a pesar que mis heridas demostraran lo contrario…

    -Mikuo despierta por favor – suplique acariciando tu rostro, te movías un poco dándome felicidad.

    -A-Akai… to – me dejaste ver tus hermosos ojosa acu amarino. Mi corazón se acelero completamente al ver tu sonrisa formarse en tus labios.

    -Aquí estoy, a tu lado – dije tomándote la mano.

    -Me… alegro que estés bien – dijo con una sonrisa tan cálida que mi cuerpo estremeció.

    -No te esfuerzos descansa, aun estas delicado – le regañe al ver que se quiso levantar de su cama, lo tome de los hombros y lo forcé a que se recostada otra vez.

    -Pero yo ya estoy bien, quiero que volvamos juntos a nuestro hogar – dijiste algo intranquilo – Quiero dormir a tu lado de nuevo – dijo el con cariño de verdad.

    Lo abrase trasmitiéndole mis sentimientos con ello… ya no había nada ni nadie que se interponga entre nosotros. Cuando te den de alta nos iremos a nuestro hogar donde seremos felices, muy felices.

    -Te prometo dar todo el amor del mundo, mi dulce Mikuo – le bese mientras mis manos acariciaban sus cabellos, cada particularidad tuya me enloquecía de amor.

    Dejare de sufrir… ya nunca estaremos solos, no me iré de este sitio por que ya eh encontrado mi lugar. En donde te encuentres tu, yo te estaré acompañando, no me importa lo que venga aunque nos cuesta la vida no te causare mas angustias, todos nuestros recuerdos a partir de ahora serán solo bellos recuerdos.

    - Voy a quererte aunque me saquen el corazón – me dijiste con una bella sonrisa para recostarte eh intentar dormir.

    -Descansa, mañana será el comienzo de una nueva historia- le murmure – Una historia que solo nos incluye a los dos, a nadie mas – te dije tomando tu mano para depositar un beso en ella.


    Un año después…

    Parece que fue ayer cuando estuvimos en aquella casa, éramos felices. Parados frente a tu hogar, tenias la idea de contarle a tu padre sobre nuestra relación… parece una persona comprensiva, al comienzo no lo tomo muy bien pero al ver todo el amor que nos teníamos el uno al otro. Nos termino aceptando, le pedí si podía abrasarlo y con titubeo acepto.

    -Padre – dije en forma de afecto para extender mis brazos y abrasarlo.

    -E-Espero que sean felices juntos – dijo algo nervioso, seguro nunca pensó que al abrasar a un hombre seria este el novia de su hijo.

    -Lo seremos se lo prometo – dije soltándolo por el puchero que hizo Mikuo.

    -Quiero un abraso también – dijo mi adorable parejita extendiéndome sus manos, lo tome de la cintura y lo eleve en el cielo dando vueltas, girábamos felices.

    -Todos… todos los que quieras mi dulce Mikuo ¿sabes por que? – dije contento mientras seguíamos dando vueltas en el mismo sitio.

    -Haber dime el porque – me seguía el juego.

    -¡Que el mundo sepa que te amo Mikuo Hatsune! –grite a los cuatro vientos – Eres mi delirio, tu eres lo que mas quiero en esta vida y nadie puede decir lo contrario – dije para dejar de girar dejándote en el suelo, sujeto de la cintura cerca mio.

    -Seré prisionero de tu amor… y tu mi guardián – dije para besarme tímidamente ya que su padre nos miraba junto a su pequeña hermanita que despertó, con una pijama color verde mar nos miraba con alegría. Se para el tiempo, cada momento que puedo ver tu linda cara… Construiremos un gran futuro junto.

    Eres mi delirio, y siempre te haré feliz… ya que sabes que soy capaz de dar la vida por ti.
    Pero había algo que tenia que solucionar antes de comenzar a vivir nuevamente, aunque tú no querías que yo sufriera al venir a este sitio, pero era prisionero de estos secretos que te llevaste a la tumba hermano mayor. Aunque dije que ya no sentía nada por ti, me dolió saber que tu eras quien tanto daño me hizo en este mundo, pero mi madre me hizo jurar que nunca te abandonara, que al ser hermanos debíamos apoyarlos el uno al otro, había echo esa promesa antes de que ella muriera a causas de mi verdadero padre.

    -Espero que donde sea que te encuentres hermano, sepas que no te odio. Para empezar una nueva vida, no puedo guardar rencores… por eso no te abandonare en este sitio cada año te vendré a visitar – dije con algunas lagrimas, mi hermano era toda la familia que tenia en ese entonces.

    -¿Estas bien Akaito? – me pregunto Mikuo a mi lado, el sabia que esto me dolía

    -Lo estoy es solo… que hubiera querido que alguna vez mi hermano me hubiera dicho que me quería - dije melancólico ante las tumba de mi hermano Kaito- Hermano se cuanto te gustaban las rosas por esto te dejo estas en tu tumba, son muestras del afecto que aun tengo por ti, eres mi hermano y nada cambiara eso – dije dejando un ramo con unas cuantas rosas blancas, respire hondo levantándome del suelo para irme se que si continuo aquí será mas doloroso.

    Prisionero estaré mientras no pueda desechar estos sentimientos de odio y rencor sobre aquellos que me hicieron daño, interminables pero lo tengo que olvidar si quiero estar tranquilo Mikuo.

    Por ello a partir de ahora nada ni nadie podrán separarme o ponerse en nuestro camino. Soy un fiel guardián, que cuidara tu corazón, para que esos sentimientos que sientes por mí nunca se desvanezcan y que nuestro amor dure hasta la eternidad.


    Fin


    Llegando al fin, no se que mas podria decir
    Les agradezco por haber leido este fic...
    Nos veremos
  4. .
    Gakupo, Kaito se van a la ·"$"·"·%@ ~
    Pobre Piko TT - TT
    Conty por favor
  5. .
    Fui a visitar a una mujer, decían en este pueblo que era capaz de dar posiciones y lanzar maldiciones a quienes le pidamos, pero el dinero que pedía era mucho. Entre a su tocha mal estructuraba para ver horrorizado como frente a una mujer cortaba lo que parecía ser un jabalí salvaje, con la cuchilla le abrió el pecho y saco su corazón estando vivo… me espanto tanto ver eso que salí esperando a que esa mujer se fuera primero… cuando lo hizo llevo consigo los restos de aquel animal para tirarlos a un costado de un sitio lleno de pastizales secos.

    -E-Esta enferma - dije para ingresar nuevamente a este sitio, había un montón de artefactos extraños.

    -¿A que ah venido el hijo de su alteza a mi humilde morada? – dijo esa mujer de cabellos rosados, en su mesa tenia una calavera humana donde colocaba una vela encendida para alumbrar este sitio.

    -A pedirte tus servicios – dije – Quiero que con estos restos, maldigas al bebe que esta creciendo en el interior de mi hermano – le ordene entregándome este bulto envuelto que contenía los restos descompuestos de lo que alguna vez fue una ser viviente.

    -No me lo creo, esto aun sigue fresco – dijo ella desenvolviendo el paquete sacando un hueso que aun contenía un poco de carne putrefacta, me tape la boca para no vomitar por el dolor - ¿Tu hermano era entonces un doncel? – pronuncio

    -¿Doncel? ¿a que se refiere con esas palabras? – le pregunte

    -En tu hermano alguna vez ¿notaste una especie de mancha rojiza en la zona de la espalda o caderas? – pregunto, ahora que lo recuerdo cuando niños jugando le vi una especie de mancha según mis padre era de nacimiento. Asentí con la cabeza- Me lo imaginaba… con el ya son seis los hombres que en esta región puede dar a luz a un bebe – dijo asombrada tocando con sus manos en esos restos, buscando algo en ellos.

    -Aun no me ah explicado nada – dije molesto.

    -Ah, seré breve niño. Un doncel es un joven muchacho que al momento de su nacimiento, nace con una mancha que esta ubicado en su cuerpo, ya sea la espalda o caderas… así se los puede identificar, su particularidad es que ellos pueden dar a luz a un bebe saludable o no depende del cuidado que ellos lleven – dijo para verme fijamente.

    -¿Que? –

    -Con solo verte tu no puedes tener ningún bebe, tu interior esta vacio completamente – dijo ella para dejar de verme.

    -¡¿Eh?! -Dije sosteniéndome el estomago.

    -Lo que tienes hay no es nada mas que una ilusión propuesta de tu deseos, estas dispuesto a destruir a cualquiera por solo tener lo que tu egoísta corazón desea – susurro para sacar un pequeño de esos huesos para colocarlo en sus manos juntas, apegadas a su rostro como si estuviera orando. Pero no se veía así, decía un montón de palabras desconocidas.

    No me importa que ah dicho, yo se en mi interior yacía mi hijo… ella me pidió además un poco del cabello de mi hermano, con suerte logre obtener unos cuantos cabellos de que se habría cortado el día del compromiso, como si presentía que un día me podrían ser útil.

    Así fue que en ese momento vi como esos restos eran calcinados, sobrino perdón. Pero no lamento esto, solo por destruir a tu progenitor me daré por servido. Deje todo listo antes de irme, la tierra desenterrada en ese templo, y esas flores las pisotee antes de irme con tu cuerpo descompuesto. Seguro eso enloquecerá a mi hermano, tenia que hacer que el supiera la frustración que tenia… odiaba a mi hermano mi mayor deseo era que el desapareciera para yo poder ocupar su lugar. Un lugar que me correspondía por derecho, yo también era hijo de nuestro padre ¿Qué te hace especial hermano? Quisiera descubrirlo.

    Antes de irme de esta sucia choza esa mujer me entrego una especie de infusión, era según ella algo que me ayudaría para conquistar el corazón de cualquiera, contento por ello me fui contento de ese sitio… esperando por tu muerte hermano.

    -Oíste pequeño pronto papa estará solo con nosotros – dije alegre caminando rumbo al palacio cubierto por una capucha. Nadie podía saber que estuve aquí.

    Las flores poco a poco fueron muriendo… como mi hermano que lentamente agonizaba rumbo iba pasando el tiempo. Su cuerpo se debilitaba y veía a Meito preocupado por el, no me importaba podía despedirte solo por esta vez. Lo que me enojo fue que tu bebe fue creciendo mientras que el mío seguía igual… no mostraba signos yo de que mi hijo creciera, me frustraba la idea de que no estuviera pero en mi ser siento que si esta dentro mío, solo duerme. Descansa por su bien.

    -Meito, acepte este te – le dije ofreciéndole esta infusión que se me fue otorgada por esa mujer.

    -No, es mejor que se la de a su padre – me rechazo otra vez, tenia rabia que no quisiera aceptar nada de lo que le ofrecía.

    -Se lo pido por favor, por esta tómelo – dije sonriéndole cálidamente para poner una de manos sobre mis piernas, había abierto la parte inferior de mi kimono para dejarlo ver un poco mis piernas sin parecer atrevido a sus ojos… pero no lo tomo igual.

    -De acuerdo pero solo por esta vez – dijo accediendo, contemplarte beberlo era un deleite.

    -¿Qué le pareció? – dije para verlo dejar caer la taza al suelo, junto con su cuerpo- ¡¿Meito que tienes?!

    -Nada solo quiero descansar un poco, me siento cansado –dijo para recostarse en el suelo, me acosté a su lado, apegándome a el. Esta vez no se alejo, solo me observo curioso por unos escasos segundos para propinarme un casto beso en los labios.

    Todo había dado un giro inesperado con la muerte de mi padre, la casa se puso de luto pero nadie nunca supo como murió. Solo enterramos su cuerpo por ordenes estrictas de Meito… esa día finge llorar para ocultar esta risa incontable que tenia en mi interior, no esperamos que ese pútrido bebe naciera. Tuvo todo lo que soñaba, los cabellos y los ojos de mi amado Meito, lo único malo de el fue que en sus venas circulaba la sangre de mi hermano. Aunque duela lo que duela, esta guerra la ganare yo… Solo era cuestión de esperar.

    -Con mi hermano delicado será fácil terminar con el - dije sosteniendo en mis manos a mi sobrino… - Si tu no me causas problemas te dejare vivir conmigo, tu seras mi hijo – el solo tocar sus cabellos tan frágiles sentía una cálida sensación recorrer mis dedos.

    Al final esa mujer no cumplió con la parte del trato…


    Continuara...
    Ya casi termino ¿o más largo este fic?
  6. .
    Por favor continua pronto...
    Muero por saber como sigue
  7. .
    ¿Un dibujo? que tierna eres... quisiera verlo cuando lo hagas
    Y sobre los problemas de inspiración... no es eso realidad si por el tiempo...
    Si necesito consejos o ayuda te la pedire con gusto :=WIJIS:
  8. .
    -Rei no me temas, no debes hacerlo – lo tome a la fuerza de los hombros haciéndolo verme forzadamente -¡Tu debes aceptarme! ¡Deber es estar conmigo! No me hagas lastimarte, porque si no me dejaras otra alternativa – dije fríamente.

    Su rechazo me hería el orgullo, mas fue cuando mi padre rompió a patadas esta puerta junto con Kiyoteru, para ver el desastre que había ocasionado. Vi en su mano un látigo con el cual me azoto la mejilla cuando me tuvo cerca de él, caí al suelo por ello sujetando con mi mano mi mejilla intentaba contener este llanto… no debía verme débil frente a mi padre. Al volver a ponerme de pie me tomo de la camiseta para tirarme al suelo de golpe, le ordeno a Kiyoteru que me la quitara, y como este no lo hizo, el fue quien lo hizo.

    Ya imaginaba que iba a hacerme, la única gentileza que me hizo Kiyoteru fue ponerme un trozo de tela de mi camiseta la cual rompió en mi boca, cuando mire al frente de la pared. No debo verlo, colocando ambas de misa manos detrás de mi nuca, de rodillas firmemente espere a que comenzara.

    -Este castigo te lo tienes más que merecido… prepárate - profirió mi padre, remangándose las mangas lo veo por el reflejo del espejo.

    Con todo su enojo azotaba sin clemencia mi espalda, esos gritos que se oían eran míos. Odiaba estar en presencia de ellos, que en el fondo de esas miradas de pena o angustia se veía que lo disfrutaban, incluso de mi frente salía gotas de sangre que se deslizaban a mi rostro, por un golpe fallido por su enojo fue a dar directo al lado izquierdo de mi cabeza. Dolores agudos invadían mi ser entero, mordía con fuerza esta tela que por la el dolor empezaba a humedecerse por mi saliva, sentía que se me rompería la quijada por la fuerza. De mis ojos se acumulaban incontables lágrimas… D-Detente quisiera poder decirle a mi padre, sentía como mi piel se ensangrentaba por la cantidad de azotes que me proporciono.

    -Mmm… ghn – solo intentaba contener estos gritos, gritaba y lloraba por dentro.

    -¡Ya detente! – cuando me atreví a verle a la cara, vi a Kiyoteru que sujetaba la mano de mi padre con fuerza, me deje caer a suelo para intentar ponerme de pie inútilmente.

    -A mi hijo sabré como educarlo… ¡¡No te metas!! – antes de poder golpearme otra vez le detuvo de nuevo.

    -Mejor será que te ocupes de tu juguete, yo me hare cargo de los míos – dijo el mirándome.

    -Tsk… - mi padre tiro al suelo ese látigo y tomo en sus brazos a Akaito para llevárselo a otra habitación.

    Cuando se fue deje que mis lágrimas salieran sin control, cuando intentaba tocarme la espalda o siquiera moverme el dolor que sentía era muy fuerte… ¿Para que me sirve llorar? Este dolor no se sanara con ello, con furia seque mis lagrimas.

    -Deja que te ayudare - dijo el para ayudarme a pararme, me hubiese negado pero tenia que moverme a un lugar mas suave, sentía como sume fuera a morir si seguía de esta forma.

    -G-Gracias por haberme defendido – dije penoso al sentir sus brazos rodearme dándome algo de calor, a mi cuerpo frio.

    -Yo te curare estas heridas, deben dolerte mucho – me puso boca abajo en la cama.

    -K-Kaito – vi a Rei acercarse a mí lentamente. Lo notaba muy preocupado, con timidez tomo mi mano para tocar mi cabello para manchar sus delicados dedos con mi sangre, le sonreí para quedarme inconsciente… todo se obscureció.


    Continuara...
  9. .
    Dioh... necesito conty
    Es demasiado bueno para quedarse hay *-*
  10. .
    (Pov Meito)

    -¡¿Qué te ocurre?! Kaito responde – te desmayaste, sujetándote del rostro te daba leves golpes con mis manos intentando que despiertes.

    Pero no lo hiciste… mi familia llamo a mi primo Kiyoteru que era medico para que te revisara, este te vio y nos ordeno llevarte a una habitación… elegí la que era ahora nuestra habitación principal en esta casa. Dentro de ella pidió un montón de cosas, tenias fiebre y te costaba respirar… no me gustaba verte de esa manera.

    Fue cuando tu hermano menor apareció frente a nosotros, no disimulaba su alegría al verte sufrir.

    -Pobre de mi hermano – dijo con una sonrisa lo tome del cuello arrinconándolo a la pared- ¿Por que me tratas así? – dijo dolido observándome con tristeza

    -¡¿Qué le hiciste a Kaito?! – le exigía respuestas a este maldito enfermo.

    -Como tu ya sabias, mi hermano nunca te quiso simplemente quise ayudarlo a ser libre… - le di un puñetazo directo al rostro, este cayo al suelo poniendo una de sus manos en su mejilla-¡Te dije que tu te casarías conmigo! ¡Si yo no iba tenerte menos el! – gritaba incoherencias, si no fuera por las personas que me sujetaron lo hubiera matado en ese preciso instante.

    -¡Escucha maldito mocoso si por tu culpa Kaito se muere, juro que te matare! – dije furioso haciendo que me soltaran.

    Me obligaron a tranquilizarme, esperaba a que mi primo me diera noticias pero las que me dio me dejaron bastante sorprendido. Solo le agradecí a los dioses de que tu vida no estuviera realmente en peligro… pero tu hermano estaba aun mas sorprendido.

    -G-Gaku…po – en tus sueños dijiste su nombre, no sentiría celos por los muertos, ya que el otro ya no esta mientras yo te tenia a mi lado.

    Estábamos solos ahora, me recosté a tu lado haciéndote compañía mi tierno Kaito, me daba risa tu hermano solo por que deje que mis instintos lo tomaran esa noche donde tú no te encontrabas, deje que mi cuerpo mandara sobre mi mente… fue así que tome a tu hermanito en la antigua habitación, solo que eso nunca lo sabrás y si lo sabes no podrás hacer nada ya que estas casado conmigo ahora… y que en estos instantes en tu interior crecía mi primer hijo… tu estabas débil eso lo comprendo siendo tu primer hijo debe ser muy difícil, por eso esta noche solo te bese la frente y me dispuse a dormir.

    -Valió todo lo que ocasione para ahora poder tenerte a mi lado – te dije para besarte por escasos segundos.

    Tus mejillas sonrojadas por la fiebre que poco a poco empezaba a desaparecer… te hacían ver tan inocente… en unos cuantos meses un hijo nuestro ibas a dar a luz. Nada importaba que ahora tomar esta casa ser los mandatarios de nuestras familias… pero ahora el estorbo mayor seria tu hermano Akaito, sospecho que el tuvo que ver en que tu te pusieras mal ¿Hacerlo por que? ¿Por mí? Es tan patético que lo haya intentado siquiera… ya que aunque no estuvieras tu Kaito, no deseaba casarme con ese intolerable mocoso pero tendría que hacerlo de todas formas… solo para así lograr ser el líder de mi familia. Además el no podía darme ningún hijo, a diferencia de ti que si podías.

    No lo negare esa noche el aroma que provenía de su piel, fue cautivante. La piel que poseía era totalmente virgen, ocasionándome el deber de tocarla sin remedio. Acariciando cada rincón de su cuerpo, tomándolo completamente. Sin testigos de lo ocurrido, poseí en cuerpo y alma a tu hermano menor. Pero solo por que mi cuerpo sucumbía al placer de tener a alguien en mi cama esa noche, nunca fue por amor. Solo un leve afecto quizás, ya que se que este esta enamorado de mi persona, lo se por que era evidente la envidia que se notaba al vernos juntos.

    Aun recuerdo cuando enfrente a Kaito le cortaron la cabeza a ese sucio sirviente, ¿este creía que podría escaparse y huir de mí? Hubiera querido que simplemente se disculpara conmigo, que suplicara a mis pies clemencia para así salvar la vida de quien tanto quería… pero no lo hizo por ello mismo convencí a mi futuro suegro que lo decapitara delante de sus ojos, eso le daría la lección de su vida.

    -Tu desde ahora solo me obedecerás a mi – te susurre a tu oído.

    (Fin Pov Meito)

    (Pov Akaito)

    -¡Maldito por que no se muere! ¡Lo odio, bastardo! – gritaba una y otra vez mientras lloraba en mi habitación. Con mis manos sangrantes iba rompiendo todo lo que encontraba en mi camino.

    Lo Odio… este maldito día se casaron, ellos se habían casado oficialmente en el templo de la deidad del agua, deteste al verlo aparecer en ese sitio. Se suponía que en ese instante el estaría muerto, que el veneno acabaría con su vida… ¡¿Entonces por que seguía vivo?! Bastardo, maldito seas hermano, escuchar el “acepto” de tus labios fue la gota que rebalso esta taza de sake, me observo mis manos de las cuales salían hilos color carmesí.

    -T-Tu y el maldito bebe que guardas en tu interior, morirán para que yo pueda casarme con quien yo deseo – decidí observando finamente la luna- Con estas mismas manos, seré yo quien te de muerte hermano… así podrás irte con Gakupo, será por tu bien se que lo comprenderás – dije sabiendo que le haría un favor a mi hermano.

    Comprender o justificar mis actos o son posibles, mas aun cuando luego de que se cumplieran cuatro días en recuperación mi hermano logro pararse de nuevo. Lo cuidabas Meito con tanto empeño, secando sus lágrimas de felicidad o tristeza con las mangas de tu ropa… el no dejaba de fingir.

    El me olvido, yo aun lo recuerdo ahora. Era como una primavera, sus cabellos los cuales danzaban en el aire cuando los tocaba la brisa de la mañana… odiaba no poder ser yo quien frente a nuestras familias se demostraran como una feliz pareja.

    Mi madre apoyaba con firmeza a mi hermano, en cambio a mi me pedía que cuidara de mi padre que se encontraba enfermo, de mala gana lo hacia. Con la edad que poseían ellos pronto quizás no puedan ni caminar con libertad.

    -Sírveme un poco de té – ordenaba mi padre recostado en su cama.

    -Como ordene, padre – dije con respeto… el color de este té era algo especial.

    -¿No te veo feliz? - ¿y eso?

    -¿A que viene su pregunta padre? – le cuestione curioso para entregarle en su mano la taza de té.

    -Tu hermano tendrá un bebe, se supone por ser tu el menor que serias el mas emocionado – dijo algo contento por esa noticia.

    -No daré comentario alguno sobre eso – dije para irme dejando a mi padre bebiendo ese té desconocido… yo solo lo recibí de las sirvientas.

    Fui a visitar a una mujer, decían en este pueblo que era capaz de dar posiciones y lanzar maldiciones a quienes le pidamos, pero el dinero que pedía era mucho. Entre a su tocha mal estructuraba para ver horrorizado como frente a una mujer cortaba lo que parecía ser un jabalí salvaje, con la cuchilla le abrió el pecho y saco su corazón estando vivo… me espanto tanto ver eso que salí esperando a que esa mujer se fuera primero… cuando lo hizo llevo consigo los restos de aquel animal para tirarlos a un costado de un sitio lleno de pastizales secos.


    Continuara...
  11. .
    Perdóname hermano, pero tu no te casaras con el… camino sobre fuego, el cual será mi castigo cuando todo esto llegue a su final.

    (Fin pov Akaito)

    (Pov Kaito)

    Cada vez que veo a mi hermano menor me da pena, pero esto lo hago para cobrar venganza por la muerte de Gakupo, caminaba sobre hielo delgado si me negaba a conciliar este matrimonio, me veo en los espejos que sostenían los sastres de la familia, arreglando cada detalle de este pútrido kimono.

    Odiaba a Meito ya que por su culpa causo la destrucción de mi vida. Por su insistencia al quererme a mi como su pareja, omitiendo mis sentimientos. Puso al descubierto a Gakupo, llevándolo a la muerte.

    Quise morir junto con el ese día, pero esos bastardos lo mataron... lo asesinaron frente a mis ojos, en rodillas le cortaron la cabeza para tirar su cuerpo a una fosa común lo se por las habladurías de los sirvientes que me lo contaron todo. Estaba muerto en vida escondido en mi habitación, no quería salir… guardaba absoluto silencio recordando esos bellos momentos a su lado, antes de que nos descubrieran pensábamos huir juntos. A algún lugar donde podíamos ser felices juntos, pero mi sueño se volvió pesadilla cuando todo fue descubierto y nos separaron para siempre.

    Fue el filo de esta katana que sostengo en mis manos, con el que le arrebataron la vida a Gakupo. Con esta arma que el mismo me fue enseñando a manejar luchando contra mi, a lo largo de mi vida, era mi amigo a pesar de ser hijo de una sirvienta supo verme como algo diferente que el hijo del dueño de este gran palacio… nuestro amor era puro y sincero.

    Amor deseo verte de nuevo si es que nuestras almas se reúnen en el otro mundo… perdóname que sea débil al no poder haber dado a luz a este pequeño que por mi pena y dolor fue pereciendo en mi interior, nadie supo que tu fuiste mi primera vez… y que de ello una vida se había formado pero murió dentro mío y su nacer fue doloroso para mi, solo estaba cuando su cuerpecito lo cubría una manta blanca, enrollando su cuerpo completamente y bese la frente de mi pobre hijo. Perdóname hijo pero nadie debe saber de ti, ni de tu nacimiento si quiera es por ello que te entierro a los pies de este templo que era el mas alejado de nuestra casa, pidiendo perdón a mis ancestros por mis pecados, aun con sangre que mancho la sabana con lo que lo enrolle. Mis piernas aun tenían rastros de sangre incluso mis uñas con la que escave tu tumba hijo mío, sangraron por esto igual. Enterré a mi hijo en este sitio sin decírselo a nadie, pero cada mes dejo una flor de sakura en su pequeña tumba. Para que sepa el que nunca lo olvide, ni a su padre.

    -Perdóname – digo llorando sin consuelo a los pies de este templo… con mis lagrimas humedecía el suelo donde yacía enterrado mi bebe.

    Las personas de este palacio iban preparando todo… solo faltaban dos días. Para que pudiera ser el dueño de esta casa, mi padre pagara todo este dolor que por su culpa me otorgo. Por lo que perdí… pagaran caro todos en esta casa, Akaito hermanito no me odies se que tu quieres a este bastardo. Pero me aguanto las ganas de vomitar cada vez que el me toca, pero te alejo de el para que no caigas en sus garras… no quiero que te veas involucrado en esta situación.

    Tu serás la única persona a la cual no le haría nada, los demás pagaran con sangre sus errores. Seré el dueño cuando mi padre y mi pareja murieran, aunque lo de mi padre seria fácil pero antes de eso debía casarme.

    -Vengare tu muerte Gakupo – dije sosteniendo mi katana, limpiando su filo. Deseaba que esta lluvia limpiara mi alma, se que no es posible pero deseaba que esta lluvia consoladora calmara mis fantasmas.

    Todo mi cuerpo se mojo a causa de esta lluvia repentina, me fui de el templo y regrese a esa casa. Casi todo estaba listo, fue hay cuando lo vi viendo a mi hermanito. Y este sonrojado le sonreía, me enoje bastante al ver a ese perro ver si quiera a mi hermano.

    Corrí a su lado y lo tome del mentón proporcionándole un beso en los labios, tenia que alejar a mi hermano menor de el.

    -Mañana tu y yo seremos una feliz pareja - dije fingiendo alegría aunque en el fondo deseaba morir antes de casarme con el. Odiaba a este tipo con toda mi alma.

    -Es lo que mas deseo – susurro a mi oído para besar mi cuello, imaginaba que era Gakupo para no vomitar. Este tipo solo me hacia sentir asco.

    Hermanito se que tu nos viste ese día, aquel donde mi largo cabello lo corte ya que solo Gakupo podría apreciarlo, note que nos veías. Nos espiaste y yo fingía ante ti que lo que este tipo me hacia yo lo disfrutaba, pero no notaste que mis lagrimas no eran de felicidad o placer si no que eran de asco. De dolor al tenerme que entregar a este sujeto por obligación ese día del compromiso. Lo hice por que sabia que me buscarías Akaito, por ello lo hice para que vieras con tus propios ojos que debías olvidar a este sujeto tan miserable. La única cosa que me hizo casarse fue el salvarte hermanito, cuando pensaba morir en mi habitación, escuche de que tu estabas en la ceremonia de compromiso… no podía permitir que tu ocuparas mi lugar, al casarte tu vida estaría atada a un bastardo egoísta. Incluso serias el que mandaras en esta casa eso también influyo para que me apareciera en esa ceremonia para detener tu compromiso, yo tome mi castigo aceptando esa boda absurda.

    Akaito este día quizás no soportes el llorar, pero nada podía hacer. Seres miserables merecían morir, coloque oculto un puñal atado a una de mis piernas. Antes de que me pusiera ese kimono tradicional, el día había llegado. El jardín lucia deslumbrante, las luces del sol daban un gran brillo al roció de las plantas al amanecer.

    El viento que fluía hacía danzar mis cabellos con su suave brisa, en mi rostro se formo una sonrisa al creer ver a Gakupo en el jardín saludándome como solía hacerlo. Luego esa sonrisa se esfumo y de mis ojos brotaron sin consuelo varias lágrimas, lo se que no lo quieres creer se que estas enamorado y es difícil entender Akaito, pero la persona que tu amas me lo arrebato todo a mi ¿Por que? Solo por que el quería estar conmigo, antes de estar contigo… antes de estar contigo hermanito.

    En mi habitación encontré en el suelo una taza de té de sakura, su aroma me gusto bastante… me relajaba siempre tomar un te de esa clase. Cuando estaba posando mis labios en el borde la taza algo de mi habitación se cayo sin motivo, cuando vi lo que era, se trataba de la katana que estaba apoyaba en la pared de mi habitación ¿Por qué se cayo? No habia viento ni ningún moviendo que lo ocasionara. Deje esta taza de te en el suelo y fui a ver la razón de su caída, no note nada raro… cuando volví me maree fuertemente y casi me caigo, mis piernas flaquearon por unos instantes y casi caigo al suelo, tire por accidente esa deliciosa taza que contenía ese té que tanto me gustaba.

    -Ah, pero que lastima… eso quizás me habría relajado un poco – era una pena desperdiciar tan buen té en esta época.

    Estoy arrepentido al estar en frente de estas personas saludándome para felicitarme por esta boda, ya no quiero mentiras. Déjame tranquilo ya mataste los sueños de mi alma perdida ¡Basta! ¡Ya no quiero escucharte! Deseaba gritarte cuando me tomaste de la cintura en la mesa principal, luego de la ceremonia de casamiento seguía esta absurda reunión en mi casa… para recibir las felicitaciones de nuestros familiares, a quien no vi fue a mi hermano. Lo busque con la mirada pero no halle en ningún lado… me sentía mal, le pedí a Meito que nos fuéramos pero no me escucho.

    -V-Vámonos a la habitación – dije sujetándome el estomago.

    -Espera un poco, seria una descortesía dejar solos a nuestros invitados – dijo el bebiendo otra taza de sake en forma de brindis con los invitados.

    -N-No estoy b… -

    No se lo que ocurrió pero mi vista de pronto se oscureció y mi cuerpo se paralizo cayendo al suelo desmayado…

    (Fin pov Kaito)

    (Pov Meito)

    -¡¿Qué te ocurre?! Kaito responde – te desmayaste, sujetándote del rostro te daba leves golpes con mis manos intentando que despiertes.

    Pero no lo hiciste… mi familia llamo a mi primo Kiyoteru que era medico para que te revisara, este te vio y nos ordeno llevarte a una habitación… elegí la que era ahora nuestra habitación principal en esta casa. Dentro de ella pidió un montón de cosas, tenias fiebre y te costaba respirar… no me gustaba verte de esa manera.

    Fue cuando tu hermano menor apareció frente a nosotros, no disimulaba su alegría al verte sufrir.

    -Pobre de mi hermano – dijo con una sonrisa lo tome del cuello arrinconándolo a la pared- ¿Por que me tratas así? – dijo dolido observándome con tristeza

    -¡¿Qué le hiciste a Kaito?! – le exigía respuestas a este maldito enfermo.

    -Como tu ya sabias, mi hermano nunca te quiso simplemente quise ayudarlo a ser libre… - le di un puñetazo directo al rostro, este cayo al suelo poniendo una de sus manos en su mejilla-¡Te dije que tu te casarías conmigo! ¡Si yo no iba tenerte menos el! – gritaba incoherencias, si no fuera por las personas que me sujetaron lo hubiera matado en ese preciso instante.


    Continuara...
  12. .
    Termine yéndome al parque al ver a los niños pequeños jugar con los suyos, uno de ellos me vio y se acerco a mi para sujetarme la cola, me dolió pero no podía hacer nada era solo un humano de poco tiempo de vida. Al aparecer su madre lo obligo a que me soltara, un poco aliviado me fui a ver que podía encontrar para beber o comer, tenia algo de hambre lo eh de admitir, fue hay cuando una niñita tiro por accidente su pote de leche al suelo derramándola, aproveche y yo la termine tomando. Cuando termine de tomar eso, me marche a los basureros y me encontré a… Afuro, otro gato callejero como yo.

    -¿Fubuki? - al no responder el salto hacia a mi de un brinco.

    -Ya, quítate – le exigía molesto.

    -No quiero – este mordió mi oreja haciéndome gemir levemente por que esas zonas eran muy sensibles.

    -¡Que basta! – con fuerza con mis patas traseras lo aparte de mi.

    -Oye cálmate – dijo para rodearme con su caminar.

    -Sabes que no me caes bien – le recrimine

    -¿Y? – me dijo para bufar molesto, para yo tomar mi forma humana.

    Ya estaba aprendiendo a controlar esta transformación, este me miro como si nada para apretar sus uñas con una sonrisa.

    -¿Qué ocurre? – le pregunte para ver mi herida sangrar levemente.

    -¿Kageyama te recluto verdad? –Pregunto para cerrar sus ojos y yo como único testigo vi como su cuerpo felino se transformaba en el de un joven de piel pálida y cabello largo hasta la cintura de color rubio, y lo que mas destacaba de el fueron sus penetrantes ojos de color carmesí.

    -¿Q-Que? – No sabía que decir o pensar - ¡Cúbrete pervertido! – me cubrí los ojos para no verlo mas.

    -Oye si el cuerpo de un hombre es hermoso, para que ocultarlo del mundo -dijo con soberbia notable en su voz moviendo su cabello, en cambio yo logre encontrar una sudadera bastante grande en un tendedero y la tome para mí, tenía cubrirme con algo.

    Me aleje del cuando quiso abrasarme con esa mirada tan lasciva que tenia, corría lo mas lejos que podía, con la rapidez que me daban las piernas pero cada vez que volteaba ese tipo estaba atrás mío. Creo perderlo al llegar a una casa bastante grande, hay unos hombres me obligaron a entrar a la casa… no quería que ellos me tocaran si quiera pero cuando mis manos al intentar que ellos me soltaran, rasguñaron el rostro de uno de ellos provocando que me soltaran.

    -¡No dejen que escape! – grito al que herí por accidente.

    -Si señor – dijeron para rodearme.

    Pero aquel día, no logre librarme de estas cadenas… ellos me terminando sometiendo y me forzaron a entrar a esta casa. Había un montón de artefactos donde me encontraba, vi a muchas demás personas aquí, a mi lado tenia un compañero de celdas, solo nos dividía unos barrotes. Su nombre era Endo, era muy simpático cuando yo empezaba a llorar el intentaba y lograba hacerme sonreír por sus palabras, se volvió mi amigo en mi estadía en este lugar.


    -Fubuki, ya veras algún día podremos irnos – dijo el alcanzándome su mano atravesando estos barrotes para tomar la mía, el me sonría siempre que me hablaba a pesar que también el al igual que yo teníamos miedo.

    -Eso espero Endo, que estas personas nos suelten – dije mientras que una de mis lagrimas bajaba por mi mejilla.

    -No debes llorar, me duele verte llorar – dije acariciando con su mano mi rostro, a pesar de que este lugar sea algo frio, la mano de el sobre mi rostro era tan calida.

    No muy lejos hay un joven de cabello gris, al cual era a quien mas vigilaban con esmero. Cada vez que el movía estos sujetos lo miraban anotando todos sus movimientos, este se reía levemente, para morderse las manos hasta hacerme heridas leves de las cuales la sangre de su cuerpo brotaba.


    Continuara...
  13. .
    Mmm... no importa que no haya comentario alguno por el momento. debo terminar este fic rapido y continuar con los demas proyectos...

    ----------------------
    -M-Meito… aahg… te amo – dije a su oído para terminar llegando al orgasmo perfecto otra vez, mi cuerpo estaba débil y muy sensible cuando termino usted viniéndose dentro de mi nuevamente, sentía su esencia cálida en mi interior. Me estremecí bastante cuando salió, me hizo tanta falta que si no fuera por la hora, podríamos continuar- Contenme presiento que no podre caminar- le hice entender cuando estire mis manos delante suyo.

    Me cubrió con mi kimono, cerrándolo completamente y me cargo en sus brazos como siempre soñé. Llevándome a mis habitaciones, estaba feliz tan feliz por que esa noche clandestina fuimos amantes, tu no querías decir nada.

    Pero seguro harás todo lo posible por que tu prometió sea otro, ni nada menos que yo. Dejaras a mi Hermano Kaito, estoy seguro. Yo era mas joven, a demás te entregue mi primera vez, no como el. Mi hermano se había involucrado en el pasado con uno de los sirvientes, aun lo recuerdo Gakupo. Nuestro padre cuando lo supo lo mando a decapitar y todo ocurrió frente a mi hermano lo hizo para castigarlo. Fue demasiado cruel a mi parecer, ya que ese día vi llorar por primera vez a mi hermano hasta caer desmayo, ya que Kaito tenia la obligación que contraer nupcias con mi amado Meito… mi padre no iba a permitir que mi hermano fuera un desertor rompiendo el acuerdo de paz que se formaría si ambas familias se vinculaban.

    Si hubiera sido un poco mas grande para ese entonces, quizás yo seria tu prometido y no me hermano. Pero al menos pude esta vez dormir entre tus brazos, más bien entre las sabanas de tu cama. Donde antes mi hermano y tú se volvían uno, ya no lo envidio ya que yo también recibí tu amor. Y lo mejor, es que en pocos días se efectuaría la noche de compromiso. Ese día quiero estar presente cuando tú en vez de ponerle el anillo a mi hermano me lo coloques a mí, frente a todos los presentes. Era mi anhelo llegar a ser la esposa de Meito-kun, las luces espectrales sucumbían estos cielos.

    Solo en mi habitación tocando mi cuerpo con mis manos recordaba tus manos sobre mi piel. Mi hermano al volver tenía un semblante bastante relajado, ya que mi padre estaba herido. Fui yo el primero en socorrerlo, a mi suerte no era nada grave… lo cual deprimió a mi hermano. Cure sus heridas para hacerle ver a mi padre que yo tenia mas capacidades que mi hermano, con sumo cuidado vende el brazo de mi padre con una sonrisa… pero en el fondo de mi ser hubiera deseado que se muriera por haberte entregado a ti Meito a mi hermano mayor y no a mi persona.

    -Te lo agradezco – dijo mi padre recostándose en su futon en el suelo… le saque la almohada para esponjarla un poco con mis manos.

    -Padre ¿recuerda lo que le propuse hace algunos dias? – le dije contento esperaba que esta vez aceptara- Sobre que fuera yo quien se desposara con Meito, para que mi hermano no tuviera que estar a su lado obligado – recuérdalo padre, tu mas que nadie sabia de mi amor por el.

    -Lo diré por última vez, eso no puede ser posible. Tu hermano es quien debe contraer esas nupcias lo más antes posible, mira como estoy por estos guerrilleros que amenazan nuestra casa. Este palacio que tantas generaciones les costo construir a nuestra familia, lo siento Akaito pero mientras Kaito sea mi hijo mayor el es quien deberá unificar a nuestra familia con los Sakine – dijo mi padre para respirar profundamente.

    -P-Pero padre yo… -

    -Esa es mi última palabra, no lo permitiré. Tu deber como mi hijo menor es cuidar de mí y de tu madre hasta que nosotros fallezcamos. Tu hermano gracias a la bendición de nuestras deidades puede concebir hijos, lo cual tú dudo que logres hacerlo – mi padre cerro los ojos.

    -Espero que descanse bien padre – dije apunto de llorar para tirar esta maldita almohada al suelo e irme de hay.

    Lo odio, lo odia más que a cualquiera. Era su culpa, todo era su culpa si no fuera por mi padre yo podía ser feliz al lado de Meito, odiaba a nuestras familias… odiaba a mi padre por ser como era conmigo ¿Cuidarlos? No deseado desperdiciar toda mi vida al cuidado de estos ancianos que solo me han dado disgustos. Hijos… yo se que podre ser como mi hermano, y se que en mi puede vivir vida. Solo era cuestión de tiempo, dije sosteniéndome el estomago... al recibir la esencia de Meito, siento que nueva vida crece dentro de mi ser. Lo creo y si es cierto con esto podría mantenerlo atado a mi.

    Pero mi mayor obstáculo era Kaito, a el no le interesaba del todo Meito. Solo lo utilizaba para ser el quien mandara en esta casa, no se sus intenciones por las que quiere casarse pronto… pero no son buenas seguro.


    Flash Black…

    Ser espectador de tal acto de crueldad en el pateo de este palacio, me di a entender que no debía desafiar las ordenes de mi padre, no importa las injustas que sean… pero no me importaba yo de una o otra forma seria quien fuera el elegido para ser la pareja de Meito en un futuro, ya había cumplido mis diez siete años de edad, y con el estado de depresión y locura en la que se encontraba mi hermano Kaito, no les quedaba de otra a la familia Sakine que aceptarme a mi como la futura pareja de su único hijo. Muchas cosas se definirían esta noche, en ella nuestros futuros, las madres de las familias estaban observándome juzgándome con su mirada, por lo bajo yo sonreía ya que esta seria mi noche, sin mi hermano como obstáculo yo seria quien aspirara al amor de Meito. Siendo cuatro años mayor que yo, nadie quería que yo fuera su pareja, pero mi hermano con solo dos años de diferencia era perfecto para ocupar ese lugar. No podía esconder esta felicidad al estar al lado de el, me sonrojaba el solo verlo, pero el me era indiferente en todo.

    Desde la muerte de su sirviente Gakupo pensaba que seria mi oportunidad de ser yo quien tomara su lugar, pero ese día el se presento luego de varios días en aislamientos, con esa aquella cabellera que el tanto cuidaba con tanto empeño, tomando todo su cabello con su mano izquierda se la corto de un solo tajo con su katana la cual portaba en la mano derecha, enfrente a mi padre y los demás invitados lo arrojo al suelo.

    -Tomare las responsabilidades de nuestra casa, padre – dijo el arrodillándose levemente frente a mi padre, el complacido le hizo levantar la mirada.

    -¡N-No puedes, padre di algo! – Grite para tratar de que se fuera - ¡Esta fuera de si mismo! – nadie me dio importancia y vieron únicamente a mi hermano.

    -Al fin veo que volviste en ti, hijo – pronuncio mi padre para traer a Meito, lo aparto de mi lado y de mi cabello me robo el lazo rojo que sostenía mi cabello largo. Y con ese lazo rojo, ato sus manos juntas. Yo deseaba no estar presente pero por obligación tenia que tragarme esta furia y seguir viendo todo ese espectáculo.

    -Con este lazo, quedaran unidas ambas familias – dijo el padre de quien yo amaba, dándoles su bendición a ambos ¡¿P-Por que tengo que estar presente?! Deseaba salir corriendo pero mi madre me observaba y con su mirada me decía que me quedar quieto, de cuclillas en el suelo.

    -Prometo frente a todos los presentes, que no te fallare. Te entrego a ti en cuerpo y alma- mi hermano musito fingiendo una sonrisa tan falsa. Yo debía ser quien sostuviera la taza de sake para finalizar el acuerdo esta noche.

    -Espero que esta unión logre llenar de paz a nuestra familias que por generaciones se declaraban la guerra – dijo el tomando de esa taza el sake que mi hermano le ofrecía, para hacer lo mismo con el.

    Ambos unieron sus frentes y sellaron el pacto de que en un año de convivencia el matrimonio se efectuaría. Yo estaba destrozado por tal noticia, que cuando todos se fueron yo corrí por todos lados intentando encontrar al bastardo de mi hermano, quien me arrebato lo que yo tanto anhelaba con deseo.

    Al encontrarlo no me imagine que el acto era consumido, se supone que ellos tenían que esperar a la primera noche. Pero decidieron adelantarse, abriendo un poco la puerta de la habitación de mi hermano, los veía abrasados con sus cuerpos completamente desnudos, los sonidos que salían de la boca de m hermano me helaban la piel. Pero me sonrojaban a la vez, noto que lo disfruta rotundamente aumentando mi envidia y odio hacia el.

    Ellos ignoraron completamente que yo los estuve observando todo ese tiempo, hasta el final. A la mañana siguiente las sirvientas arreglaron su cabello, emparejándolo por todos lados… lucia magnifico a mis ojos, esa postura tan orgullosa que el mostraba ocultaba su frustración.

    A Meito le encantaba su cabello de esa manera, yo no me quedaría atrás hice lo mismo aunque solo tenía el cabello un poco largo que llegaba a alcanzar la mitad de mi espalda. Lo corte de igual manera al día siguiente, dejando que las sirvientas me hicieran el mismo corte. Si te gustaba mi hermano por su cabello corto, hare lo mismo con tal de que me notes aunque sea un poquito.

    Fin Flash Black…


    Pero nadie nunca supo que mi hermano llego mas lejos con ese difunto, en sus entrañas llevaba un bebe el cual nunca logro formarse con éxito y murió en su interior. Causándole un brutal daño, ese echo ocurrió días antes de que apareciera ante todos y decidiera aceptar casarse y arruinarme los planes. Solo yo lo supe se donde entero sus restos, y sus esperanzas de lograr tener un hijo de la persona a la cual realmente amo. Yo hubiera querido que lo tuviera así quizás la familia Sakine no lo hubiese aceptado como la pareja del heredero. Pero las deidades no cumplían mis peticiones, cada noche iba a los templos sagrados que rodeaban nuestra casa a pedirle a los dioses que mi hermano falleciera, que ocurriera algo que pudiese evitar ese matrimonio pero mis suplicas nunca fueron escuchadas.

    -Yo seré quien se case con el, no tu – pronuncie lleno de furia al verte tomado de su mano. Dando el típico paseo que siempre hacían por la tarde por los jardines… no lo admites pero te duele pisar el suelo donde corrió la sangre de quien tu tanto amaste.

    Las flores se marchitaron para cuando los preparativos comenzaron, veía el empeño de los sastres al coser tu kimono de ceremonias. Hubiera querido ser yo, pero solo era esperar… el día de tu boda espero que tomes este delicioso te de sakura que prepare para ti.

    Perdóname hermano, pero tu no te casaras con el… camino sobre fuego, el cual será mi castigo cuando todo esto llegue a su fina


    Continuara...
  14. .
    -Se llama Haruki, ahora debe estar durmiendo en el hospital pensaba ir haya para ir a verlo, pero tu estabas en peligro y te fui a ayudar – me dijo dejándome perplejo.

    -U-Usted como se llama – le pregunte

    -Me llamo Ted Kasane ¿y tú? – me dijo con simpatía.

    -Takumi – le dije omitiendo mi apellido--¿P-Puedo ir con usted? – le dije por que no recuerdo como llegar- No conozco este sitio y debo regresar al hospital – dije ante el.

    -Puedes hacerlo, yo te llevare seguro a ese sitio. Es mejor que nos vayamos antes de que despierte ese sujeto y empiece a buscarnos – tomo mi mano y me llevo con el.

    Ted conocía este lugar, me llevo a través de un camino donde había muchas luciérnagas. Me emocione bastante y el me soltó la mano permitiéndome perseguir y jugar con las muchas luciérnagas que volaban en ese sitio, iluminándolo completamente. Pero seguimos el camino, no recuerdo que fuera tan largo pero cuando menos me lo espere habíamos llegado. Entramos al hospital y yo me despedí de el, soltando su mano.

    -Debo volver a mi habitación, espero verlo en el cuarto donde estoy – dije sabiendo que así seria, me escabullí entre las personas y logre entrar a los cuartos volví a mi habitación.

    Pero cuando volví Haruki ya no estaba, pregunte por el a una de las enfermeras y no me quisieron decir nada. Empecé a caminar buscándolo, pero no lo halle. Estaba muy preocupado, a pesar de haber sido poco cuando me acerque a su cama vacía, vi gotas de sangre pero muy poca cantidad, unas cuántas gotas solamente. Pero me alarmaron bastante verdaderamente. Fue hay cuando hoy unos gritos desgarradores provenientes de algun sitio de estos pasillos blancos.

    -¡Por favor haga todo lo posible para salvar a mi hijo! – me dolió ver a Ted llorar, fue mi culpa quizás no debí alterar a Haruki al irme así, se habrá preocupado.

    -Debe pagar las cuotas de hospitalización primero, pero el costo de la operación dudo que pueda pagarlo, lo siento – dijo el bastardo anciano vestido con delantal, era un doctor infeliz.

    Me quede sentado en el pasillo esperando a que papa llegara, me sentía muy mal. Tome unas cuantas monedas que tenia en mis bolsillos, y busque un teléfono de los cuales decían que eran públicos, encontré uno y llame a mi padre Rook.

    -Padre – dije cuando contesto

    -¿Takumi? A que se debe tu llamado, se supone que estas aun en el hospital – dijo algo sorprendido.

    -Ven por favor, hice algo muy malo. Por mi culpa un chico que acabo de conocer esta muriendo – dije empezando a llorar.

    -Iré de inmediato espérame. Veré que puedo hacer para que se recupere, no llores más – corte la llamada para limpiar mis lagrimas

    Fui donde estaba Ted, estaba sentado en una silla de espera. Trate de consolarlo pero no me prestaba atención, permanecí a su lado. Paso alrededor de una hora cuando veo a mi padre entrar por la puerta, le grito llamando su atención.

    -¿Qué debo hacer? – me pregunto viéndome, pero guardo silencio cuando vio a Ted, ambos al cruzar miradas se quedaron completamente callados.

    -¿Padre que ocurre? – le trate de preguntar pero no me respondió.

    -R-Rook - ¿Cómo sabias el nombre de mi padre?

    -Al fin te encontré Ted – dijo padre para abrasar a Ted frente a mí, no comprendía esta situacon.

    -Padre no hay tiempo para explicarme esto que ocurre, pero Haruki necesita de nuestra ayuda – le dije llamando su atención.

    -¿Haruki? – el asombro de mi padre no tenia limites.

    (Fin Pov Takumi)

    (Pov Rook)

    Le había encontrado, no me aparte de su lado. Ted me explico con lagrimas su situación y me pido su ayuda, no me negué ni un instante. Pague la operación de su hijo, me dolió al oír que tenía un hijo de otro, pero estaba solo. Eso me dio esperanzas de quizás volver a conseguir su amor.

    No tengo palabras para describir esto que siento, estaba lleno de dicha al reencontrarme con Ted, el poder verlo, el capturar su cuerpo con un abraso mío. Pero Takumi no dejaba de preguntar como nos conocíamos, no supe que decirle. Dieron la noticia luego de unas horas de que el hijo de Ted estaba a salvo, Haruki ese nombre iba a ser el nombre de mi hijo.

    -¿Dónde te haz estado ocultando?- invadí su espacio, no había nadie… solo nosotros.

    -Y-Yo estaba en un pequeño pueblo, este sitio ah sido mi hogar todo este tiempo– dijo llorando un poco. No soportaba ver sus lágrimas surgir por mi culpa, repartí unos besos en sus mejillas- Siempre te estaré agradecido por lo que haz echo, haz salvado a mi hijo – dijo sonriéndome aun con sus lagrimas fluyendo de sus ojos.

    -Daria mi vida por que ese hijo que tienes, fuese mío – dije para abrasarlo, dejando que nuestros corazones se sintieran otra. Los latidos de nuestros corazones se combinaban en una cálida palpitación.

    -J-Joven Rook – susurro a mi oído para soltarme bruscamente.

    -¿Qué ocurre? – el miraba detrás mío, volteo la mirada y lo noto.

    -¡¿Qué haces con ese prostituto?! – grito con fuerza para caminar con prisa hacia nosotros, me empujo lejos de Ted, y a el le abofeteo frente a mi- ¡Maldito deja a mi pareja en paz! – seguía gritando.

    No lo soporte, le tome de las manos a Kaito apartándolo de Ted… hubo demasiados gritos provenientes de parte de Kaito, que terminaron sacándonos de las instalaciones del hospital. Trataba de evitar que el golpease a Ted, lo tenía sujeto como si fuera una fiera. Este intentaba utilizar sus uñas para arañarle la cara. Nunca en todo este tiempo lo eh visto de esta manera.

    -¡Ya cálmense! – dije poniéndome entre ambos.

    -¡Hazte a un lado! Voy a matar a ese tipejo, ya no soportare que el se interponga entre nosotros ¡Oye Ted, te juro por mi vida que te hare pedazos, maldito!– decía Kaito mirándolo fijamente al mencionado.

    -Ya déjeme tranquilo, yo me fui para que pudiera estar con Rook en paz – dijo Ted con voz quebradiza.

    -¡Mentiroso! Todo lo que dices son mentiras, no te acerques a mi familia por que juro que aunque me pudra en el infierno te destruiré a ti y a tu hijo - ¿Qué? ¿Espera como sabía Kaito sobre el hijo de Ted?

    -¡No te atrevas a lastimarlo, hice todo lo que me ordenaron ustedes! – confeso Ted para tirarse encima de Kaito.

    -Farsante, yo nunca te dije nada sobre que te fueras. Tu te fuiste a buscarte otro amante, eso es lo que es tu Hijo un bastado que ni siquiera debes saber quien es su padre – Kaito recibió un puñetazo por lo que dijo. Pero se lo devolvió luego a Ted, con tales fuerzas que ambos sangraban levemente de sus labios.

    Ambos sujetos de los cabellos uno del otro ahora, empezaron a rodar por el suelo no sabia que hacer ellos estaban sujetos con fuerzas. Oía sus gritos de dolor, pero no lograba separarlos, Kaito se puso encima de Ted para tirar de sus cabellos, levantando su cabeza para luego impactarla con fuerza con el suelo repetidamente… pero Ted no se quedo atrás, pateo en el estomago a Kaito logrando así quedar el encima del otro, hizo lo mismo que Lele hizo el, no me lo creía. Era como si fueran animales. Tuve que solicitar ayuda de los enfermeros para al fin lograr que se soltaran, estaba furioso.

    Pedí a uno de los guardias que los esposaran a ambos, separados por supuesto sentía que si los esposaban juntos ambos terminarían matándose.

    -Me las pagaras, esto no se quedara así bastardo – dijo Kaito con su cabellos todos revueltos, lo tome del rostro forzándolo a verme.

    -Dije que basta – lo solté luego de decírselo - Explícame ahora ¿Cómo es que sabias que Ted tenia un hijo? ¿Quién te lo dijo? – le pregunte insistente cada vez que este evitaba verme a los ojos.

    -Lo adivine – lo abofetee, este me miro sorprendido por mi acción –Puedes pegarle todo lo que quieras al fin de cuentas a ti siempre te importo tu amante. Yo que soy tu pareja nunca me tomaste en cuenta ¡Te di tres hijos! P-Pero tu nunca fuiste capaz de amarme, lo noto por tu frialdad al verme, cuando me besabas seguro imaginabas que estabas con Ted – dijo dejando que algunas lagrimas brotaran de sus ojos azulinos.

    -Eso no te eh preguntado ¿Cómo sabias que Ted tenía un hijo? Incluso ¿Quién te dijo que estaba aquí? – seguí preguntándole, este empezó a reírse.

    -Te maldigo a ti y a tu maldito hijo – dijo mirando a Ted con una sonrisa extraña, lo tome con ambas manos de su rostro - ¿Qué deseas oír? ¿La verdad? Eso nunca… y si llegue aquí, es por Takumi. Venia a llevármelo de regreso a casa, pero que es lo que veo, ambos abrasados como si fueran las victimas de esta situación ¡No te importa como me siento! Tu estarás con ese prostituto, pero no creas que algún estarán juntos antes deberás matarme… ¡Jamás en esta vida te daré la separación! – grito dejando como testigos a las personas que empezaban a ingresar al hospital.

    -R-Rook déjeme irme, no quiero causarle mas problemas con su pareja - dijo Ted dolido, saque mi pañuelo de mi bolsillo, y limpie un poco su rostro limpiándolo del polvo, y con delicadeza contorneo sus delicados labios de los cuales aun había unas ligeras manchas de sangre.

    -Te soltare para que puedas ir con tu hijo, pero no te vayas. Porque ya se donde estas y no pienso dejarte escapar esta vez, Ted – dije dejando un beso en su frente, aumentando maslos celos en Kaito. Con la llave lo libere de sus esposas el fue a las habitaciones.

    Llame con mi celular a uno de mis guardias para que lo siguieran de cerca. Tenia que ser cuidado esta vez… Mientras tanto debía averiguar quien fue el traidor aquí, averiguar quien pudo informarle de todo esta historia a Kaito. Este se negaba a hablar, pero no me esperaba que mi madre viniera también, cuando me vio me ordeno que soltara a Kaito, tuve que hacerlo obligado.

    -Como se te ocurre dar un espectáculo de esta calaña, en un lugar como este – me dijo regañándome. Cuando vi fijo a Kaito, me abofeteo con fuerza - ¡¿Tu fuiste quien lo golpeo de esa manera?! En la vida nunca debes levantarle la mano a tu pareja, míralo bien su rostro y boca están todos heridos– dijo mi madre ayudando a Kaito, ella nunca lo defendió ¿Por qué ahora lo hace?

    -S-Suegra ayúdeme por favor – dijo este llorando encima de mi madre, haciéndome quedar a mi como el agresor.

    -Madre déjeme explicarle – dije para ser frenado por la mirada de mi madre.

    -Iré por Haruki, y nos iremos a la casa de inmediato. En la casa en ese sitio arreglaremos esta situación- ordeno mi madre llevándose a Kaito.

    Se fueron y aproveche para ir en busca de Ted. Mis hombres perdieron su rastro, ¿este sitio no tendrá una salida trasera? Esta vez no te dejare escapar de mi lado Ted, tu volverás a mi lado aunque sea a la fuerza, corrí a la salida y fui a rodear este sitio me agotaba bastante, pero con suerte mi idea resulto. Lo vi hay, corriendo por los pastizales que crecían por esos sectores huyendo de este sitio. Lo comencé a seguir con cuidado, no le dejaría que me viera quería saber donde vivía.

    Fueron unos cuantos minutos de caminata, lo vi llorar cuando se detuvo por escasos segundos en un lago, para seguir su camino. Estaba tan cerca y lejos de el, pronto los pastizales secos se convirtieron en una acera mal echa, era un barrio muy precario pero lucia humilde a la vez. Se detuvo en una casa, toco un par de veces la puerta para ser recibido por una mujer de apariencia rebuscada, con la cabeza baja entro a la casa.

    -Así que hay vives- dije saliendo de mi escondite.

    Me volví a esconder al ver salir a alguien de la casa ¡¿Kiyoteru?! ¡¿Qué hace el aquí y aun mas con Ted?! Este estaba sonrojado cuando el le entrego en sus manos un paquete envuelto ¿Qué te dio? Quisiera saberlo... al irse le seguí cuando Ted cerró su puerta. Cuando lo alcance lo tome del cuello de su camisa… Este estaba perplejo al verme en este lugar.

    -Rook ¿Qué haces en este lugar? – pregunto un poco nervioso pero supo disimularlo bien.

    -Lo mismo quisiera preguntarte pero ya lo vi todo… ¡¿Tu mas que nadie sabia lo que sufría por no poder encontrar a Ted?! Y tú traidor sabias de su paradero – dije golpeando su cabeza contra la pared de una de las tiendas que había en ese sector.

    -Cálmate, no fui yo quien no quiso decírtelo – dijo tratando de tranquilizarme – Ted me suplico que no te dijera del lugar donde estaba oculto, pidió mi ayuda ya que no podía estar tranquilo el trabajar y cuidar a su hijo, lo dejaba fatigado. Yo fui su soporte, estuve a su lado cuando me necesitara yo acudía sin dudarlo. Hace poco incluso le confesé mi sentimientos, siendo rechazado por tu culpa- el me tomo con su fuerza del cuello de mi camisa también.

    -Si no estuve a su lado, fue por tu culpa bastardo. Tu deber era decirme lo que sabias – Estaba furioso deseaba matarlo- Yo debía estar a su lado todos estos años, hubiera aceptado a su hijo como si fuera mío – le dije para darle un puñetazo directo al rostro, haciéndolo caer al suelo.

    -Por tu maldito recuerdo, nunca logre entrar a su corazón… pero a diferencia de ti, yo no me daré por vencido, nunca lo lastimare como tu lo haces ¿Quieres jugar dos los personas? Tú planeas seguir teniendo a Ted como tu amante ¿Qué vida es esa? – me recrimino para recoger sus lentes del suelo.

    -Esta vez le daré el lugar que le corresponde – le dije para verlo irse como si nada.

    Este día me lleve bastantes sorpresas, pero a quien deberé agradecerle será a mi hijo Takumi, si no me hubiera llamado nunca hubiera encontrado a Ted.

    Llame a mi chofer para que me viniera a buscarme, pero antes de irme de este lugar anote la dirección de este sitio, no me daré por vencido. Ted te volveré a enamorar, conseguiré que regreses a mi lado. Pero esta vez te protegeré para que nadie te aleje de mi lado.

    -Volveré para llevarte conmigo, a nuestro hogar – dije al subir al coche que vino por mí.

    Tenia que ir a casa, mi madre me ah dejado bastantes recados con mis secretarias para que acuda a la casa inmediatamente.

    (Fin pov Rook)

    (Pov Meito)

    La familia estaba reunida en la sala. Quise ser yo quien curada tus heridas ¿Cómo Rook fue capaz de lastimarte de esa forma? Solo me contuve para no matarlo cuando oí que la señora menciono que te agredió. Me lleve a Takumi su habitación… lucia confundido por algo.

    -Oiga ¿P-Papá estará en problemas por mi culpa? – dijo el niño apenado con sus manos juntas recostado en su cama.

    -¿Por que a de haberlo? – pregunte escuchando atentamente lo que decía.

    -Todo fue mi culpa, el que papá y padre se hayan peleado. No debí escaparme, si no hubiera conocido a ese sujeto que me ayudo nada de esto habría ocurrido- me confeso angustiado dejando que una lagrima saliera de sus ojos.

    -¿Sujeto? ¿Qué paso? – le cuestione acercándome a el, para por primera vez acariciar con delicadeza su mejilla sin ser rechazado.

    -S-Su nombre era Ted, ayer en la noche me escape del hospital… pero lo que me hizo esa persona jamás lo podría olvidar si Ted no hubiera intervenido, el fue mi salvador me rescato de las manos de ese sujeto – dijo para detenerse ¡¿Ted?!

    -¿Q-Que fue lo que te hizo esa otra persona? – pregunte angustiado, necesitaba oir lo que tenia que decirme.

    -E-El me tocaba, q-quería abusar de mi – dijo empezando a sollozar, le di mi apoyo y lloro en mi pecho- Pero mi salvador me ayudo, y me llevo de regreso al hospital, fue hay que me di cuenta que era el padre de mi compañero de habitación, si no lo hubiera alterado no hubiera puesto su vida en riesgo. Yo llame a mi padre y le pedí que vinera, pero cuando llego todo se volvió confuso – dijo para calmarse un poco.

    -¿Cómo que confusos? – dije acariciando con mis manos sus cabellos marrones.

    -Al parecer se conocían ellos desde antes, empezaron hablar de cosas extrañas. Luego me dejaron en mi habitación y se fueron, luego no se que ocurrió. Oía gritos y cuando se detuvieron


    Continuara...

    Lydya Lys Cartlon: Gracias por comentar, aqui la conty
  15. .
    Si es muy lamentable... pero sera mas lamentable como terminara esto...
    Ni yo lo se, por que aun no le encuentro el final adecuado
1364 replies since 21/3/2014
.